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viernes, 15 de septiembre de 2023

septiembre 15, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 177

Capítulo 177. Un Poco Más

Su elástica apretó lamió su hendidura durante largo rato. Annette se retorció para intentar zafarse de la placentera sensación, pero en lugar de eso fue como si frotara su zona ínt!ma contra la lengua. Raphael, que levantó su cara, le dio una n@lgada a Annette.

"¡Ah!"

"No te muevas. Si lo vuelves a hacer, te ataré firmemente."

Era un hombre realmente malo. La tímida Annette enterró su cara en la almohada. Las sensaciones se volvieron más vividas cuando renunció a resistirse. Cuando él succionaba su cl!t0ris, se producían sonidos excesivamente lascivos. Él no podía apartar la boca de sus piernas como si fuera un oso lamiendo miel. Al final ella tuvo un leve org@smo .

"Oh, hmm…!"

"¿Te veniste tan pronto?"

Raphael, que se lamió sus labios húmedos, se bajó los pantalones. Su gl@nde brillaba con un líquido resbaladizo. Frotó con su virilidad alrededor de la hendidura de Annette. Él disfrutó de la húmeda sensación. Cuando su virilidad tocaba el cl!t0ris, las caderas de ellas se estremecían involuntariamente. Entonces Raphael le dio otra nalgada.

"¡Ah!"

"Te dije que te quedaras quieta. No seas impaciente. Te la meteré pronto, espera un poco."

Después de disfrutar del juego previo, él finalmente lo introdujo. Su gruesa virilidad se movió a través de sus sensibles paredes internas. Annette, que no soportó la abrumadora sensación, agarró con fuerza la sábana. Raphael le mordió el cuello.

"Estás demasiado apretada. Relájate un poco."

"...¡Ahh!"

Raphael abrió con ambas manos la raja entre las n@lgas de Annette. Y miró fijamente hacia la zona donde sus g3nitales estaban entrelazados. Parecía como si quisiera mirar las entradas de ella con su virilidad dentro.

Annette tenía las orejas rojas de la vergüenza. Raphael estaba viendo lascivamente como la pen3traba. Totalmente incapaz de soportarlo, intentó esconder su trasero con sus manos.

Pero no pudo porque Raphael tiró de sus brazos hacia atrás. Y dijo de forma sensual.

"Te he dicho que no te muevas."

"¡Ahh!"

La parte superior del cuerpo de Annette se arqueó hacia atrás debido a que sus brazos fueron atrapados por Raphael. Entonces sus paredes interiores se tensaron, apretando aún más fuerte su virilidad. Raphael soltó un grueso gemido.

"¡Ahh! ¡Hmm! ¡¡Ahh!!"

Cada vez que él tiraba su cuerpo hacia atrás por los brazos, parecía que su virilidad llegaba más profundo. Era como si su virilidad estuviera literalmente empujando su estómago. Su mirada se volvió borrosa. Annette sollozó.

Era fascinante como su virilidad abría sus estrechas paredes internas. El interior de su cuerpo hormigueaba. Ella apretaba constantemente su virilidad involuntariamente. Entonces Raphael soltó los brazos y volvió a presionar su cuerpo hacia abajo.

"Es difícil moverse porque estás muy apretada, Annette."

"¡Hmm! ¡¡Ahh!!"

"¿Te gusta? Tu interior está temblando."

Él sonrió perversamente. Él frotó el tr@sero de ella. Sus manos estaban calientes mientras tocaba su suave piel. Pronto bajó su mano para estimular su cl!t0ris, que estaba bastante hinchado. Los ojos de Annette se quedaron en blanco. Ella alcanzó varios org@smos leves.

"¡Ahh! ¡Ah! ¡¡Ahh!!"

Raphael, que había estado satisfaciendo su codicia, finalmente volteó el cuerpo de Annette. Fue agradable mirar su esbelta espalda, pero esta vez quería chuparle los s3n0s. Chupó las puntas de sus dulces s3n0s color melocotón. Sus paredes internas, que sufrían pequeños calambres, apretaron su virilidad. Raphael movió su cintura con más intensidad.

"¡Ah, suficiente! ¡Ahh!"

Annette gritó al alcanzar el cl!m@x nuevamente. Sus grandes manos le apretaban los s3n0s, mientras su formidable virilidad seguía estimulando sus atormentadas paredes interiores. Ella no podía soportarlo. Ella temblaba de placer.

"Por favor, no más... ¡¡¡Ahh!!!"

Parecía que las abrumadoras sensaciones fueran a quemar su cuerpo. Parecía que ella había llegado a su límite. Ella intentó apartarlo con su mano. Pero su mano fue aplastada por Raphael contra la sábana blanca. Raphael le mordió el cuello y le susurró.

"Un poco más, dama."

En la oscuridad, sus ojos azul oscuro brillaban como un leopardo que ha atrapado a su presa.

lunes, 11 de septiembre de 2023

septiembre 11, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 176

Capítulo 176. Guantes

Por otra parte, Annette estaba nerviosa. Ella había regresado a casa antes que Raphael. Le preocupaba que algo saliera mal en el palacio real. Pero no sabría la respuesta hasta que Raphael regresara.

Ella sabía exactamente cuál era la mejor manera de calmar su ansiedad. Un pasatiempo. Iba a buscar su bastidor de bordado cuando de repente se detuvo. 

Ahora es invierno, así que tal vez sería mejor tejer algo.

Ella decidió hacer unos guantes por primera vez en mucho tiempo. No importaba de qué tipo fueran. Ella no podía llevar guantes tejidos debido a que pertenecía a la nobleza, pero podría regalarselos a alguien cuando los terminara.

Annette solía regalar los artículos que tejía a mano a las sirvientas de su familia. Afortunadamente, ellas aceptaban encantadas las cosas que ella hacía con hilo de la más alta calidad. De repente, ella sintió que su corazón se calentó al recordar aquello.

Tengo mucho tiempo sin tejer guantes, pero tengo que hacerlos bien porque serán un regalo. Luego pasar por casa de mi padre para entregárselo a las sirvientas.

Tejer guantes requería mucha concentración. Si se hacía mal, el espacio entre los dedos podía quedar demasiado ancho o demasiado estrecho, así que no se veía estético. Annette comenzó a tejer los guantes con más concentración que nunca. Se centró tanto en el par de guantes, que cuando terminó se había vuelto de noche.

"Haah."

Annette levantó la cabeza mientras se frotaba la nuca con la mano. Había estado en una posición encorvada. Entonces se encontró con un par de ojos brillantes que estaban sentados al otro lado de la mesa mirándola.

"¡¡......!!"

Se quedó sin palabras. Annette se asustó tanto que se le puso la piel de gallina. Ella se abrazó a sí misma con ambos brazos. Raphael se avergonzó al ver su reacción.

"No pensé que te sorprenderías tanto. Quizá debería haber dado alguna señal de mi presencia."

"¡Raphael! De verdad creí que se me iba a salir el corazón."

Annette gritó. Ella siempre se mantenía tranquila, pero se sobresaltó con facilidad. Raphael no pudo evitar que la comisura de sus labios se levantaran ante aquel rostro agitado. Incluso su reacción le parecía adorable. Ella lo fulminó con la mirada, e hizo un mohín con sus labios. En ese momento él quiso morder su boca.

Me gustaría que se enfadara más seguido.

Raphael sacudió rápidamente la cabeza para borrar sus absurdos pensamientos. Entonces recogió un par de guantes que se habían caído del regazo de Annette en medio de toda esta conmoción. Los guantes, con un patrón de copos de nieve blancos sobre un fondo azul oscuro, se veían hermosos. Raphael le preguntó a Annette.

"¿Son míos?"

Annette iba a responder que no, pero se detuvo. Ella había aprendido durante los últimos cinco años de su matrimonio que su esposo era estrecho de mente. Si ella decía que no, seguro se enfadaría. Raphael le preguntaría a quién demonios le había hecho unos guantes que ni siquiera podía tener su esposo.

Ella sonrió cuando en un instante el futuro pasó ante sus ojos. Fue una sonrisa ambigua, ni negativa ni positiva. Raphael entrecerró los ojos. Él pensó lo que quiso como de costumbre. Sí, esto debe ser mío.

"Tus manos son bastante hábiles. Pero son un poco pequeños para mí."

Raphael, que metió la mano en un guante, giró la mano varias veces. Se podía mirar la parte inferior de su mano. Raphael no sólo era más alto, sino que sus manos también. Annette estaba avergonzada. Ella extendió su mano para quitarle el guante.

"Seguro he medido mal. Dámelos Raphael."

Sin embargo, Raphael la abrazó con un brazo sin dificultad. De repente, ella que atrapada en su costado, forcejeó pero no pudo zafarse fácilmente. Los profundos ojos azules de Raphael sonreían de alegría.

."Cuando algo está en mis manos, es mío."

Susurró con picardía. Era como si se hubiera convertido en un secuestrador de damas nobles. De repente su visión cambió por completo cuando Raphael la levantó. Ella rodeó su cuello con su brazo. Él fue directamente a la habitación para disfrutar.


"¡No, no me lamas...!"

Annette, que estaba tumbada de espaldas en la cama, suplicó. Había varias almohadas blandas bajo su vientre. Por eso sus nalgas estaban bastante altas. Raphael agarró firmemente sus n@lgas con sus grandes manos. Entonces sacó la lengua y comenzó a lamer la piel roja que había entre ellas.

"'Hmmm, ah..."
septiembre 11, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 175

Capítulo 175. De Hombre a Hombre (2)

Por esa razón, Ludwig tendría que intervenir. Ahora él debía proteger el corazón de Annette, al igual que ella sostuvo con ternura su corazón herido. Ludwig estaba decidido.

"Tengo una sugerencia para ti. Sobre Annette."

"¿Cuál?"

Cuando apareció el nombre de Annette, los ojos de Raphael se volvieron aún más feroces.  Ludwig habló en voz baja mientras miraba los ojos azules que se parecían a los suyos.

"Tarde o temprano, nuestra conversación llegará a oídos de Su Majestad. No hay lugar que esté fuera del alcance de los ojos y oídos de Su Majestad."

"......"

"Así que mañana visitaré a Su Majestad. Le diré que eres demasiado arrogante y no tienes ningún respeto por el futuro Rey. Por esta razón, pienso deshacerme de ti cuando me convierta en el Rey."

Cuando Ludwig terminó de hablar, ladeó la cabeza. Parecía que le preguntaba a Raphael si había entendido lo que quería decir. Raphael entrecerró los ojos mientras reflexionaba sobre sus palabras. Ludwig, que se dio cuenta de ello, añadió.

"Su Majestad se alegrará mucho cuando le diga esto. Él sembró deliberadamente la discordia entre nosotros dos, ¿no lo crees?"

Raphael asintió puesto que todo lo que decía era cierto. Ludwig sonrió satisfecho porque la conversación iba mejor de lo que esperaba. Entonces reveló el plan en el que había pensado durante mucho tiempo.

"En ese caso, Su Majestad sin duda me utilizará como herramienta. De todos modos, eso es lo que ha estado tratando de provocar durante todo este tiempo. Entonces será mucho más fácil confirmar lo que Su Majestad realmente está tramando. Yo sería como un espía." 

"...No estoy seguro de que vaya a funcionar. Su Majestad no es tan fácil de engañar. Existe la posibilidad de que sospeche de tus verdaderas intenciones."

