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lunes, 20 de septiembre de 2021

septiembre 20, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 30

Capítulo 30. Hospital (2)


El hospital al que solía acudir Margaret mayormente lo frecuentaban personas comunes.

Por lo tanto, nadie esperaría que Rihanna fuera una noble.

Rihanna cubierta con un velo estaba sentada en la sala de espera como cualquier otra persona esperando tranquilamente su turno.

"Señora Margaret."

Leona había tomado prestado el nombre de Margaret para la consulta médica. Cuando entró en el consultorio, vio a un joven médico que le daba una buena impresión.

Rihanna se sentó con cuidado en el asiento frente al escritorio. Se sentía un poco incómoda puesto que se trataba de la primera vez que estaba en un lugar como este, siempre su médico tratante visitaba la Mansión Royde para examinarla.

"¿Por qué has venido?"

"Desde hace dos meses que no tengo la menstruación. También he sufrido severas migrañas durante los últimos meses."

"Así que no has menstruado... ¿Estás casada?"

"Estoy casada, pero definitivamente no estoy embarazada."

"Hmm... ¿Ha estado bajo mucho estrés últimamente?"

"No, no lo creo."

Rihanna sacudió la cabeza decididamente.

"Quiero saber con exactitud qué le está pasando a mi cuerpo. El costo no importa, así que puede hacerme todas los examenes posibles."

El médico miró a Rihanna extrañado ante su seria petición. Sin embargo, asintió sin preguntar pensando que sería molesto hacerlo.

"Perfecto. Entonces haré una examinación exhaustiva."

Se le hicieron todas las pruebas posibles, incluso cortarle un mechón de cabello y extraerle sangre. Por supuesto que esto tardó mucho tiempo. Unas horas más tarde, cuando terminaron todas las pruebas, el médico le dijo a Rihanna.

"Los resultados estarán dentro de un mes. ¿Quiere que los enviemos a su casa?"

"No, no lo hagas. Regresaré aquí entonces."

Finalizada la consulta médica, ambas se subieron al carruaje para dirigirse hacia el hotel. Margaret le preguntó a Rihanna con una cara de preocupación.

"Piensa que su médico tratante está mintiendo en el diagnóstico, ¿verdad?"

"Sí, eso creo."

Rihanna asintió con una expresión seria.

"Debe haber algo anormal en mi cuerpo. De lo contrario, ¿Cómo es posible que haya dejado de menstruar desde hace dos meses y siga teniendo dolores de cabeza recurrentes? Como sabes, crecí siendo saludable."

"Espero que las conjeturas de la Dama sean equivocadas. ¿Pero qué piensas hacer si realmente hay algo anormal con tu cuerpo?"

"No te preocupes. Todavía siento que estoy bien."

Rihanna intentó tranquilizar a Margaret.

"Cambiando de tema, te contaré lo que te iba a decir ayer."

"¿Qué más sucedió en el banquete?"

Rihanna confesó sinceramente sus sospechas de que George parecía haber sobornado al Duque McDonnell para conseguir un puesto en el gobierno. Margaret lo consideró ridículo al principio, pero pensándolo detenidamente cambió de opinión.

"En ese caso... no creo que haya sido por poco dinero."

Rihanna creía que el Duque McDonnell no arriesgaría su carrera pública por unos pocos centavos. Seguramente le había dado una gran cantidad de dinero.

"Sólo hay dos posibilidades para el origen del dinero. Usaron los bienes privados de la familia Royde..." Rihanna hizo una breve pausa antes de continuar. "O ha malversado dinero del Hotel Norden."

"¡Dama...!"

"Todavía ambas posibilidades son hipotéticas. Lo que sí es cierto, es que en cualquiera de los casos, George no está apto para ocupar un cargo público."

Rihanna estaba convencida de que era imposible que George se convirtiera repentinamente en un burócrata, a menos que se tratara de un soborno.

"Si el Hotel Norden está involucrado, nosotros también podríamos resultar perjudicados. En ese caso tendríamos que lograr que solo George sea acusado del crimen."

"¿Entonces qué debemos hacer?"

"Es una oportunidad para nosotros. Es una debilidad más de George."

Rihanna sonrió mientras decía.

"No necesitas preocuparte demasiado por ello, es suficiente con que lo sepas."

"¿Hay algo que pueda hacer?"

"Si George ha sobornado al Duque McDonnell, puede haber alguna evidencia en su habitación. Finge limpiar el lugar mientras lo observas detalladamente. Avísame si encuentras algo extraño."

"Entiendo."

"Por último..."

Rihanna preguntó enigmáticamente.

"¿Está listo?"

"Por supuesto."

Margaret sonrió por primera vez.

"Me he ocupado de ello inmediatamente."

"Bien hecho."

Rihanna asintió con una sonrisa.

"Empecemos uno por uno."
 
***
 
Rihanna llegó al Hotel Norden.

'¿Hmm...?'

Cuando ella estaba a punto de bajarse del carruaje, divisó otro carruaje con un emblema desconocido.

domingo, 12 de septiembre de 2021

septiembre 12, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 29

Capítulo 29. Hospital (1)


La fiesta de bienvenida a los nuevos funcionarios se prolongó hasta la noche.

Cuando terminó los tres regresaron a la Mansión Royde en el mismo carruaje.

"......"

"......"

"......"

Los tres permanecieron en silencio en el carruaje.

Rihanna estaba pensando en la suposición que se le había ocurrido hoy. Todavía no había pruebas de sobornos entre George y el Duque McDonnell. Tenía que hallarlas, pero no sabía por dónde empezar.

Lisbeth se sentía un poco disgustada por el reciente íntimo encuentro secreto, porque aunque había disfrutado de la compañía de George, irónicamente le resultaba frustrante tener que ocultar su relación ante todos.

Por otra parte, George no tenía nada que decir entre las dos mujeres silenciosas, por lo que mantuvo la boca cerrada. 

Nadie intentó cuestionar el silencio. Incluso si alguien lo hubiera hecho, habría bastado con responder de qué estaban callados por la fatiga del largo banquete. Después de llegar a la mansión, regresaron a sus habitaciones para descansar tras despedirse cortésmente.

"Parece que está cansada Dama."

Margaret le dijo a Rihanna amablemente.

 "La bañera está preparada."

"Gracias, Margaret."

Rihanna metió la mano en la bolsa de satén que llevaba. Pudo sentir algo suave con la punta de sus dedos.

Finalmente ella sacó un pañuelo recordando lo que le había ocurrido fuera del salón de banquetes. Margaret le preguntó a Rihanna con una expresión de desconcierto.

"Ese no parece su pañuelo."

"Es un pañuelo de Su Majestad."

Margaret preguntó sorprendida por la respuesta de Rihanna.

"¿Un pañuelo de su Majestad?"

"Sí."

"¿Por qué tienes un pañuelo de Su Majestad...?"

"Estaba llorando fuera del salón de banquetes."

A Rihanna le avergonzaba revelar ese hecho, pero no podía evitarlo.

"Su Majestad me lo dio cuando me descubrió."

"...¿Lloraste?"

"George se escapó para tener un encuentro secreto con Lisbeth."

Rihanna sonrió como si estuviera indignada.

"Es una locura. ¿Cómo creen que no lo descubriría?"

"Dama..."

"No tienes que mirarme de esa manera. Solo en ese momento me dieron ganas de llorar."

"......"

"De todos modos, trae el pañuelo después de lavarlo bien. Si ellos se enteran..."

Por supuesto, se refería a Lisbeth y George.

"Sólo les dices que no sabes nada. Me ocuparé de eso."

"Entendido."

"Además..."

Rihanna estaba a punto de hablar de sus nuevas sospechas, pero pronto se detuvo.

"No, hablaremos de ello mañana."

"¿Es un asunto importante?"

"Sí. Es un poco complicado así que prefiero no hablar de eso ahora que estoy cansada."

Rihanna suspiró, luego habló sobre lo que haría mañana.

"Mañana iremos al hospital, ¿verdad? Te lo diré en el carruaje."

"Sí, Dama. Duérmete inmediatamente después de bañarte."

"Gracias."

Hoy estaba tan cansada que realmente necesitaba hacerlo.

***

Al día siguiente, Rihanna estaba ocupada preparándose para trabajar en el hotel como de costumbre, cuando alguien tocó la puerta.  

"Puede entrar." 

Inmediatamente la señora Venigans apareció. Rihanna preguntó con una sonrisa.

"¿Qué pasa, señora Venigans?"

"Tengo algo que darte."

Entonces la señora Venigans le dio a Rihanna un vaso de cristal lleno de un jugo verde. Rihanna preguntó desconcertada.

"¿Qué es esto?"

"Es un jugo que contiene kale, espinaca, naranja y fresa. Es bueno para la salud, así que bébelo antes de irte."

"Gracias por cuidarme."

"Debes estar cansada por el banquete de ayer, así que tengo que cuidarte más." 

Rihanna tomó el vaso de la mano de la señora Venigans con una sonrisa.

Ella frunció el ceño ligeramente después de beberse el jugo de golpe.

"Es amargo."

"Porque contiene mucho kale. Piensa en este jugo como si fuera medicina."

"Entiendo. Gracias..."

¡Crash!

Repentinamente el vaso se deslizó de la mano de Rihanna. El vaso de cristal se rompió en un instante al chocar contra el suelo de mármol. La señora Venigans le preguntó a Rihanna conmocionada.

"¿Estás bien?"

"Oh, sí. Estoy bien."

Rihanna respondió con una expresión un poco desconcertada.

"He tenido un repentino dolor de cabeza."

"¿Sigues teniendo migrañas últimamente?"

"Sí. Han sido más frecuente últimamente."

"¿Quieres que llame al médico tratante?"

"No. La última vez que lo llamé para que me examinara completamente, me dijo que todo estaba bien. Sólo necesito descansar..."