Raphael criticó el plan. Entonces Ludwig asintió como si lo hubiera esperado.

"No te preocupes. Puedo añadir algo convincente. Si le digo una buena razón Su Majestad no sospechará. Y tengo una sola razón creíble"

"¿Cuál?"

Raphael preguntó sarcásticamente con los brazos cruzados. La seguridad de Annette dependía de ello, así que nada podía hacerse a la ligera. A él todavía Ludwig no le parecía un aliado fiable. Ludwig sonrió ante la sospecha de Raphael.

"Le pediré que me entregue a Annette a cambio de participar en el plan para deshacernos de ti. En ese caso, no creo que su Majestad dude de mis verdaderas intenciones. No hay nadie que no sepa que Annette me gusta."

"......!!"

Esta vez fue Raphael quien recibió el golpe. Fue tan inesperado que casi se lo reprochaba al Príncipe Heredero al instante. ¡Cómo se atrevía a deshacerse de él para tener a Annette! Este maligno plan le daba rabia de solo pensarlo.

Afortunadamente, antes de que Raphael pudiera causar alguna falta de respeto a la familia real, Ludwig puso una expresión seria. Ahora no era el momento para bromas.

"De todos modos, finalmente has alcanzado el reino de Maestro de Espadas. Por esa razón, Su Majestad no puede hacer nada imprudente. Te has vuelto alguien demasiado importante. Así que seguramente necesitará mi ayuda para eliminarte. Permaneceré cerca de Su Majestad para averiguar qué sucede, mientras tú protegerás a Annette. ¿Me entiendes?"

"Ella siempre estará a salvo a mi lado."

Respondió Raphael con firmeza. Ludwig asintió en silencio. De hecho, ahora que su esposo era Maestro de Espadas, Annette estaba más segura que nunca. Raphael añadió.

"Tú también debes proteger a la hija del Marqués Keers."

"...¿Eh?"

"¿Qué es tan sorprendente? Será tu futura esposa. Su Alteza debe protegerla, ¿No?"

A Raphael no le agradaba el comportamiento de Ludwig desde hacía un momento. No sólo no le prestaba atención a su prometida, sino que pensaba en la mujer de otro.

Por supuesto, Celestine Keers se mantendría a salvo sin muchos problemas. Puesto que ella era la marioneta que el Rey había elegido para Ludwig. Aunque el Rey la utilizara a ella según sus caprichos, al menos el ascenso de su familia estaba garantizado. De hecho, el padre de Celestine ya se había convertido en un fiel seguidor del Rey.

Raphael ignoraba que su forma de pensar era similar a la de Celestine. Aunque lo hubiera sabido, lo habría negado hasta la muerte. Raphael, a quien se le trabo la lengua al pensar en Celestine, decidió decir algo positivo de ella en este momento.

"La hija del Marqués Keers es una dama muy refinada. Estoy seguro de que será una buena Princesa Heredera. Así que cuida bien de tu prometida."

La boca de Ludwig se quedó bloqueada. Raphael prácticamente le había dicho de forma diplomática que se alejara de su esposa. 

"Entonces te dejo ahora. Su Alteza el Príncipe Heredero."

Tras asestar un magnífico golpe, Raphael abandonó el palacio del Príncipe Heredero con la barbilla en alto. No hace falta decir que sus pasos fueron más ligeros en su camino a casa.

lunes, 4 de septiembre de 2023

septiembre 04, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 174

Capítulo 174. De Hombre a Hombre (1)

Raphael había heredado los ojos azul profundo del Rey Selgratis. Sin embargo, había otro hombre en el palacio real con ojos similares a los suyos.

Además, como ese hombre tenía el cabello plateado tan claro como el hielo, parecía haber nacido del aliento del invierno. Sus labios rojos, que demostraban que circulaba sangre en él, se movieron de forma desafiante.

"Hablemos un poco. De hombre a hombre."

Raphael chasqueó su lengua al igual que la última vez. Annette le había dicho que Ludwig tenía la disposición de un artista, pero carecía de originalidad para comenzar una discusión. Sería realmente lamentable si esas fueran las limitaciones del Príncipe Heredero.

En cualquier caso, Raphael lo siguió tranquilamente. Ludwig lo condujo a un salón privado del palacio del Príncipe Heredero. Ludwig, que se sentó en una silla ornamentada, miró fijamente a Raphael con sus ojos azules. Raphael se mantuvo de pie. Porque no podía sentarse a menos que el Príncipe Heredero se lo permitiera.

"...Siéntate."

Ludwig le permitió tomar asiento. Cuando Raphael se sentó en la silla de enfrente, no pudo evitar fruncir el ceño. Afortunadamente, no tendría que mantenerse de pie durante la conversación, pero que tuviera que esperar para sentarse lo hizo sentir peor. 

Raphael miró a Ludwig sin relajarse. Él miró a Raphael en silencio durante un rato. Finalmente los labios de Ludwig pronunciaron algo.

"Te odio."

¿Qué quiere que haga? A Raphael no le importaba. Esperaba que no lo hubiera traído aquí para hablar de eso. Sólo quería regresar pronto a casa para ver a Annette.

Pero el rostro de Ludwig parecía renovado después de decir esas palabras triviales, así que su belleza ahora brillaba. La tensión en sus hombros desapareció. Y apoyó su espalda en el respaldo. Parecía un príncipe salido de un cuento de hadas.

Ludwig, que no sabía los pensamientos de Raphael, abrió la boca con una sonrisa.

"Te lo he dicho directamente, así que me siento aliviado. Estoy seguro de que necesitaba hacerlo. He estado intentando engañarme a mí mismo. Me reprimí al vivir como los demás quieren que viva. Tampoco puedo ser tú. ¿Por qué no me di cuenta antes?"

Ludwig, que no dudó en admitir su complejo de inferioridad respecto a Raphael, soltó una carcajada. El confundido Raphael frunció el ceño ante la actitud de Ludwig. Ludwig murmuró mirando una cara con un encanto varonil a diferencia de la suya.

"Eres como una espina bajo mi uña. ¿Debería decir que tu presencia es un molesto recordatorio de lo que a mí me falta? Cada vez que te veo me siento incómodo. Y tú fuiste quien me quitó todo lo que quería."

Raphael tenía literalmente todo lo que Ludwig quería. Un talento para el manejo de la espada, la mujer a la que amaba e incluso el reconocimiento de su padre. Por supuesto, el reconocimiento de su padre se malinterpretaba por el contexto.

Pero Ludwig todavía lo envidiaba a muerte. En particular, el hecho de que la esposa de Raphael fuera Annette Bavaria le dolía demasiado. Ludwig, que cerró los ojos brevemente para intentar librarse de sus oscuros celos, abrió la boca con tranquilidad.

"Pero tú no tienes la culpa de haber nacido con tantos talentos. Como tampoco es culpa mía haber nacido así. ¿No?"

"...Lo siento."

Raphael no estaba seguro de qué respuesta sería apropiada en esta situación. No entendía porque él estaba diciendo tantas tonterías. No sabía cómo debía tratar a Ludwig.

Aunque Annette intentó persuadirlo, Ludwig todavía estaba pensándolo. En otras palabras, significaba que no se sabía si era enemigo o un aliado. Y ahora que se había reunido a solas con Ludwig, debía hablar con cuidado. Eso le produjo un terrible dolor de cabeza.

Ludwig se encogió de hombros ante la expresión precavida de Raphael. En el pasado a Ludwig le parecía que él no le prestaba atención a sus palabras. Pero ahora que había expresado su oscuro complejo de inferioridad, Raphael no parecía tan despreocupado como antes. Eso hizo que felicitarlo fuera más fácil de lo que pensaba.

"He escuchado que te has convertido en un Maestro de Espadas. Enhorabuena."

"Gracias."

"Es una gran bendición tener a una persona con tanto talento en Deltium. Entonces, ¿hay algún secreto para lograr esa asombrosa hazaña? Tengo curiosidad."

"...Tener a alguien a quien proteger."

Raphael respondió sin dudarlo con un rostro inexpresivo. Pero bajo sus cejas le brillaron los ojos. Era como si sus ojos le enviaran una advertencia tácita a Ludwig. Ludwig, que se dio cuenta de ello, esbozó una amarga sonrisa.

"Sí, supongo que sí. Probablemente podrás hacerlo. Porque eres diferente a mí. "

Annette debería estar a salvo. Porque este hombre parecido a una pantera negra siempre la protegería de alguna manera. Pero protegerla no bastaba. Porque Annette siempre estaría nerviosa mientras la causa del peligro aún persistía. De ese modo, su tierno corazón se iría desgastando poco a poco.

viernes, 1 de septiembre de 2023

septiembre 01, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 173

Capítulo 173. Prestigio del Reino

Annette le explicó a Celestine.

"Raphael les dirá a los nobles que se encuentren hoy en el palacio real que se ha convertido en Maestro de Espadas. De esa manera el rumor se extenderá rápidamente. Entonces Su Majestad no podrá deshacerse fácilmente de Raphael. No importa lo que digan, se ha convertido en un héroe que aumentará el prestigio del reino."

"Entonces esto nos dará tiempo, ¿verdad?"

"Sí. Al menos durante un tiempo, la atención del público estará en Raphael."

"Quizás no debería decirlo en estas circunstancias… pero felicidades de todos modos. Él pudo convertirse en Maestro de Espadas. ¡Es algo honorable para la familia Carnesis!"

Celestine abrazó a Annette como si fuera su hermana.

Recientemente ella se había sorprendido cuando se enteró que el Rey había intentado asesinar a Annette con veneno. Aprovechó para sobornar a su médico.

A Celestine se le puso la piel de gallina al pensar de nuevo que se enfrentaba al Rey de un reino. Si no hubiera sido por Annette,ella no habría podido hacer nada. No se habría atrevido a enfrentarse al Rey, que podría manipularla como una marioneta.

"¿Y qué piensas hacer con la médico? ¿Lo encerraste para que fuera un testigo más?"

Ella le preguntó a Annette de repente sobre ese tema. Annette le explicó lentamente.

"Sí. También le pedí que informara periódicamente a Su Majestad como antes. Para que él no se entere que lo hemos descubierto. Eucaly suele interactuar con un intermediario, creo que puedo atraparlo tarde o temprano. He preparado una trampa de antemano."

"Impecable como siempre, Annette."

Celestine miró a Annette con admiración. Se sentía afortunada ahora que estaba a su lado. Celestine nunca había tenido una pesadilla desde que estaba en el mismo barco que ella. Había llegado el momento de dejar atrás el pasado. Annette era la responsable de que desarrollara el valor necesario para superar el trauma. Entonces añadió.

"Muchas gracias. Estás haciendo tanto que me siento avergonzada de mi poco aporte. Pero, recuerda siempre que estoy de tu lado. Ahora eres mi amiga más preciada."

Celestine tímidamente. Sus ojos verdes se parecían a los de un gato. Su expresión resultaba especialmente tierna. Annette tomó sus manos con una sonrisa.

"Yo soy la que debe agradecerte. Siempre te estaré agradecida por tu amistad. Aunque no soy la jefa del Ducado Bavaria, ni el Marquesado Carnesis... Te prometo que las familias a las que pertenezco nunca olvidarán tu ayuda."

Annette besó a Celestine en la mejilla.

"Gracias, Princesa Heredera."

"......!!"