En ese momento, la expresión de Rihanna se distorsionó ligeramente. La Dama Venigans se dio cuenta inmediatamente.

"¿Dama...?"

"......"

"¿Realmente estás bien?"

"Sí, estoy bien."

Rihanna respondió con una sonrisa.

"El médico tratante me dijo que no tenía nada malo. No te preocupes demasiado."

"Pero..."

"Es sólo una migraña."

"Por supuesto. Pero si continúa, asegúrese de avisarme."

"...Está bien. Gracias."

Pronto, las sirvientes entraron. Limpiaron los fragmentos de vidrio en el suelo mientras Rihanna las observaba atentamente. Cuando todas se fueron y sólo quedaba Margaret, ésta preguntó preocupada.

"¿Estás bien? ¿Necesitas un médico?"

"...Margaret."

Rihanna sonrió ampliamente.

"Creo que deberíamos adelantar la hora de ida al hospital."

***

sábado, 11 de septiembre de 2021

septiembre 11, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 28

Capítulo 28. Sospechas


"Tu esposo ocupará por recomendación el único puesto que está disponible. Escuché que eligen al ocupante de ese puesto mediante un meticuloso proceso de selección."

"...¿De verdad? Entonces la competencia debe haber sido feroz."

"He escuchado que se recibieron cientos de solicitudes de aspirantes que intentaron resaltar su valía. Es algo que se repite cada año."

"Felicidades, Condesa Royde. Puesto que el Ministro lo ha elegido personalmente después de una reunión, seguramente hará un buen trabajo."

"Entonces..." Rihanna preguntó notando algo extraño en la conversación. "¿Esta contratación especial ha sido influenciada por el Duque McDonnell?"

"Supongo que sí. Pero sólo fue posible con la aprobación final de su Majestad."

"Ya veo."

Rihanna se quedó pensativa al escuchar la respuesta.

'George es seleccionado repentinamente cuando se vuelven cercanos...'

Algo olía mal. George no tenía ninguna cualificación necesaria para que lo contrataran en el Ministerio de Finanzas entre numerosos candidatos. Rihanna lo sabía mejor que nadie. No entendía por qué fue contratado por recomendación del Duque McDonnell. ¿Que había considerado el Duque McDonnell para elegir a George?

'De ninguna manera...'

Una palabra apareció abruptamente en la mente de Rihanna.

'Soborno'.

Rihanna no habría sospechado al respecto si los dos siempre hubieran sido cercanos. Por supuesto, aunque no se podía considerar correcto elegir un candidato basándose en las relaciones interpersonales o en vínculos sanguíneos, tampoco era ilegal.

'Pero si se trata de soborno, es completamente diferente'.

Rihanna se marchó sonriendo gracilmente para dirigirse nuevamente hacia el Duque McDonnell. El Duque McDonnell reconoció a Rihanna mientras se acercaba, así que la recibió con una sonrisa.

"¿Condesa Royde? ¿Ha pasado algo?"

"Solo tengo una pequeña curiosidad."

Rihanna preguntó sonriendo para que el Duque no se alarmara.

"Si no le parece descortés, ¿Puedo preguntarte algo?

"Por supuesto. Puedes preguntarme."

"Me preguntaba por qué recomendó a mi esposo para ese puesto." El Duque McDonnell la miró desconcertada. Rihanna añadió con una sonrisa más profunda para evitar que sospechara. "¿Ha sido descortés preguntar el motivo?"

"¿Eh? De ninguna manera. Es algo que todo el mundo debería saber."

El Duque McDonnell habló después de quedarse pensativo durante un momento.

"Su esposo… ha estado trabajando en la gestión del Hotel Norden. Lo ha estado haciendo durante cinco años, ¿no?"

"Cuatro años, Su Alteza."

"Ya veo. De todos modos, he considerado la experiencia de que ha trabajado durante mucho tiempo en el Hotel Norden. Incluso la rentabilidad del Hotel Norden ha crecido enormemente desde que su esposo trabaja allí."

"......"

"Valoro mucho esa capacidad. Sobre todo si va a formar parte del Ministerio de Finanzas."

"Comprendo, Su Alteza."

Rihanna asintió con una sonrisa.

"Me siento avergonzada porque creo que te he hecho una pregunta sin sentido."

"No tienes porqué avergonzarte. Me alegra haber aclarado tu duda."

"Por favor cuide del Conde Royde, Duque McDonnell."

"Por supuesto. No te preocupes tanto. Tu esposo lo hará bien."

"......"

Rihanna se marchó después de inclinarse levemente. Incapaz de controlar su expresión facial, salió del salón de banquetes. Sólo cuando llegó a un lugar apartado de los demás la expresión de Rihanna se volvió seria.

'¿Una contratación basada en su experiencia de trabajo en el Hotel Norden?'

Incluso un tonto lo sabría. El crecimiento de la rentabilidad del Hotel Norden durante los últimos años ha sido conseguido por Rihanna y su padre. George prácticamente parecía un espantapájaros. Rara vez lograba algo por su mérito.

Por lo que sí lo habían contratado por su trabajo en el Hotel Norden, el Duque McDonnell debió haber recomendado a Rihanna o a su padre para el puesto.

'Si realmente esto tiene alguna relación con sobornos...' Si se descubriera, las consecuencias serían terribles.

En Esteraz, tanto el que soborna como el que recibe el soborno son castigados severamente. Si su suposición fuera cierta, ahora el divorcio no era una opción, sino una necesidad. Incluso para evitar que el Hotel Norden resultara involucrado en un escándalo.

'Tal vez pueda utilizarlo para destruir a George'.

martes, 7 de septiembre de 2021

septiembre 07, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 27

 Capítulo 27. Encuentro Fortuito (5)


"¿Por qué estabas llorando?"

"......"

Rihanna se quedó perpleja porque fue una pregunta muy personal.

No sólo estaba desconcertada por qué no entendía el motivo de esa pregunta, también la avergonzaba responder. Rihanna habló después de una breve consideración.

"Me entró polvo en los ojos."

"Te atreves a mentirle al Emperador."

"¿Por qué crees que estoy mintiendo?"

"¿Hay alguien que no frunza el ceño cuando le entra polvo en los ojos?"

"......"

Fue demasiado detallista. Rihanna se avergonzó aún más. No podría hacer nada aunque se le impusiera un castigo por mentir. Ella habló vacilantemente.

"Es un asunto privado, Su Majestad. Me disculpo por no responder en detalle."

Aunque muriera no podría decir que estaba llorando porque su esposo la estaba engañando con su hermana. Rihanna temía que Alexander siguiera preguntando al respecto, pero sorprendentemente no lo hizo.

"Lamento si he sido grosero. Ya puedes irte."

"Gracias, Su Majestad..."

Rihanna se marchó apresuradamente para que no tuviera la oportunidad de hacerle más preguntas difíciles. Alexander miró fijamente la espalda de Rihanna mientras se alejaba.

"Su Majestad."

Dijo el hombre que se acercó al Emperador. Alexander dirigió su mirada en la dirección en la que escuchó la voz.

"¡Kane!"

Kane Igor, se desempeñaba como asistente del Emperador. Tenía el cabello rojo ardiente y los ojos más oscuros que los de Alexander.

Parecía un poco molesto cuando se puso delante de Alexander. 

"No es seguro que andes solo."

"¿Estabas preocupado?"

"Por supuesto. ¿Con quién estabas?"

"La Condesa Royde."

"Oh, ¿La conociste?"

"Sí. No me reconoció."

"Bueno, como es una Condesa es raro que vea a su Majestad."

"Estaba llorando, así que le di un pañuelo."

"¿Llorando?"

Dijo el hombre con una expresión de desconcierto.

"¿Por qué? ¿Lloró de alegría porque su esposo se convirtió en burócrata?"

"No. En ese caso no estaría llorando sola."

"O quizás… hmm..." Kane preguntó. "¿Estamos pensando lo mismo?"

"Por lo que parece, esa suposición es muy probable."

Alexander murmuró mientras asentía.

"Debemos observarla de cerca. Creo que será una pieza importante."

***

Después  del encuentro fortuito con el Emperador Alexander, Rihanna regresó al salón de banquetes como si estuviera huyendo.

Ese encuentro le había dejado una fuerte impresión. El hecho de que el Emperador le hubiera dado un pañuelo, hizo que pasara a segundo plano la tristeza que sentía por culpa de George.

'En cuanto regrese, tendré que lavarlo para devolverlo'.

Rihanna guardó el pañuelo, luego caminó hacia donde estaba un grupo de damas nobles. Una de ellas la saludó al darse cuenta que se estaba acercando.

"'¡Oh, Dama Royde!"

Fue la Marquesa McCarthy. Rihanna sonrió mientras se incorporaba al grupo.

"Me alegra verla, Dama McCarthy."

La Marquesa McCarthy también trabajaba como burócrata. 

Ella recibió alegremente a Rihanna. "Felicidades. He escuchado que el Conde Royde se convirtió en un burócrata del Ministerio de Finanzas.

"Yo también me sorprendí. Me he enterado hace poco. He escuchado rumores que el Duque McDonnell ha usado su influencia."

"¿Entonces el Duque McDonnell tiene una relación cercana con tu esposo?

Otras damas de la nobleza intervinieron. Rihanna respondió sonriendo torpemente.

"Yo tampoco lo sabía, pero eso parece."

domingo, 5 de septiembre de 2021

septiembre 05, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 26

Capítulo 26. Encuentro Fortuito (4)


Rihanna salió del salón de banquetes conteniendo las lágrimas. Se mordió el labio inferior hasta el punto de casi sangrar. 

De repente detuvo sus pasos porque sus piernas comenzaron a flaquear. 'Pensé que estaba mentalmente preparada'.

Fue peor de lo que esperaba. 

Creía que tenía una fuerte mentalidad, pero no fue tan fácil mantener la compostura. Estaba reprimiendo sus ganas de armar un escándalo. Tenía que admitir que aún no había superado del todo la traición de los dos.