El rostro de Celestine enrojeció rápidamente. Ella retiró suavemente sus manos, y agarró su pecho ante el inesperado ataque. A Celestine le agradaba Annette, pero ella tenía la mala costumbre de golpear a la gente en el corazón de vez en cuando.

***

Al salir de la sala de audiencias del rey, Raphael miró hacia el cielo. Se había oscurecido en algún momento. Soltó un largo suspiro. Siempre era agotador conversar con el Rey.

¿...Te has convertido en Maestro de Espadas?

Cuando el Rey escuchó la noticia de Raphael, lo miró medio incrédulo como si no pudiera creerlo en absoluto. Raphael pudo notar el sutil cambio en su expresión. Parecía que su información le causó frustración al Rey. Quizá su logro de Maestro de Espadas había sido más rápido de lo que esperaba, por lo que sus planes se verían afectados de algún modo. 

Debemos correr el rumor lo más pronto posible de que te has convertido en Maestro de Espadas. Sólo entonces podremos ganar tiempo. Si tienes la atención de otras personas, Su Majestad no será capaz de tocarte imprudentemente.

Como había dicho Annette, el Rey se mostró nervioso ante la inesperada situación. Era la segunda vez en la historia que aparecía un Maestro de Espadas en un reino como Deltium.

Aunque el Rey estaba alarmado de que Raphael hubiera alcanzado ese asombroso umbral, probablemente estaría ocupado pensando cómo podría utilizarlo en beneficio de Deltium. Gracias a ello, era menos probable que se diera cuenta que habían descubierto a Eucaly. 

Raphael se marchó después de completar la misión que le pidió Annette. Quería regresar a casa lo antes posible, para besar su mejilla. Pero alguien bloqueó su camino.

¿Otra vez?

Ya había experimentado esta situación en el pasado. Una expresión de desagrado apareció en su rostro. La persona que tenía enfrente no era otro que el Príncipe Heredero Ludwig.
septiembre 01, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 172

Capítulo 172. Sólidas Pruebas

Annette se rió torpemente al escuchar las quejas de Celestine, que acababa de discutir con su padre. Ella se disculpó porque eso sucedió por su culpa.

"Me siento mal porque discutiste con tu padre. Lo siento."

"Piensa que su hija es una tonta, por eso no me hace caso."

Celestine contestó con la cara enojada. Ella barrió con su mano su cabello castaño. Se parecía a su padre aunque no se diera cuenta de ello. Entonces añadió.

"Annette. ¿Por qué no le presentas alguna prueba a mi padre? Por ejemplo, el cochero que hemos capturado. Ahora mismo está bajo nuestra custodia. ¿Por qué no se lo muestras a mi padre un momento? Entonces podría creerlo."

"Honestamente, no sé si es una buena idea. Sabes que tenemos que tener cuidado. No dudo del Marqués... pero Su Majestad podría descubrirnos."

Annette bajó sus pestañas doradas. Realmente había otro motivo más.

Su cochero Ivan era el tío materno de Raphael. Existía la posibilidad de que sacara a relucir la historia de la madre de Raphael delante del Marqués Keers. Literalmente sería una catástrofe. Era aún más peligroso porque el Marqués Keers había decidido obedecer al Rey.

Afortunadamente, Celestine tampoco era una persona testaruda, así que comprendió de inmediato las palabras de Annette. Entonces Celestine murmuró.

"No sé por qué no me cree. Tengo miedo de que mi padre agrave la situación. Sé que él solo se preocupa por mi bienestar. Pero me frustra que no sirva hablar con él."

"Puedo simpatizar contigo. Sé cómo te sientes."

Lo mismo le pasaba a Annette. Ella tampoco sabía que pensaba hacer su padre. Se estremeció al pensar en su padre como una serpiente blanca escondida. De todos modos, afortunadamente Allamand no era alguien que el Marqués Keers pudiera vencer fácilmente.

Pasará algún tiempo antes de que se resolviera la situación. Hasta entonces, parecía mejor dejar el conflicto político en manos de sus padres. Lo único que Annette tenía que hacer ahora era encontrar pruebas de lo que había hecho el Rey. 

Ella le dio una suave palmada en el hombro a la encorvada Celestine.

"No te preocupes demasiado. Si hacemos bien nuestro trabajo, podremos encontrar sólidas pruebas... el Marqués creerá nuestras palabras. La verdad acabará saliendo a la luz."

"Espero que ese día llegue más pronto que tarde. ¡Me gustaría agarrar a ese cochero de inmediato, y acusar a Su Majestad delante de todos los nobles! Pero es desesperante que no se pueda resolver la situación de esa manera."

"Lamentablemente no. Solo en el ajedrez un peón puede capturar al Rey."

Annette se encogió de hombros. Si un simple cochero se atrevía a acusar al Rey, él podría evitar cualquier culpa simplemente diciendo, '¡Cómo se atreve un pobre hombre a acusar falsamente al Rey!' En ese caso, no se podía hacer más nada. 

Se necesitaban pruebas más serias.

"Por cierto, tengo noticias que quiero compartir contigo."

Annette sintió la necesidad de cambiar la atmósfera. 

Celestine mostró inmediatamente interés por el nuevo tema.

"¿Qué quieres contarme? ¿De qué se trata?"

"Mi esposo fue hoy al palacio real a visitar a Su Majestad. ¿Cuál crees que es el motivo?"

"No se me ocurre nada."

Celestine miró angustiada el rostro sonriente de Annette. En realidad no le agradaba mucho el esposo de Annette. El hombre guapo, pero muy orgulloso.

Pero al menos a Annette le parecía un buen esposo. El otro día Celestine vio como él mismo le tomó la temperatura a Annette con la mano, porque estaba preocupado de que ella se hubiera resfriado. Además, eligió a su esposa por encima de su padre. 

Fue una decisión tan importante, que incluso Celestine que no le agradaba Raphael, tenía que reconocerlo. Sin embargo, ella no podía suponer por qué Raphael fue hoy al palacio real para reunirse con el Rey. Annette, que miraba los ojos verdes de Celestine, susurró. 

"Es la primera vez que lo digo. Hace poco se convirtió en Maestro de Espadas."

"...¿De qué estás hablando? ¡¿Maestro de Espadas?!"

Celestine estaba sorprendida. Maestro de Espadas era un talento tan raro que sólo había uno o dos por generación. Además, suele aparecer en lugares grandes como el Imperio Chapelle, ¡Y rara vez en un reino como Deltium!

Sin duda era un acontecimiento extraordinario. Celestine pensó.

Realmente es un hombre desafortunado.

Raphael era un hombre que lo tenía todo menos el linaje. Celestine sintió un complejo de inferioridad al recordar su arrogante rostro. Siempre había sido un hombre orgulloso, pero ella se preguntó cómo se vería la próxima que se encontrara con él ahora que se había convertido en Maestro de Espadas.

domingo, 27 de agosto de 2023

agosto 27, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 171

Capítulo 171. Marqués Keers

***

Celestine salió rápidamente del salón enfadada. Detrás de ella, se escuchó la voz de su padre que la llamaba. Él también parecía enfadado, pero su voz no podía ocultar su afecto.

El Marqués Keers era un excelente padre para su familia. Aunque la gente se burlaba de él llamándolo esposo sometido, él siempre anteponía a su esposa y su hija. Pero esta vez, ese afecto lo mantenía ciego. Celestine estaba desconsolada.

¡Sí! ¡No fue Annette quien me secuestró! ¡¡Ella también es una víctima!! ¡¡¡El verdadero culpable es otra persona!!! ¿Por qué no me crees?

Celestine repitió varias veces lo mismo a su padre. Pero el Marqués Keers no quiso creerle tan fácilmente. Pensó que la astuta Bavaria había engañado a su hija. En estos casos, la fama de sangre fría de los Bavaria influía negativamente.

El secuestro no sólo dejó profundas cicatrices en Celestine. Una cicatriz quedó grabada en el corazón de todos los miembros de la familia que la querían.

En aquel momento, el Marqués Keers estaba literalmente desolado. Su querida hija, que había sido secuestrada de repente, estaba en una situación peligrosa. No se sentiría vivo hasta que recuperara a su hija. 

No tenía ni idea de donde estaba su hija, o que le estaba sucediendo. No podía llevarse ni siquiera agua a la boca, sólo se jalaba los cabellos debido a la ansiedad.

El Marqués Keers se dio cuenta de su incompetencia como jefe de familia. Pensaba que mientras tuviera una familia, el honor no tendría ninguna importancia. No le importaba que la gente lo tratara como un noble caído. Porque tenía una esposa y una hija que no podía reemplazar de ninguna manera.

Pero la realidad era que sin poder, ni siquiera podía proteger a su familia.

La familia Bavaria era la línea de sangre más preciada en Deltium aparte de la familia real. La hija del Duque Bavaria secuestró a su hija porque la consideraba una piedra en el camino. Planeaba matarla antes de que alguien se diera cuenta.

El Marqués Keers, que estaba a punto de perder a su hija, se volvió literalmente loco. Le pidió a la familia real que castigara a Annette. Rezó para que el Rey se pusiera de su parte y encerrara en prisión a la descarada hija del Duque Bavaria. 

Pero la balanza no se inclina del lado de los impotentes.

Este asunto será ocultado. Esto también será bueno para Celestine. Después de todo, una Princesa tiene que ser perfecta. ¿Entiendes lo que quiero decir, Marques Keers? Todo es para cuidar la reputación de la dama Celestine.

En ese momento, el Marqués Keers se dio cuenta. La razón por la que la familia Bavaria no fue castigada fue porque no tenía suficiente poder. No sabía que el Rey tenía preparado otro plan para socavar a la familia Bavaria. Por esta razón, había un profundo malestar en el corazón del Marqués Keers.

Ahora su hija estaba destinada a convertirse en la Princesa Heredera. Cada vez habría más gente tras ella. Pero él no podía hacer nada para proteger a su hija. Si algo similar volviera a ocurrir, no podría hacer más nada que jalarse el cabello como la última vez.

El Marqués Keers estaba profundamente angustiado.

Fue en ese momento que el Rey le susurró en secreto.

Ciertamente, los Bavaria son demasiado arrogantes. Parece que llegó el momento de terminar su privilegios. Su gran influencia tiene que desaparecer. Por el bien de nuestros hijos, que dirigirán el reino en el futuro. ¿Qué opinas?

El Marqués Keers decidió voluntariamente convertirse en un perro de la familia para proteger a mi hija. Estaba dispuesto a usar su propio cuerpo como escudo, para que Celestine estuviera a salvo. De esa manera actuaba un padre.

Sin embargo, había un hecho que el Marqués Keers no conocía. Había una invitada en el anexo a donde Celestine acababa de salir. La invitada era Annette Bavaria, a quién él tanto odiaba.

martes, 22 de agosto de 2023

agosto 22, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 170

Capítulo 170. Maestro de Espadas

Sus manos brillaban de azul como había dicho ella. Se podía percibir claramente la luz porque estaban en una oscura prisión subterránea. Cuando Raphael vio esto, se puso rígido como si fuera una piedra. Él sabía mejor que nadie lo que significaba esa luz.

"De ninguna manera..."

Raphael extendió la mano con incredulidad para rascar la pared. Las puntas de sus dedos azulados penetraron la pared de roca con demasiada facilidad. Cualquiera que lo viera, creería que era como raspar migas de galleta.