Pero se podría considerar normal. ¿Quién no se volvería loco en una situación como esta? Su hermana gemela tenía una aventura con su esposo. Más bien, resultaba increíble que quisiera vengarse mientras intentaba mantener la cordura.

Pero al final no pudo seguir reprimiendo su corazón, así que las lágrimas comenzaron a deslizarse por sus mejillas. Ella ni siquiera hizo un sonido de sollozo, por lo que si alguien la viera de espaldas, sólo pensaría que estaba quieta.

La forma en que lloraba sin emitir ningún sonido parecía anormal. Pero Rihanna no quería que nadie supiera que estaba llorando sola por amor propio.

"Hey."

Pero de todos modos, parecía que la habían descubierto. Rihanna miró hacia atrás al escuchar la voz masculina desconocida. El hombre le tendió un pañuelo con un rostro inexpresivo.

"Límpiate un poco."

Tenía el cabello negro como el ébano. Unos profundos ojos negros que parecían tragarse hasta la luz más brillante. Su rostro tallado como el de una estatua contrastaba con su robusto físico.

El hombre que le había hablado a Rihanna era bastante guapo. Ella sentía que lo había visto antes, así que intentó buscar en sus recuerdos.

"Mi brazo está a punto de caerse."

Rihanna, que recuperó los sentidos al escuchar nuevamente su voz, se apresuró a agarrar el pañuelo. Pero no hizo nada más después de eso. El hombre, que la miraba con una expresión seria en su rostro, se tocó el rabillo del ojo con el dedo.

"......"

La cara de Rihanna se puso roja de vergüenza por el hecho de haber sido descubierta llorando. Entonces se limpió toscamente con el pañuelo las lágrimas en su rostro.

"Gracias."

Rihanna estaba en una situación en la que no sabía qué decir aparte de eso. Realmente no estaba agradecida, hubiera preferido que esto no hubiera sucedido, pero no podía decir la verdad.

Estaba a punto de decirle que le devolvería el pañuelo después de lavarlo, pero inconscientemente miró la parte bordada del pañuelo.

Tragó saliva inconscientemente. En la parte inferior estaba bordado en un elegante estilo cursivo un nombre que cualquiera reconocería.

Alexander Esteraz.

Solo el apellido Esteraz bastaba para asombrarla, pero que también estuviera bordado el nombre Alexander significaba que estaba frente al Emperador. Finalmente, Rihanna se dio cuenta de que la sensación de déjà vu que sintió se debía a que lo había visto desde la distancia en la ceremonia de coronación del nuevo emperador hace dos años atrás.

Rihanna se inclinó asustada sintiendo que su mente se quedaba en blanco.

"Tengo el placer de conocer al Emperador, el Gran Sol de Esteraz. Soy Rihanna Royde."

"Ah, usted es la Condesa Royde."

"¿...Me conoce?"

"¿No es hija del Conde Norden? La recuerdo porque me he alojado en el Hotel Norden."

"Es un honor, Su Majestad."

"¿Su esposo no ha sido recién nombrado burócrata?"

Rihanna se quedó momentáneamente sorprendida por su pregunta.

'¿Cómo lo sabes?'

Sería normal que recordara a los burócratas que trabajaban en el Palacio Imperial. Pero parecía poco probable que el Emperador recordara a cada uno de los burócratas recién nombrados.

"Sí, Su Majestad."

"A diferencia del principio, ahora hablas rápidamente."

"No había podido reconocer el rostro de Su Majestad..."

Rihanna no tenía excusa, así que se mordió el labio inferior.

Honestamente resultaba difícil afirmar que ella tenía toda la culpa, nunca pensó que el Emperador le hablaría por su estatus. Además, nadie hubiera imaginado que estuviera por esta área sin un sirviente o escolta.

'Pero sigue siendo una grosería no reconocer al Emperador'.

Independientemente del motivo, tenía que doblegarse en esta situación. Rihanna habló siendo incapaz de levantar la mirada.

"Lo siento. Enviaré el pañuelo al palacio principal después de que esté lavado."

"Puedes hacer lo que te parezca conveniente."

"Agradezco la amabilidad de Su Majestad, y perdóneme por el comportamiento de hoy."

Rihanna habló tan educadamente como pudo inclinándose profundamente.

"Entonces..."

"Espera un momento."

Alexander le dijo a Rihanna. Ella lo miró aún cautelosa.

"¿Por qué estabas llorando?"

jueves, 2 de septiembre de 2021

septiembre 02, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 25

Capítulo 25. Encuentro Fortuito (3)


No sólo asistieron al banquete todos los burócratas recién nombrados, sino también los burócratas de alto rango y los nobles.

Por lo tanto, los burócratas recién nombrados se esforzarían para garantizar una mejor carrera en el sector público. Estaban ocupados entablando conversaciones.

"Rihanna."

Por supuesto que George no fue una excepción.

"Mira, ahí está el Duque McDonnell. Ha contribuido considerablemente para mi nombramiento como burócrata. Debemos saludarlo educadamente."