Él miró las puntas de sus dedos aturdido. Ahora estaba seguro de que había manifestado el aura de un Maestro de Espadas. Pero, ¿por qué precisamente ahora? 

No había podido alcanzar este estado aunque blandió la espada en el campo de entrenamiento hasta el cansancio. Sobre todo, ni siquiera sostenía una espada en este momento. Estaba desconcertado, aunque se alegraba de ello.

De repente una frase pasó por la mente de Raphael.

El reino Maestro de Espadas no se alcanza con la espada, sino con la mente.

Esto lo había leído cuando miró los registros de los Maestros de Espadas existentes. Raphael se dio cuenta en ese momento. Para que un espadachín talentoso pudiera ir más allá, tenía que alcanzar un estado mental.

...Creo que ahora sé lo que es.

Los ojos de Raphael brillaron de emoción al experimentar una iluminación. Sin duda, el estado mental significaba la mentalidad para entrenar con la espada.

Él había practicado el manejo de la espada día tras día. Pero sólo pensaba en sí mismo. Quería proteger su orgullo frente a los demás. Pudo conseguir cosas como la riqueza con esa mentalidad. Pero le había sido imposible convertirse en Maestro de Espadas.

Sin embargo, la mentalidad de Raphael había cambiado por completo. Ahora quería empuñar la espada por la mujer que amaba. Quería volverse más fuerte para protegerla. Y con esta mentalidad se convirtió inesperadamente en Maestro de Espadas.

"¿Es el aura? ¿Te has convertido en un Maestro de Espadas?"

Annette preguntó con voz temblorosa. Por lo que ella sabía, Raphael tardaría en convertirse en Maestro de Espadas al menos cuatro años. No esperaba que fuera tan pronto.

Ella estaba perpleja. No entendía por qué había sucedido. Fue tan repentino que no pudo determinar si era algo bueno o malo. A diferencia de la desconcertada Annette, Raphael tenía una idea. Por eso respondió con calma.

"Creo que sí. Aunque tengo que comprobarlo después."

Raphael al fin había alcanzado el nivel que quería. Su rostro estaba más lleno de convicción que nunca. Se acercó para besar la frente de Annette. Entonces susurró.

"Tú eres la única a la que mi espada quiere proteger, Annette."

Lo supo instintivamente. El hecho de que se convirtiera en Maestro de Espadas fue una señal del cielo de que debía protegerla. Fue como si alguien le hubiera otorgado este poder. 

Ya no estaba siempre en alerta como una bestia salvaje. Annette lo había convertido en humano. Por eso quería estar siempre a su lado. Porque ella era la única razón de su vida.

"Raphael..."

Sus ojos la miraban de forma especial. Ella lo comprendió en el momento en que vio esos ojos. Nunca más sentiría la cruel soledad. Raphael siempre estaría a su lado.

El futuro seguía siendo sombrío. Y aún había muchos obstáculos ante ellos. Pero todo estaba bien porque al menos no estaba sola en esta batalla.

***
agosto 22, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 169

Capítulo 169. Fuerza Desmedida (2)

Una mirada asesina apareció en los ojos de Raphael. Eucaly se aterrorizó completamente. 

"¡Dime lo que te ha prometido! ¡¿Qué demonios querías a cambio de matar a mi esposa?!"

Fue un grito desgarrador porque él casi había perdido a Annette. Eucaly casi se orinó encima por la forma horripilante en que Raphael la miraba. Eucaly, que de repente tuvo dificultades para respirar, terminó por desmayarse.

En ese momento Raphael agarró los barrotes sin decir palabra. Si no mataba a Eucaly de inmediato, no creía que fuera capaz de liberar su ira. Ahora conocía el amor, ahora que conocía la calidez de una persona amada, pero estaba a punto de perderlo todo. Se dejó engañar estúpidamente por las palabras aduladoras del Rey. 

"Raphael, ¿Qué estás haciendo?"

"Cálmate, Raphael. Hay que mantenerla con vida."

"...¿Por qué?"

Afortunadamente, pudo escuchar la voz de Annette. Raphael, que estaba inmerso en la ira, le preguntó el motivo. En respuesta, Annette le acarició suavemente el brazo para tranquilizarlo y le explicó en voz baja.

"Todavía hay muchas cosas que Eucaly no ha dicho. Podríamos revertir esta situación. Por ejemplo, podríamos conseguir pruebas más fiables para acusar a Su Majestad más tarde."

Raphael se detuvo. Annete tuvo éxito en domarlo. Él respiró hondo. Ella tenía razón. Era mejor tener más pruebas. No servía de nada su ira en este momento.

Su principal prioridad era proteger a Annette. Ya no debía usar su espada para doblegar a otros o para ascender en la jerarquía. Tenía que usarla para proteger a la mujer que le había enseñado a amar por primera vez en su vida. Él pensó con los dientes apretados.

Ni siquiera me importa convertirme en Maestro de la Espada.

Era algo que había ansiado durante mucho tiempo. Mientras Annette estuviera a salvo, no necesitaba toda la riqueza y la gloria del mundo. Tal vez podría parecer tonto, pero ella era su propio tesoro. No deseaba más nada.

Él sintió que había alcanzado una nueva percepción. Sus pupilas nubladas por la ira recuperaron su brillo original. Entonces lo que llamó su atención fueron los ojos preocupados que lo miraban desde un lado.

"Raphael…"

Siempre era especial que sus labios pronunciaran su nombre. Quiso acariciar sus mejillas de inmediato. De forma casual arrojó el barrote roto que tenía en su mano, le preocupaba que pudiera rozar a Annette mientras lo sostenía. Sentía que sus dedos estaban extrañamente fríos, aunque probablemente era sólo su imaginación.

Pero en ese momento las pupilas de Annette se estremecieron. Ella señaló con asombro el barrote que Raphael había tirado.

"¿Clavaste… el barrote en el suelo de piedra?"

Raphael miró el barrote que había lanzado sin pensar. Y sus ojos también se abrieron de par en par. El barrote que había sido arrojado sin cuidado, se había clavado en el suelo de piedra. Era como una pala clavada en barro blando.

El propio Raphael no tenía ni idea de lo que había sucedido. Sus ojos estaban llenos de confusión. ¿Por qué el barrote estaba clavado? No había forma de que el extremo roto de un barrote penetrara el suelo de piedra. 

En ese momento, Annette le agarró cuidadosamente la muñeca con su mano temblorosa. Luego la puso frente a la cara de Raphael.

"¡Raphael, tus manos están brillando! ¿Puedes verlo?"

domingo, 20 de agosto de 2023

agosto 20, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 168

Capítulo 168. Fuerza Desmedida (1)

Eucaly estaba desesperada. Había estado encerrada en una prisión subterránea con comida y agua envenenada. Pudo soportarlo durante dos días, pero ahora estaba en su límite. No sabía cuánto veneno había consumido. Ella quería evitar seguir en esta situación.

"En realidad, Su Majestad me ha ordenado algo más."

"¿Cuál fue?"

"Me pidió que observara tu relación con Raphael. Sobre todo, debía informar si los dos no estaban en buenos términos. Por eso deduzco que las intenciones de Su Majestad son…"

Eucaly, que se detuvo, se mordió los labios resecos. Raphael estaba tan concentrado en sus palabras que se olvidó de respirar. Cuando ella dejó de hablar, apretó los dientes los dientes por su ansiedad. Pero entonces Annette habló.

"Creo que sé lo que quieres decir. Después de que muriera por culpa del veneno, probablemente Su Majestad trataría de culpar a Raphael. ¿No?"

"...¿Eh?"

Los ojos de Raphael temblaron. Ya había sido bastante impactante que hubieran envenenado a su esposa, pero además pensaba culparlo cuando ella muriera. Era un complot despiadado que parecía que le provocaba náuseas nada más escucharlo.

Annette le dio unas palmaditas en el dorso de la mano a Raphael porque notó su agitación. Ahora no era el momento de apartar los ojos de Eucaly. La expresión de Eucaly se puso rígida después de sus últimas palabras.

"¿Tengo razón, Eucaly? Después de matarme ibas a decir que Raphael te obligó a hacerlo. Sería más creíble si tuviera una relación problemática con Raphael. De lo contrario, no tiene sentido que Su Majestad te pidiera esa información."

"......"

"Su Majestad pretendía que dieras un falso testimonio. Y ha prometido que fingirá que te meterá en la prisión, pero te sacará más tarde. También recibirás una buena recompensa."

Eucaly se estremeció en silencio. Annette se rió. Parecía que había acertado en la forma de actuar del Rey Selgratis. No sólo era una manera despreciable de cometer un crimen, sino que también culparía a otra persona. Ella lamentó que no supiera esto en su vida anterior. 

"Estúpida Eucaly. Su Majestad te ha engañado."

Los ojos de Eucaly temblaron. No tuvo más remedio que confesar, no parecía que hubiera perdido la esperanza. No sabía qué demonios le había prometido el Rey Selgratis, pero parecía que fue un sueño bastante dulce. Ella sintió la necesidad de romper ese sueño.

"¿Crees que sólo hay una o dos personas como tú? He estado en esta situación antes. Y en aquella ocasión, comprobé cómo Su Majestad trata a sus peones. Si tienes curiosidad, puedo contártelo. Es tu futuro de todos modos."

"¿De qué está hablando… Dama…?"

"Los pobres caballeros cumplieron las órdenes de Su Majestad. Así que luego fueron encerrados tranquilamente en una prisión subterránea, creyendo en las recompensas venideras. Pero en un sombrío amanecer, unos guardias entraron de repente para darles una paliza. Los caballeros, que acabaron convertidos en cadáveres, fueron sacados en bolsas que subieron en una carreta. Finalmente sus cadáveres fueron incinerados. Y sus cenizas enterradas en algún lugar detrás del palacio."

"......"

"Así es exactamente como Su Majestad cumple sus promesas. ¿Lo entiendes ahora?"

Cuando Annette terminó su historia, sonrió tan pura como una flor de camelia. De todos modos, no había mentido. Sólo exageró un poco más lo que Railin le había contado. Eucaly, que estaba seriamente conmocionada, murmuró con sus manos apretando los barrotes.

"No puedo creerlo… Estoy segura de que Su Majestad cumplirá su promesa..."

"Entonces dime, ¿Qué te prometió Su Majestad a cambio de envenenarme?"

Eucaly cerró la boca como si fuera muda. Parecía que no tenía el valor de decir en presencia de Annette lo que le habían prometido a cambio de matarla. Pero no importaba. Ella podía pedirle a Railin que lo investigara.

Pero Raphael no parecía dispuesto a esperar hasta entonces. Había estado conteniendo sus ganas de matarla, pero finalmente estalló. Estaba harto de soportar la actitud descarada de Eucaly. El furioso Raphael golpeó los barrotes con el puño de golpe.

Crack

Unos de los barrotes de los que colgaba Eucaly se abolló. Su fuerza fue realmente explosiva. Eucaly se sobresaltó tanto que se quedó en blanco. Por un momento sintió que su corazón se detuvo, como si una bestia se precipitaba hacia ella.

sábado, 19 de agosto de 2023

agosto 19, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 167

Capítulo 167. Cobarde Descarada

***

Cuando llegó a casa después de despedirse de Celestine, los ojos de Annette se agradaron. Fue porque Raphael vino a recibirla a la puerta. Últimamente, vagaba alrededor de la puerta cuando ella estaba fuera, como un cachorro esperando a que regresara su dueño.

El rostro de Raphael estaba inexpresivo mientras acariciaba su cabello negro oscuro. Su mirada permanecía fija hacia el vacío. Había en él una belleza salvaje extraña, aunque vestía sus mejores prendas como un alto noble. Tal vez por eso ella sentía una peligrosa atracción hacia él. Su corazón palpitó inexplicablemente.

"¿Raphael?"

Antes de que ella pudiera terminar de decir su nombre, Raphael se giró al sentir su presencia. Su rostro se iluminó de repente al verla. El peligroso hombre que deambulaba cerca de la puerta principal del salón desapareció como si nada. En su lugar, un hombre apuesto la miraba con una sonrisa.

Annette no pudo evitar reírse. Entonces Raphael se frotó torpemente la mejilla con un dedo, como si quisiera ocultar las comisuras de sus labios que estaban fuera de control. Últimamente su expresión parecía poco natural cuando estaba frente a Annette.

" Te estaba esperando."

"¿Por qué? ¿Pasa algo?"

Ella ladeó la cabeza. Entonces una buena noticia salió de la boca de Raphael.

"La médico que te atendía, dice que quiere confesar. Todo."

"Oh."

Annette se encogió de hombros. Eucaly quiso confesar más rápido de lo esperado. No tuvo sensibilidad para envenenarla, pero parecía ansiosa cuando se trataba de ella misma. Había durado algo menos de dos días. Era irónico.

De todos modos, esta noticia fue positiva. Annette pensó que podría escuchar información que no conocía. Ella le preguntó a Raphael.

"¿Te gustaría escuchar conmigo?"

"Por supuesto. Te estaba esperando para eso."

Raphael frunció el ceño como si nunca hubiera pensado que no participaría. Annette, que se dio cuenta de ello, lo cogió inmediatamente de la mano. Hizo un rápido movimiento preventivo antes de que Raphael se disgustara.

Afortunadamente, las cejas fruncidas de Raphael volvieron a su posición original. En silencio, apretó con fuerza la mano de Annette, como si no fuera a soltarlo nunca más.

Ahora que bajaba a la prisión subterránea acompañada de Raphael, no se sentía tan fría como antes. Fue extraño.

Cuando llegaron vio a Eucaly aferrada a los barrotes.

"Dama..."

El pálido Eucaly la llamó. Ella tenía un aspecto lamentable. En lugar de contestar, Annette se dio cuenta de los rastros de vómito en un lado de la celda. Quizá tenía tanta sed que no pudo resistirse a beber el agua, pero el veneno causó que vomitara.

La comisura de la boca de Annette se torció con desprecio. Ella había bebido ese veneno durante cinco años en su vida anterior, pero Eucaly no lo soportó más que unos días. Realmente era una cobarde descarada.

Annette se sentó tranquilamente en una silla frente a los barrotes. Entonces Raphael se puso naturalmente a su lado, como si fuera una pantera negra que la protegiera. Los ojos de Eucaly temblaron. Annette parecía una Reina con su guardia.

Ella comenzó a interrogarla en tono despreocupado.

"He escuchado que tienes algo que decir, ¿De qué se trata?"

"Dama, realmente cometí el crimen grave. No debería haberlo hecho... Pero estoy en una posición en la que no puedo desobedecer las órdenes de Su Majestad... Lo lamento con todo mi corazón. Por favor, perdóneme."

Las lágrimas brotaron de los ojos perdidos de Eucaly. Raphael apretó los dientes cuando admitió su culpabilidad. Parecía que quería despedazar a Eucaly en cualquier momento.

Ella acarició suavemente el dorso de la mano de Raphael para reconfortarlo, luego continuó con el interrogatorio.

"Así que es cierto que lo ordenó Su Majestad. ¿Sabes por qué quería matarme?"

"No lo sé. ¿Cómo podría revelarme Su Majestad algo tan importante? Simplemente hice lo que me pidió. Nunca pregunté una razón."

"No lo creo. Su Majestad intentó matarme a largo plazo con veneno. Así que estoy segura de que te ha dicho porque es necesario ese lapso de tiempo. ¿Me equivoco?"

"En realidad no sé nada. Sólo hice lo que Su Majestad me pidió… ¡¡Dama!!"

Annette se levantó como si no valía la pena oír más. Si Eucaly no estaba dispuesta a decir la verdad, no había razón para perder más tiempo aquí. Lo mismo aplicaba incluso si ella realmente no sabía nada. Cuando ella se dio la vuelta, Eucaly gritó asustada.

"¡Hablaré! ¡¡Tengo una conjetura!! ¡¡Lo diré todo!! ¡¡Así que no me deje aquí, dama...!!"

jueves, 17 de agosto de 2023

agosto 17, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 166

Capítulo 166. Su Propia Hermana

"...¿Tal vez su Alteza le cuente esto a su Majestad?"

Celestine preguntó oportunamente con cara de preocupación. Aunque tuviera un compromiso formal como él, parecía que no confiaba en su futuro esposo. Annette, que se dio cuenta de ello, respondió con una ligera sonrisa.

"No lo creo. Aunque no esté de mi lado, no se lo dirá a su padre."

"¿Cómo puedes estar tan segura? ¿Es porque lo conoces desde la infancia?"

"No sólo eso… si el Rey se enterara, probablemente mi vida estaría en peligro. Su Alteza el Príncipe Ludwig es demasiado dulce para hacer eso."

Los ojos de Celestine se agrandaron ante sus palabras.

"Annette, ¿qué querías decir con eso? No puedo creer que tu vida estuviera en peligro."

"¿No te lo he dicho? El médico nuevo que contraté estaba sobornado por Su Majestad."

"¿Qué? ¿Su Majestad tiene personas dentro de otras familias que trabajan para él?"

"Sí. Mi médico Eucaly recibió instrucciones de envenenarme a largo plazo. Así mi salud se deterioraría poco a poco hasta que al final moriría."

Celestine quedó completamente paralizada ante la sucesión de bombas que salieron de la boca de Annette. No tenía nada que agregar, sólo mostró su preocupación.

"¿Estás bien? Realmente no consumiste el veneno, ¿verdad? ¡No me extraña que estés tan pálida últimamente! ¿Qué puedo hacer al respecto? ¡¡No me digas que tienes las puntas de los dedos frías porque has comido veneno!!"

La inquieta Celestine agarró las manos de Annette. Su calidez causó que los ojos de Annette se abrieran de par en par. Annette respondió con una sonrisa.

"Estoy bien. Consumí poco veneno. Además, en cuanto me di cuenta, visité inmediatamente al especialista más famoso de Deltium para desintoxicarme por completo."

"¡Oh Dios mío! ¿Cómo pudo hacerte esto? ¿Su Majestad no te conoce desde que eras una niña? Incluso había rumores de que él te trataba como una hija. ¡Es abominable!" 

"Cálmate, Celestine. Todo eso es pasado."

"¡¡Claro que no!! ¡¿Hasta dónde planea llegar él?! ¡Fue suficiente que te hubiera quitado el puesto de futura Princesa Heredera! ¡¿Por qué demonios tiene que envenenarte?! Es ridículo."

Celestine escupió fuego por su boca. Parecía que hubieran lastimado a su propia hermana. Annette se tapó la boca y se rió suavemente. Aunque su relación no había comenzado en buenos términos, Annette había llegado a quererla. Eso se sentía bien.

"De hecho, también sospecho al respecto."

Los ojos de Annette se hundieron. Como Celestine había dicho, Annette ya no podía convertirse en Princesa Heredera, el Rey no tenía que tratar de matarla a menos que hubiera algún otro propósito.

Que extraño.

Ella se preguntó qué estaba tramando el Rey. Si su relación con Raphael fuera buena, ¿tendría miedo de que Raphael recibiera el poder de su familia? Si la familia Bavaria de sangre azul lo apoyara, Raphael podría atreverse a codiciar el trono. Por supuesto, las probabilidades de éxito no eran altas.

Incluso si el Rey estaba preocupado por eso, todavía era demasiado pronto. Todos sabían que Allamand no veía con buenos ojos a su yerno. Y Annette no podía darle ningún poder a Raphael sin su permiso. Ese era el inconveniente de casarse con un hijo ilegítimo.

A mi padre no le gusta Raphael.

Annette suspiró. Por eso asumió que el Rey estaría satisfecho con incriminarla, por lo que no le pondría las manos encima otra vez. Sin embargo, había sobornado a Eucaly para envenenarla. Al igual que en su vida anterior.

"Volveré a interrogar a mi médico en cuanto llegue a casa. Te haré saber cualquier nueva información. Por otra parte, Su Alteza te dice algo, avísame."

"Por supuesto. Por favor, cuídate mucho. Estamos en el mismo barco, quédate a mi lado."

Celestine susurró mientras sujetaba las manos de Annette. Sus manos eran tan cálidas que Annette cerró los ojos involuntariamente.

De repente, se alegró de estar viva.

martes, 15 de agosto de 2023

agosto 15, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 165

Capítulo 165. Príncipe Indeciso

Pero Ludwig no la protegió adecuadamente cuando fue incriminada. Tal vez fuera porque todavía no era el Rey. Además, su padre estaba detrás de este incidente. Ludwig no pudo oponerse a su padre, la razón de su largo trauma.

De este modo, Annette comprendió perfectamente la postura de Ludwig. Sus inclinaciones no coincidían con las del mundo político. Dicho de buena manera, sensible. Dicho de mala manera, blando. Por eso evitaba situaciones que pudieran provocar conflictos con los demás. Aunque parecía que Raphael era una excepción.

¿Su Alteza realmente se pondrá de mi lado sólo por nuestra amistad en la infancia?

Ella miró nerviosa a Ludwig. Sus pestañas bajaron cuando se sumió en sus pensamientos. Su rostro impregnado de melancolía brillaba como el cristal. Después de un momento de silencio, Ludwig se cubrió lentamente la cara con las manos. Habló con vergüenza.

"Es suficiente que haya incumplido mi promesa una vez. Si vuelvo a cometer el mismo error, no me lo perdonaré nunca. Te prometo que no permitiré que te vuelva a pasar nada malo."

"Su Alteza…"

"No te preocupes. Siempre estaré de tu lado. Te demostraré mis verdaderas intenciones hacia ti. Siempre te protegeré. Tengo que devolver el apoyo que me diste."

Su voz sonó decidida a diferencia de lo habitual. Ludwig, que había apartado sus manos que cubrían su cara, la miró con sus ojos azules. Su mirada sensible había desaparecido. Sus ojos se parecieron a los de Raphael. Ludwig, que por primera vez parecía un Príncipe Heredero, abrió la boca.

"Pero primero, quiero saber el contexto de la situación. ¿Quién se ha atrevido a amenazarte? Dime lo que sabes, Annette."

……

Cuando la conversación terminó, Annette que había salido de la casa de té, miró a su alrededor. No parecía que nadie los estuviera espiando. Probablemente como Railin dirigía este lugar, la seguridad era muy minuciosa.

Ella volvió al carruaje después de pasar por una calle tranquila donde no se movía ni una rata. Celestine estaba sentada adentro esperándola. Su rostro inexpresivo resplandeció cuando Annette apareció.

"¿Cómo te fue, Annette? ¿Pudiste aprovechar la conversación con Su Alteza?"

"Sí. Gracias por ayudarme a organizar esto, Celestine."