Rihanna asintió aunque no quería. El Duque McDonnell era Ministro de Finanzas y una de las personas más poderosas del Imperio Esteraz. Como demostración de su influencia, estaba rodeado de muchas damas nobles como un enjambre de abejas.

"Permiso, permiso. Necesito pasar."

Georges consiguió abrirse paso entre la multitud para llegar hasta el Duque McDonnell. Rihanna se sintió bastante avergonzada durante el proceso.

"¡Su Alteza, Duque McDonnell!"

"Oh, es el Conde Royde."

"¿Cómo has estado? Ha pasado mucho tiempo."

"Ni siquiera recuerdo cuándo fue la última vez que nos vimos."

"Por cierto, he venido con mi esposa. Saluda, Rihanna."

"Encantada de conocerlo, Duque McDonnell. Me llamo Rihanna Royde."

Rihanna se inclinó cortésmente.

A pesar de que ellos estaban relacionados por la sangre, nunca lo había conocido porque se trataba de un pariente lejano de George.  El Duque McDonnell tenía alrededor de 50 años de edad, pero como tenía un buen físico parecía de 40 años de edad. Respondió al saludo de Rihanna, echando hacia atrás su cabello plateado bien peinado.

"Un placer conocerla, Condesa Royde. Realmente eres muy hermosa como se rumorea."

Rihanna sonrió avergonzada. Después del saludo cordial, los hombres comenzaron a hablar entre ellos. Como no sería apropiado que ella interviniera, permaneció al lado de George como una estatua.

Pero la conversación no se prolongó durante mucho tiempo debido a la gran popularidad del Duque McDonnell. Después de alejarse del Duque McDonnell, George le dio una palmada en el hombro a Rihanna.

"Ahora que lo has saludado, puedes hacer lo que quieras."

"Entonces baila conmigo, George."

De hecho, ella no tenía la menor intención de hacerlo, pero tenía curiosidad por saber cuál sería la reacción de George. Como esperaba, puso una expresión de fastidio. Ni siquiera pudo controlar sus emociones.

"¿Tienes algo más que hacer? ¿Debo saludar a alguien más?"

"No. Sólo quiero descansar… estoy un poco cansado."

Como Rihanna asintió tranquilamente, George se quedó desconcertado.

"¿Te parece bien?"

"Pareces cansado."

Rihanna preguntó ladeando ligeramente la cabeza.

"¿No necesitas descansar un poco?"

"Sí, lo sé."

"Entonces, nos vemos en un rato."

Rihanna se alejó de George sin pensarlo dos veces después de decir esas palabras. George se quedó bastante desconcertado por la inesperada facilidad con la que se había desarrollado la situación. Ladeó la cabeza con una expresión incredulidad.

'Me parece extraño que haya desistido fácilmente'.

Normalmente ella se habría mantenido a su lado, mostrando signos de preocupación ante la palabra cansancio. Pero hoy actuó como si fuera otra persona. George comenzó a sospechar de la extraña actitud de su esposa, pero no duró mucho.

"George."

Porque alguien tocó su hombro. Cuando el sorprendido George giró la cabeza, vio a una sonriente Lisbeth. Le preguntó.

"¿Dónde has estado?"

"Estuve conversando con algunas damas."

"Como esperaba, eres muy sociable."

"¿Dónde está mi hermana? No la veo."

"Me ha dejado solo después de decirle que estaba cansado."

George le preguntó a Lisbeth con una sonrisa traviesa.

"¿Qué te parece si vamos a un lugar donde no haya nadie?"

"¿Te has vuelto loco? ¿Y si alguien nos ve?"

"El palacio es demasiado grande. Nadie nos descubrirá si nos escondemos bien."

"Está bien. Saldré primero, así que puedes seguirme lentamente."

Lisbeth, que fue fácilmente convencida, se marchó del lugar. Poco después de que ella se fuera, George también se marchó.

George estaba tan emocionado por su íntimo encuentro secreto que no le prestó atención al entorno. Rihanna los observaba desde la distancia con una expresión fría en su rostro.

***

domingo, 29 de agosto de 2021

agosto 29, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 24

Capítulo 24. Encuentro Fortuito (2)


Como esperaba, los ojos de Lisbeth se entrecerraron al verlos con los brazos cruzados. La sonriente Rihanna lo notó claramente.

'Debe gustarte mucho'.

Realmente no quería utilizar tácticas tan infantiles, pero mientras pudiera causarle dolor a los dos cualquier cosa estaba bien.

"No, Rihanna."

George habló tranquilamente.

"Todavía queda mucho tiempo."

"Pero vayamos rápido. No debemos llegar tarde a un evento importante."

"Tienes razón."

George añadió entonces con voz dulce.

"Por cierto, hoy estás aún más hermosa."

"...¿De verdad?"

Se había asegurado de estar bien arreglada. No quería escuchar tonterías en el futuro. Pretendía reducir al máximo los posibles rumores de que su esposo la había engañado porque ella no prestaba atención a su apariencia.