"Fue fácil. Aunque quizás sería difícil volverlo a hacer. ¿Y qué respondió Su Alteza?"

Celestine preguntó con expresión preocupada. El futuro podría cambiar dependiendo de la decisión de Ludwig, así que era normal que estuviera ansiosa.

Después de todo, el Rey estaba detrás de todo esto. Quería destruir a la familia Bavaria, incluyendo a Annette. Celestine estaba atrapada en medio. No sólo eso, sino que el Rey planeaba utilizar a Raphael todo lo que pudiera, y deshacerse de él cuando no lo necesitara. Eso también estaba relacionado con Annette.

La razón por la que el Rey planeó todo fue Ludwig, el débil Príncipe Heredero. Si Ludwig se convertía en Rey en el futuro, no podría eliminar a Raphael, ni a la familia Bavaria. Su intención era completar la limpieza antes de entregar el trono.

Ludwig se asustó cuando se enteró de todo. Su rostro se había vuelto tan pálido que parecía un fantasma. Annette, que recordó aquel rostro, respondió.

"Necesita tiempo para pensar. Tal vez está confundido."

"¡No, no necesita pensar! ¡¡Su Alteza es muy indeciso!! Su propia sangre está haciendo algo incorrecto, ¡así que debería detenerlo! Las dos hemos sufrido mucho por ello."

"Al parecer Su Alteza no sabe qué hacer. Pensaba que Su Majestad solo lo odiaba, pero resulta que ha hecho tantas cosas por él. Estoy segura que está conmovido, así que me preocupa que su corazón se haya ablandado."

Annette suspiró pesadamente. El hijo que ansiaba el amor de su padre no podía escapar fácilmente de tales cadenas mentales. Pensó que Ludwig estaba perdido entre su padre y lo que él quería. No había nada que ella pudiera hacer.

Bueno, tal vez fue lo mejor. Fue una ventaja para Annette que Ludwig no se hubiera puesto de inmediato del lado de su padre. De hecho, no esperaba que hoy Ludwig se convirtiera en su aliado. Sólo pretendía utilizar su naturaleza indecisa para que se sintiera culpable de lo que le había sucedido a ella y evitar que se pusiera del lado del Rey.

jueves, 10 de agosto de 2023

agosto 10, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 164

Capítulo 164. Promesa de Niño

"Su Alteza, la última vez que te encontraste con mi esposo en el palacio real, ¿Le contaste sobre mi pasado?"

Ludwig cerró la boca ante su acusación. Cuando Raphael fue al palacio real a reunirse con el Rey, Ludwig se había interpuesto en su camino cuando se marchaba. Y en ese momento mencionó unas declaraciones pasadas de Annette.

Pobre Annette. Ella dijo que prefería entrar en un convento antes que casarse con un hombre así.

Ludwig, que recordó lo que le había dicho a Raphael, no tenía ninguna excusa. En aquel momento, Annette había dicho esas palabras para consolar a su prometido Ludwig. Fue para reforzar de algún modo su autoestima, porque él también tenía un complejo de inferioridad al compararse con su hermanastro, Raphael.

Ella en aquel momento no conocía a Raphael. Fue un acto despreciable él que se lo hubiera contado a Raphael. Sobre todo, que lo hubiera hecho por sus celos.

"... Fue muy torpe. Lo lamento sinceramente. Aunque no pude protegerte, te molesté bastante. Eso no volverá a suceder. Por favor, acepta mis sinceras disculpas."

Ludwig inclinó honestamente la cabeza. A pesar de que era el Príncipe Heredero, sus disculpas para Annette siempre fueron expresivas. Incluso en ocasiones hasta lloraba.

Todas las personas nacían con una disposición natural. Cuando se negaba esa naturaleza innata, la persona vivía sólo para encajar en una personalidad determinada, por lo que su vida se volvía dolorosa. Era como si metieran a esa persona en un marco fijo, y luego sus extremidades fueran cortadas porque sobresalían.

Por desgracia, el causante de esta crueldad fue el propio padre de Ludwig.

Un rey nunca debe mostrar emociones. Debe dedicar todo su tiempo a consolidar su posición política. ¡Pero sólo estás jugando con tu laúd! Esas son cosas ordinarias que sólo haría un hombre ocioso. No pierdas el tiempo con eso.

Raphael encajaba más en las expectativas del Rey Selgratis. Por otra parte, Ludwig parecía todo lo opuesto. Ludwig nunca se mostró seguro de sí mismo, nunca había sido autoritario, ni lastimado a alguien. No tenía disposición natural para ello.

La gente susurraba comentarios maliciosos a espaldas de Raphael, pero cuando estaban delante de él parecían ciervos congelados. Selgratis consideraba que Raphael tenía el carácter de un Rey natural. Y lamentó que Ludwig no causará la misma impresión.

El Rey deseaba que hubiera nacido como su hijo legítimo.

Ludwig, a quien su padre repudió su propia personalidad desde una edad temprana, siempre estuvo deprimido. Odiaba a Raphael porque lo hacía sentir miserable. En este frío mundo, todos se armaban hasta los dientes, sólo Ludwig no lo hacía.

La única persona que aceptaba todas sus debilidades era Annette. Ella fue la única que no cuestionó su personalidad, y que incluso lo apoyaba. Así que Ludwig sólo podía estar delante de ella como un hombre, no como el Príncipe Heredero de Deltium.

Por lo que ahora estaba terriblemente celoso de Raphael. Sus ojos reflejaron un poco de amargura cuando se disculpó. Annette decidió perdonar a su antiguo prometido, quien fue su amigo de la infancia. De todos modos, ella no había planeado esto para hablar tonterías.

"Gracias por decirlo, Su Alteza. Me alegro de que podamos reconciliarnos de forma sincera. Ahora tengo algo que decirle, así que le pido que por favor me escuche."

Annette lo miró con seriedad. Ahora comenzaba lo importante. Había otra razón por la que había convocado hoy a Ludwig a través de Celestine.

Tengo que saber qué piensa. ¿Su Alteza simpatiza con las ideas de Su Majestad o será un aliado? Porque todo cambia dependiendo del bando que él apoye.

Antes de preparar un contraataque, ella tenía que estar segura. 

Annette, que respiró hondo, le preguntó.

"¿Recuerda la promesa que me hiciste de niño? Alteza."

Al oír la pregunta de Annette, Ludwig cerró los ojos en silencio. Por supuesto que se acordaba. ¿Cómo podría olvidar una promesa que le había hecho a ella?

Ella fue el sostén de su alma. Su madre, que tenía que haber desempeñado ese papel, murió al darle a luz. Su padre le empujaba cada vez más al precipicio. La valoraba mucho porque ella permaneció a su lado. Por eso sostenía su mano como si fuera algo preciado.

Cuando me convierta en Rey. Definitivamente te protegeré Annette. Te lo prometo.

martes, 8 de agosto de 2023

agosto 08, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 163

Capítulo 163. Casa De Té Secreta

He elegido el camino que creo correcto. Ahora depende de Annette.

Celestine apretó los labios con fuerza. Y tomó la mano de Annette entre las suyas. La mano, que había cuidado durante toda su vida era tan delicada como una flor, pero inusualmente fuerte. Annette susurró en voz baja.

"¿Su Alteza irá al lugar acordado?"

"Por supuesto. Sólo debes esperar allí tranquilamente."

Hoy ella se iba a reunir a solas con el Príncipe Heredero Ludwig. Annette suspiró de alivió al escuchar la segura respuesta de Celestine. No sabía exactamente qué método había utilizado, pero fue extraordinario que hubiera logrado que Ludwig saliera del palacio real. Fue bueno haberle pedido ayuda a Celestine.

Annette tenía intención de averiguar cuánto Ludwig sabía de la situación. En primer lugar, el Rey había hecho todo esto por su débil hijo Ludwig, quien se convertiría en el siguiente Rey. El Rey Selgratis tenía como objetivo proteger el linaje de la familia real.

Su Alteza Ludwig debería saberlo.

A Annette le incomodaba la idea de encontrarse a solas con Ludwig. Sobre todo por lo sucedido la última vez que se vieron. Pero no podía quedarse de brazos cruzados por sentimientos personales. Se trataba de un gran problema más allá del amor y el odio.

Annette, que asintió con la cabeza, le respondió a Celestine.

"Muy bien. Salgamos en diez minutos."

Annette pasó un tiempo junto a Celestine mientras tomaban el té. Después, como supuestamente ellas salían de compras, se subió al carruaje en el que Celestine había venido. El carruaje sin patrones se mezcló con los otros hasta que se desvió sin dejar rastro. Annette no tardó en llegar al lugar donde se reuniría con Ludwig.

"Estás aquí."

Afortunadamente, Railin había conseguido el lugar para tener la reunión con el Príncipe Heredero. Entre los diversos negocios que dirigía, había una casa de té secreta construida para tales fines. Cuando Annette llegó frente a la puerta, Celestine le dio una palmada en el hombro para animarla.

"Iré al carruaje. Espero que la conversación con Su Alteza sea fructífera."

"... ¿Seguro que no quieres venir conmigo? Celestine."

Annette miró a Celestine con preocupación. Desde su punto de vista, lo normal sería que no quisiera que ella estuviera a solas con Ludwig. No sólo porque en el pasado él deseaba un futuro con ella, sino porque él todavía tenía sentimientos persistentes hacia ella.

Pero su prometida Celestine no mostró ningún temor por ello.

"No pasa nada. La conversación será mucho más rápida si no estoy presente. De todos modos, no nos vamos a casar por amor. En eso consiste un matrimonio político, ¿no?"

Celestine era una mujer con una fuerte autoestima, así que no quería estar encima de su prometido porque le gustaba otra mujer. Annette asintió ante su brusca respuesta.  

Annette entró sola con un rostro tranquilo. Le mostró discretamente al empleado que se acercaba el anillo del Gremio Secreto, entonces el empleado la condujo a otro lugar. Finalmente ella entró por una puerta secreta oculta tras una pared.

Allí ella se encontró al Príncipe Heredero Ludwig sentado.

"¡Annette!"

Ludwig se puso de pie cuando ella entró. Tomó la mano de Annette con cariño para saludarla, pero no hubo señales de aferramiento como antes. Parecía que las palabras que Annette había dicho antes fueron bastante dolorosas para él. 

Annette saludó de manera formal.

"Gracias por venir, Su Alteza. Te pido disculpas por haberte invitado a este lugar."

"No seas tan cortés, Annette. Aunque te hayas convertido en la esposa de otro hombre... la infancia que pasamos juntos no se puede borrar. Permite que al menos siga siendo tu amigo. Así podré permanecer en tu círculo."

Los ojos de Ludwig miraban a Annette con un brillo triste. Tal vez fuera porque eran medio hermanos, pero la imagen de Raphael se superpuso sobre Ludwig por un momento. No se podía negar su parentesco. Pero decidió no flaquear ni siquiera ante su lamentable rostro.

"Alteza. Entonces, como amigo personal con el que compartí los mismos recuerdos durante un tiempo, hay algo que me gustaría mencionar."

Annette era una mujer que valoraba más la razón que la sensibilidad. Todavía no había olvidado el mal comportamiento de Ludwig en el pasado.
agosto 08, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 162

Capítulo 162. Arrepentimientos

"¿Te fue bien en el interrogatorio?"

Raphael, que la estaba esperando en la entrada del salón, preguntó en tono despreocupado. Tenía el mismo aspecto de siempre, pero sus ojos la miraban dulcemente como si estuvieran recubiertos de miel. Ella, que se dio cuenta de ello, sonrió levemente.

"Sí. Es posible que tarde un poco en confesar su culpabilidad, pero es mejor esperar."

"¿Y cómo está tu salud? He escuchado que has tomado veneno algunas veces."

"Estoy bien. Sólo consumí una pequeña cantidad de veneno. Además, tomé un antídoto."

Raphael mostró una expresión de alivio ante sus palabras. Se había sorprendido cuando se enteró que Eucaly fue sobornado por el Rey para envenenar a Annette. Pudo comprobar cómo Annette había luchado contra grandes peligros con aquel frágil cuerpo. Sus manos comenzaron a temblar. Podría perder a Annette sin darse cuenta.

Aunque ella hubiera muerto por culpa del veneno, él habría pensado que había muerto por culpa de una enfermedad prolongada. Nunca sospechó porque había creído erróneamente que el Rey veía con buenos ojos a Annette.

Raphael se odiaba a sí mismo por no darse cuenta de nada durante todo este tiempo.

Realmente soy el peor esposo de la historia.

Se sentía culpable. Aunque no fuera su intención, su entorno la perjudicaba constantemente. Sin embargo, ella permaneció a su lado, demostrando su amor.

Esto atravesó el corazón de Raphael como una daga. Fue como ir al cielo y al infierno al mismo tiempo. Se sentía muy apenado, pero también agradecido con Annette. Cuando sus ojos varoniles reflejaron su dolor, Annette le cogió la mano con una sonrisa.

"No pongas esa cara. Estoy muy bien. Vas a protegerme a partir de ahora, ¿verdad?"

"Por supuesto. Siempre te protegeré."

Las amables palabras de Annette lo salvaron. Su respuesta fue algo simple. Después de todo, era un hombre poco sociable, que no tenía el talento necesario para ganarse los corazones de las personas con palabras. Nunca había conocido a otra mujer que no fuera Annette, así que no tenía confianza para decir cosas amorosas.

Pero las emociones que no podía expresar con palabras eran sinceras. Raphael debía protegerla. Por eso, ahora sólo tenía que hacer una cosa. Alcanzar un nivel tan superior que nadie pudiera eliminarlo o utilizarlo fácilmente.

Como dijo Harold, era un espadachín bastante bueno. Pero eso no bastaba para protegerla. Annette, que miró a Raphael con su ropa de entrenamiento, le dijo.

"Es hora de tu entrenamiento Raphael. El viento está frío, así que evita un resfriado."

"Preocúpate también por ti. Tu cabello parece volar cuando el viento sopla."

Raphael, que respondió fríamente, le dio un beso en la cabeza. Luego, le lamió los suaves labios con la punta de la lengua. Annette sonrió débilmente. El temblor de ella que Raphael sintió cuando sus labios se tocaron provocó que se la quisiera tragar.

Los ojos de Raphael se volvieron aún más profundos. Quería secuestrarla como un bandido ahora mismo. No le importaba que ella estuviera esperando un invitado. Justo antes de hacer realidad su impulso, Annette lo apartó de un empujón con una sonrisa.

"Ve. Antes de que sea demasiado tarde."

No importaba si llovía o nevaba, él no había faltado ni una sola vez a los entrenamientos, pero hoy tenía muchas ganas. Más aún cuando pensó en la otra persona con la que ella se reuniría pronto. Pero no podía mostrarse perezoso delante de la mujer que amaba.

Raphael, que suspiró, se dirigió al campo de entrenamiento. ¿Cuándo podrá alcanzar el maldito nivel maestro de espada? Según los comentarios de los maestros de espada existentes, era un reino no se podía alcanzar con la espada, sino con el corazón. Se estaba volviendo loco porque no entendía qué significaba eso.

Annette, que había apartado la vista de la espalda de Raphael, se volvió hacia él salón. Ahora ella tenía que encontrarse con el visitante que la esperaba allí. Annette saludó con voz suave apenas cruzó la puerta.

"Gracias por venir, Celestine. Me alegra volver a verte."

"¡Annette! ¿Cómo has estado?"

Celestine, que había estado sentada en el salón principal, se levantó. Fue muy natural cuando abrazó a Annette de forma afectuosa. Parecía que había abierto completamente su corazón. Sobre todo, porque ellas habían decidido estar en el mismo barco.

Ella creía en sí misma. Era demasiado orgullosa para aceptar convertirse en una muñeca bonita que estuviera al lado del Príncipe Heredero. No sólo eso, sino que no podía perdonar al Rey Selgratis por ordenar su secuestro simplemente para deshacerse de sus enemigos políticos. Eso le había causado un trauma.

Aunque ella procediera de una familia menos poderosa, le parecía injusto sufrir esta situación. Ella descubrió toda la verdad gracias a Annette. Aunque en este momento no pudiera romper su matrimonio, se negaba a seguir el juego del Rey.

sábado, 5 de agosto de 2023

agosto 05, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 161

Capítulo 161. Medicina Letal (2)

"...¡Ese tal Martin quiere sustituirme como médico de la familia Carnesis! ¡Sí, sin duda eso es! ¡¡Quiere ocupar mi lugar! ¡¡O tal vez las sirvientas estaban celosas de mí, porque soy tu médico de confianza!! Por eso se atrevieron a tramar esto."

Annette se llevó la mano a la frente ante las excusas sin sentido de Eucaly. El médico Martin tenía un origen noble poco común. Estaba tan interesado en todo lo relacionado con la medicina, que renunció a heredar el patrimonio familiar para poder dedicar su tiempo a ello. No había ninguna razón para que el médico Martin quisiera trabajar en esta familia.

Eucaly carecía de habilidades sociales, así que tal vez por esa razón tenía una forma de pensar diferente. ¿Realmente ella creía que culpando a otras personas, podría salir impune de un delito? A Annette le disgustó esta forma de pensar, así que no sentía la necesidad de continuar discutiendo con Eucaly.

Annette, que tenía una fría mirada, preguntó sobre el punto principal.

"Quiero que seas sincera conmigo. ¿El Rey te incitó a hacer esto?"

"...¡No! ¡¡Realmente no sé de qué está hablando dama!!"

Los ojos de Eucaly se abrieron de par en par por un momento. Se dio cuenta de que Annette conocía el trasfondo de la situación. Pero eso no significaba que ella pudiera admitir honestamente su crimen. Porque sería como asumir la culpa de intentarla envenenar.

Ella al menos tenía que evitar eso.

Así es como solían pensar las personas que cometían delitos. Aunque hubieran cometido un delito, no querían convertirse en delincuentes. Una contradicción que ella no entendía.

Annette miró a Eucaly con rostro inexpresivo. En ese momento, las pupilas de Eucaly empezaron a tambalearse de forma más violenta. En el momento en que finalmente apartó la mirada, Annette se levantó de su asiento.

"Estoy muy decepcionada de ti. Te confié mi vida. Pero traicionaste esa confianza."

Además, fueron dos veces. Su voz aparentemente indiferente tembló un poco al final. Pensó en las veces que Eucaly había estado a su lado para consolarla cada vez que sufría dolor o lloraba en su vida anterior. Realmente parecía que estaba comprometida.

Ella estúpidamente había estado agradecida con Eucaly. En realidad ella fue la culpable del veneno que consumía poco a poco. Annette se sintió atropellada por las duras verdades. Lo que no supo en su vida anterior, sólo la lastimó más.

Pero no estaba arrepentida. Había decidido vivir una nueva vida. Ahora al menos sabía los errores que cometió en su vida anterior. Y la posibilidad de corregirlos le daba una confianza que nunca antes había tenido.

"Eucaly, parece que no tienes valor para admitir tu culpa. Entonces es una pérdida de tiempo hablar contigo. Pronto recibiré visita, así que me iré. Piénsalo hasta la próxima vez que regrese. ¿Cuál es realmente la opción más sabia?"

Annette se dio la vuelta con elegancia tras ese último aviso. Pero antes de irse volvió a mirar a Eucaly, y añadió como si lo hubiera olvidado.

"Oh, todo lo que consumas tendrá la medicina que me dabas. Si no es veneno como dices, da igual que la consumas, ¿no? Incluso si la medicina es venenosa, es un veneno de larga duración, por lo que no supondrá un gran problema para tu cuerpo durante unos días."

"¡¡......!!"

"Espero que tomes una decisión rápida. Sabes que es por tu bien, ¿verdad?"

Annette sonrió suavemente. El rostro de Eucaly se quedó en blanco ante su sorprendente declaración. Fue bastante aterrador escuchar que desde ahora tendría que ingerir el veneno que ella misma había creado en cualquier que consumiera.

Pero por muy conmocionada que estuviera Eucaly, no se podía comparar con la decepción que sentía Annette. Ella le dio la espalda fríamente a la persona en que alguna vez había confiado. Después de salir de la prisión subterránea, ella entró en un luminoso pasillo del interior de la mansión.

Ahora que estaba acostumbrada al hermoso interior de la mansión Carnesis. No era tan anticuada como las demás, sino que su diseño se adaptaba a las últimas tendencias.

A ella le encantaba estar aquí. 

Después de todo era su hogar, y también aquí estaba alguien a quien la quería.

jueves, 3 de agosto de 2023

agosto 03, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 160

Capítulo 160. Medicina Letal (1)

Eucaly, que sintió algo siniestro en su voz, mantuvo la boca cerrada. Entonces Annette abrió un pergamino que tenía en la mano para que ella lo mirara. Eucaly miró con inquietud las palabras del pergamino. Pronto ella se mostró conmocionada.

"Dama, esto es..."

"Es el diagnóstico del médico Martin. Un especialista en venenos casi único en Deltium. Tú también deberías conocer la fama del médico Martin."

El diagnóstico presentado por Annette enumeraba una gran cantidad de venenos. La mayoría de ellos tenían resultados negativos, excepto dos que estaban marcados en rojo.

El primero, era un veneno que debilitaba el sistema inmune. El segundo, era un veneno que dañaba gradualmente los órganos internos. Annette, que señaló con la punta de los dedos los venenos que estaban marcados en rojo, sonrió con gracia.

"Fuiste inteligente. Mezclaste dos venenos en dosis mínimas para que pareciera que mi salud empeoraba gradualmente. Es natural que nadie hubiera sospechado que estaba siendo envenenada. Sin duda eres una persona talentosa que completó la academia de medicina en el Reino de Provatte."

"¡Dama Annette! Parece que hay un malentendido. ¡¿Cómo podría envenenarte?! Quizá has consumido veneno en otro sitio... Por ejemplo… en algún evento social a la que fuiste invitada. Incluso pudiste consumirlo por accidente. ¡¡Pero yo nunca lo hice!!"

Eucaly inventó excusas desesperadamente. Fue una lástima que ni siquiera tuviera la astucia para decir mentiras. Parecía la típica persona amable incapaz de hacer algo malo. Incluso Annette fue engañada durante un tiempo.

Quizá tampoco puedo librarme de los prejuicios.

Annette se quedó pensativa. Pensó que si el Rey contrataba a alguien para envenenarla, habría sido alguien más profesional. Por ejemplo, alguien sonriente que dominara la elocuencia. Así que aunque esa persona le diera veneno, no sería fácil sospechar de ella. Si Annette tuviera que poner un ejemplo, sería alguien como Railin.