"Tu también te ves genial hoy."
 
***
 
Al salir de la mansión los tres se dirigían al mismo carruaje como de costumbre.

"Lisbeth, espera."

Rihanna detuvo a Lisbeth que estaba a punto de subirse al carruaje. Lisbeth sorprendida le preguntó qué estaba haciendo. Rihanna habló tranquilamente mirando a Lisbeth.

"Hoy saldremos en carruajes diferentes."

Lisbeth y George pusieron una expresión de asombro en sus rostros.

"¿Por qué repentinamente? Habitualmente..."

"Porque hoy tengo algo que decirte."

"...¿A mí?"

George se puso nervioso inconscientemente porque ella estaba hablando seriamente. Rihanna asintió sonriendo.

"Son asuntos de pareja, así que es un poco vergonzoso que mi hermana escuche."

"......"

"¿Estás de acuerdo, Lisbeth?"

"...Por supuesto, hermana."

Lisbeth asintió sin mostrar ningún indicio de disgusto.

"Los seguiré en el pequeño carruaje."

"Nos vemos más tarde, Lisbeth."

Rihanna se subió rápidamente al carruaje. Lisbeth miró a George con una expresión de desconcierto. George miró a Lisbeth con una expresión de impotencia. Lisbeth, qué frunció el ceño ligeramente, le hizo un gesto para que entrara rápidamente al carruaje. George se dio la vuelta para subirse al carruaje.

Finalmente el carruaje partió hacia el palacio imperial de Esteraz.

"¿Es importante lo que me vas a decir?"

Ella no dijo nada aún después de que el carruaje estuviera en marcha, por lo que el asustado George preguntó primero.

Rihanna, que hasta entonces había estado mirando por la ventana, finalmente dirigió su atención a George. Se notaba inquieto como una persona que había hecho algo malo.

¿Realmente él creía que ella nunca lo descubriría con un comportamiento como ese? Rihanna, que se burló para sus adentros, habló seriamente.

"Sí, es importante."

"¿Qué es?"

"Sólo quería decirte que estoy muy orgullosa de ti."

George se sorprendió por las inesperadas palabras. Rihanna sonrió suavemente.

"Siempre quisiste convertirte en un burócrata y trabajar para el Imperio."

"......"

"Estoy muy feliz de que hayas cumplido tu sueño. Estoy orgullosa de ti.."

"...¿En serio?"

"¿Por qué me haces esa pregunta?"

Obviamente ella no lo decía en serio.

"¿Crees que estoy mintiendo?"

"Nunca pensé que me admiraras."

"Admirar..."

Rihanna se rió para sus adentros al escuchar una palabra completamente inesperada.

¿Quería que lo admirara cuando tenía una aventura extramarital? Incluso cuando le gustaba no había nada que pudiera admirarle, pero ahora que descubrió que estaba siendo infiel, eso sería ridículo.

"Siempre te he admirado."

"No me esperaba esto."

"Por supuesto, es como si fueras el mismo cielo."

"Gracias por esas palabras."

Por fin los hombros caídos de George se alzaron.

"Lo haré mejor a partir de ahora, Rihanna."

"También haré todo lo que pueda para ayudarte."

Hay que responder a las mentiras con otra mentira.

***

El carruaje finalmente llegó al palacio imperial de Esteraz.

En cuanto se bajó del carruaje, fue recibida por la vista del enorme palacio. A pesar de que no se trataba de la primera vez que estaba en este lugar, siempre se sentía abrumada por su majestuosidad.

"¿Qué estás haciendo?"

Una voz molesta la hizo recuperar los sentidos. Cuando se dio la vuelta, vio a George con el ceño fruncido. Parecía que no le gustó que estuviera admirando el palacio imperial. Rihanna respondió rápidamente.

"Te seguiré."

Rihanna no sabía cuánto tiempo estuvo contemplando el lugar. Se rió para sus adentros mientras entraba en el palacio imperial con George.

viernes, 27 de agosto de 2021

agosto 27, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 23

Capítulo 23. Encuentro Fortuito (1)


"No creo que puedan seguirse revolcando en esta mansión por mucho tiempo."

"Entiendo."

"Por otra parte, Margaret."

Rihanna, que seguía mirando el calendario, pronto cambió de tema.

"Creo que necesitamos un médico."

"¿Médico?"

"Desde hace dos meses no menstrúo."

"Ahora que lo pienso, es verdad."

"Creía que podría regresar el mes pasado, pero extrañamente no lo ha hecho."

"Tal vez..."

Margaret le preguntó a Rihanna con cautela.

"¿Estás embarazada?"

"De ninguna manera."

Rihanna negó con la cabeza. Por muy lamentable que fuera la verdad, no había tenido s3xo en los últimos tres meses como para suponer que estaba embarazada. Margaret cambió de tema sin hacer más preguntas.

"Llamaré al médico tratante lo antes posible."

"...No."

Rihanna dijo tras un momento de reflexión.

"No puede examinarme el médico tratante. Iré al hospital personalmente."