Por supuesto, era un prejuicio injusto para Railin. 

Qué tonta he sido. 

Annette suspiró mientras veía a Eucaly. Ella tenía su largo flequillo hacia abajo, así que daba una impresión un poco melancólica. Quizá por eso Annette confiaba en ella.

Pero en realidad ella me estaba envenenando.

Había tomado mucha medicina de Eucaly en su vida anterior. Esto provocó que su salud se deteriorara gradualmente durante un largo periodo de cinco años.

Después, postrada en una cama, tomó sus medicinas casi todos los días. Quizá sea por esa razón que murió tan joven en su vida anterior.

Pero en esta vida, ¡también estaba tomando ese veneno! Annette se puso muy nerviosa. Fue como si hubiera perdido la ventaja de la regresión. Sin saber lo que estaba pensando Annette, Eucaly se limitó a hablar como un loro.

"Dama, por favor créame... ¡No soy la culpable! Debe ser alguna conspiración. Sí, es eso. ¡Alguien quiere inculparme! ¡¡¡No cabe duda!!!"

Por supuesto Annette no creía en sus palabras. Fue suficiente haber desperdiciado una vida por consumir ese veneno. Ella respondió a la súplica de Eucaly.

"Lo siento, Eucaly. La medicina que me dabas a menudo para mantenerme saludable también fue enviada al médico Martin. Fueron dos dosis recientes. Y en ambas se detectaron rastros de veneno. ¿Cómo piensas justificar eso?"

Eucaly se quedó sin palabras por un momento. Se mordió las uñas con desesperación. Pero como no pudo encontrar ninguna salida, decidió argumentar para salir de esta crisis. Eucaly, que levantó la barbilla, dijo más excusas.

"¡Es una equivocación! Hay muchos médicos que son charlatanes… Incluso puede que él fue sobornado por alguien para incriminarme. Si no, podrían ser las sirvientas de la cocina, ¿no? Mientras preparaba la medicina, pudieron hacer algo secretamente…"

"¿Incriminarte? ¿Quién te tendería una trampa, Eucaly? Es raro. Sólo eres una médico."

domingo, 30 de julio de 2023

julio 30, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 159

Capítulo 159. Siempre Fuiste Tú (3)

Aunque tuviera que enfrentarse al Rey. Annette derramó lágrimas pero estaba decidida. Haría todo lo posible para proteger a Raphael a pesar de las dificultades. Ya después pensaría si lo abandonaría. Annette nunca confundía sus prioridades.

Raphael no conocía su intención de forma detallada, pero se dio cuenta de algo. Había podido retenerla un tiempo extra. Se sintió realmente aliviado. 

Era culpa de esta mujer que él se hubiera vuelto así. No sólo era hermosa, sino demasiado dulce. Ella le transmitía una calidez que él nunca había experimentado. Ella siempre estaba a su lado sin importar nada. Lo llevaba a su acogedora habitación cuando deambulaba en sus oscuras pesadillas. Ella lo consideraba su familia… a pesar de su pobre linaje.

Por lo que no pude evitar enamorarme.

Raphael miró a Annette con ojos sombríos. Recordó la conversación que había tenido hoy con Harold. Tenía que elegir entre el Rey y Annette. Y al final Raphael la eligió a ella.

Harold se rió al escuchar su elección. Dijo que en ocasiones los hijos eran mejores que los padres. Entonces, le contó a Raphael todo lo que sabía, tal como había prometido. El Rey había mantenido al margen a la familia Bavaria desde el principio, por eso incriminó a Annette para evitar que se convirtiera en la Princesa Heredera. Solo esperaba la oportunidad para eliminar a la familia Bavaria.

Y no lo olvides. Que sólo puede haber un sol en Deltium. ¿Pero qué sucedería si la luna brilla aún más que el sol? Alguien podría querer derribar la luna. Alguien que no quisiera que la luna se tragara al sol en un eclipse.

Raphael no era tan estúpido como para no entender lo que quería decir. Finalmente pudo comprender por qué el Rey le había pedido que se casara con Annette. También, por qué el Rey lo alababa de forma extraña, pero menospreciaba a Ludwig.

El Rey pensaba utilizarlo tanto como quisiera. Raphael se convenció al escucharlo. Sabía que había tomado la decisión correcta al elegir a Annette.

Pobre Annette.

Raphael conoció el amor por primera vez, pero por desgracia el lugar donde nació fue un sucio lodazal. Annette no se convirtió en Princesa Heredera por culpa de su propio padre, y fue su tío materno Ben March, el elegido como la herramienta para incriminarla. Ya se podía considerar algo trágico para ella tener que casarse con un hombre como él, pero incluso ahora ella seguía estando en peligro.

Él sintió un profundo sentimiento de culpa. Aunque le diera la espalda al Rey, aunque perdiera todo lo que tenía, tenía que proteger a Annette. Esa sería su única expiación.

Los profundos ojos azules de Raphael brillaron. Eran los ojos de un hombre que por primera vez tenía algo que proteger. Estaba decidido a morir.
 
***

La mujer agazapada en un rincón de la oscura celda parecía una rata de alcantarilla. A pesar de que parecía joven por sus rasgos, pero tan poco llamativos que no causaban una impresión aduladora. Lo único bueno era que su expresión parecía confiable.

La mujer puso los ojos en blanco constantemente, mordiéndose la uña del pulgar con cara de ansiedad. Su día había sido tranquilo hasta hace unas horas, pero la situación cambió de repente 180 grados. Los empleados del Marquesado Carnesis irrumpieron en su propia habitación, y se la llevaron a una prisión subterránea. Fueron órdenes de su maestro.

¿Quizás... se han enterado?

No podía creerlo, su receta era perfecta. Eucaly estudió intensamente medicina en la academia médica más destacada. Se suponía que durante las primeras fases de la droga, los síntomas sólo serían sutiles, así que había pocas posibilidades de detectarla.

Eucaly intentó calmar su inquietud. Pero, antes de que pudiera calmarse, unas personas aparecieron. Entre las personas había una belleza deslumbrante.

Tenía una cara tan refinada como la de una muñeca. Sus ojos rosados brillaban a través de sus pestañas. Un cabello rubio radiante. Ella brillaba como un sol en este lugar poco iluminado. Ella hizo un gesto con la mano para quienes la rodeaban.

"Salgan. Me gustaría tener una conversación personal con mi médico."

De inmediato todos se fueron. Eucaly, que se aferró inconscientemente a los barrotes, miró a Annette con ansiedad. Ella se sentó entonces en una silla frente a los barrotes. Annette la miró tan tranquila como de costumbre. La esperanzada Eucaly suplicó.

"¿Por qué me hiciste esto? ¿He hecho algo malo? Por favor, dime la razón…"

"¿Razón?"

Annette sonrió. Había algo aterrador en su hermosa sonrisa.

viernes, 28 de julio de 2023

julio 28, 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 158

Capítulo 158. Siempre Fuiste Tú (2)

Ella enterró su cara en el pecho de Raphael. Quería escuchar sus próximas palabras, pero al mismo tiempo no. Sus manos temblaban y su corazón latía rápidamente. No era un fenómeno extraño que sólo le estuviera ocurriendo a Annette.

El pecho de Raphael temblaba un poco con cada respiración. Su temperatura corporal aumentó gradualmente, ahora estaba tan caliente como madera en una hoguera. Su corazón latía con tanta fuerza que hacía vibrar los tímpanos de Annette.

Raphael, que tragó saliva, por fin abrió la boca.

"He estado pensando seriamente en ello... mi primera prioridad eres tú."

Annette lo miró estupefacta. Sus ojos estaban enrojecidos por el llanto. ¿Qué demonios él acababa de decir? ¿Tal vez ella había escuchado mal?

En cuanto sus miradas se cruzaron, el rostro de Raphael enrojeció rápidamente. Sin saber qué hacer, se cubrió la cara con una mano para evitar la mirada de Annette. Ella nunca lo había visto así en sus cinco años de matrimonio en su vida anterior. Ella no pudo evitar agarrar la mano que le cubría la cara.

"¿Puedes repetir lo que acabas de decir…?"

Raphael, que no pudo seguir tapándose la cara, evitó desesperadamente su mirada. Su rostro, que siempre había sido firme como una espada afilada, estaba sonrojado. Aunque mantuvo la boca cerrada debido a la vergüenza, su cara hablaba en su lugar. Él la amaba.

Los ojos de Annette se volvieron a llenar de lágrimas. No podía creer lo que veía. Sus temores de que nunca sería amada en esta vida parecían desvanecerse.

La alucinación auditiva de Allamand diciendo que Raphael nunca la elegiría había desaparecido. Raphael secó torpemente las lágrimas de los ojos de Annette.

"Sólo tú. Siempre fuiste tú. La persona que ha estado a mi lado."

No podía evitar amar a esta mujer. Tenía un profundo sentimiento de inferioridad debido al origen de su madre. Así que trató de mantenerse alejado desesperadamente porque pensaba que una mujer tan perfecta no podría amarlo. 

Sin embargo, al igual que los humanos no podían detener las fuerzas del mar, lo mismo ocurría con este sentimiento. Annette domó a ese animal salvaje que no conocía el amor. Tuvo una paciencia infinita con él. Siempre mostró amor y confianza.

Al final su calidez lo doblegó. Ahora no cambiaría a esta preciosa mujer por nada. 

"Te amo, Annette."

"Raphael..."

Ella le acarició la mejilla con cuidado. Su corazón se apretó porque le pareció demasiado tierno. Raphael agarró firmemente su pequeña mano.

"Por favor, no me dejes. Quédate conmigo."

Raphael estaba vagamente consciente de que ella estaba pensando marcharse. Recordó aquel momento en que su corazón latió con fuerza al descubrir el anillo del Gremio Secreto en su joyero. En momentos como estos tenía la suerte de que su intuición se desarrollara como una bestia. Si ella lo hubiera dejado sin saber nada, se habría derrumbado.

Sus brazos sujetaban su cuerpo con fuerza. Sus ojos parecían suplicantes.

"Sé lo que te preocupa, Annette. Pero puedo resolverlo. Te protegeré, lo prometo. Así que puedes estar tranquila… Sólo espera un poco más."

Después de terminar de hablar, apretó sus dientes para reprimir sus emociones que ardían en su pecho. El amor, que había descubierto tarde, parecía abrasar su interior.

Annette lo miró en silencio. Estaba confundida. ¿Raphael quería decir que entendía el trasfondo de la situación? Raphael susurró cuando vio sus ojos temblorosos.

"Mi primera prioridad eres tú. Tú… eres mi familia. Eres la familia que he elegido."

Annette se tapó la boca con los ojos enrojecidos. Sus palabras garantizaban que Raphael también conocía toda la situación. Decía que la había elegido a ella en lugar de a su padre. Tal vez él se sintiera en deuda con el Rey, pero no sentía afecto. Así que, como se lo pedía su corazón, decidió proteger a la mujer que amaba.

Ella lloró de alegría. Pero también sentía tristeza. Sus lágrimas fluyeron sin cesar porque sentía lástima por Raphael, que fue maltratado desde niño por su madre drogadicta y utilizada por su despiadado padre cuando creció. No podía darle la espalda a este hombre.

"Gracias por elegirme. Tú también eres mi preciada familia. Así que también te protegeré."