"¿Irás personalmente al hospital? ¿Por qué tendrías...?"

"El médico tratante es conocido de la familia Royde."

Dijo Rihanna fríamente.

"Mi esposo me ha traicionado, no puede confiar fácilmente en las personas."

"Ah..."

"Tengo que asistir a una fiesta mañana, así que iré pasado mañana."

"Te recomiendo el hospital al que voy. Podría llevarte allí."

"Sí, me gustaría."

"Entonces acuéstese temprano hoy. Hay una fiesta mañana... y parece que no está durmiendo mucho últimamente. Si está bajo mucho estrés, es posible que no pueda menstruar."

"Gracias."

Rihanna bromeó sonriendo.

"Eres mejor que mi esposo."

"Dama..."

A pesar de que lo dijo sin pensarlo mucho, Margaret le dio mucha importancia. Ella sujetó con fuerza la mano de Rihanna con una expresión desgarradora.  Un poco abrumada por su repentina acción, Rihanna preguntó sonriendo nerviosamente.

"¿Por qué haces esto repentinamente?"

"Estoy segura de que serás feliz."

"La única felicidad que me queda es mirar a esos dos cayendo al infierno."

"No, además de eso. Seguro que podrá formar una familia con alguien mejor."

"...Ya ni siquiera quiero eso, Margaret."

"Rezaré por ti. Para que puedas conocer a un hombre mejor."

Margaret le sugirió a Rihanna una idea que se le ocurrió repentinamente.

"¿Qué te parece si sales con alguien más?"

Sus inesperadas palabras hicieron que Rihanna se riera.

"Olvídalo. Eso será perjudicial para el divorcio."

"Realmente..."

Dijo Margaret con una mirada sombría.

"Creo que es tan importante que seas feliz como que esos dos sean infelices."

"Eso es cierto."

Rihanna dijo algo que hizo que Margaret se sintiera un poco aliviada.

"Si ambos se son infelices, entonces reconsideraré mi propia felicidad."

***

Al día siguiente.

La fiesta de bienvenida de los nuevos burócratas se celebraría en la mañana, así que Rihanna se levantó temprano. Hacía mucho tiempo que ella no asistía a un banquete imperial. Algunas sirvientas incluyendo a Margaret arreglaron a Rihanna.

Dadas las circunstancias, Rihanna no se sentía emocionada por asistir a la fiesta como pareja de George, pero estaba dispuesta a cumplir con sus deberes de esposa hasta el divorcio.

"Hemos terminado, Dama."

Justo a tiempo. Rihanna se miró fijamente en el espejo de cuerpo entero. Su cabello castaño como las nueces estaba perfectamente peinado y sus ojos dorados brillaban como piedras ámbar. El vestido color perla que llevaba ceñido a su cuerpo, le recordaba al cuento de la diosa de la belleza que nació de la espuma del mar.

Rihanna era hermosa. Tenía la misma apariencia que hace cuatro años.

'George me engañó aún siendo tan hermosa.....'

Rihanna, que se sumió en sus pensamientos, sacudió la cabeza.

'No tiene sentido pensar en ello'.

Rihanna renunció a encontrar razones para entender la infidelidad de George. Ella no tenía la culpa de nada. Seguramente la habría engañado aunque no tuviera ningún defecto. Eso la hizo sentir un poco mejor.

"George."

Mientras bajaba al primer piso, vio a su esposo. No pensó en nada hasta que Lisbeth apareció en el rango de su visión.

"......"

Cuando estaba casi al final de la escalera, Rihanna cambió de opinión y se acercó a George con una sonrisa.

"¿Llego tarde?"

Naturalmente, ella enlazó sus brazos. Lo hacía con la intención de que Lisbeth lo viera.

miércoles, 25 de agosto de 2021

agosto 25, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 22

Capítulo 22. La Carta (4)


"Por supuesto, sé que te preocupas por mí."

Lisbeth habló lentamente.

"Dame un poco más de tiempo, hermana. A pesar de que me gusta la soltería... consideraré seriamente el matrimonio."

"Me alegra tu determinación."

"No la presiones demasiado, Rihanna."

En ese momento George intervino

"El matrimonio es un asunto importante, no hay que precipitarse."

"Tienes razón."

Rihanna miró a George sonriendo.

"Pero nosotros también nos casamos apresuradamente."

"......"

"Sin embargo, hemos vivido felices hasta ahora, ¿verdad?"

"Eso porque estamos muy enamorados."

"Estoy segura de que si Lisbeth abre su corazón, pronto encontrará a alguien también."

"Por supuesto, Lisbeth es una gran persona."

"Tengo curiosidad por algo, George."

"¿Cuál es? Pregunta."

"El vestido que dijiste que me regalarías por nuestro aniversario."

"Hmm..."

"¿Cuándo llegará? Pensaba usarlo en la fiesta del día de mañana. Es una pena."

Rihanna dijo mirando fijamente a George.

"Todavía no has dicho nada."

"Oh, ese vestido..."

"¿Realmente llegará? ¿El barco tuvo algún problema?"

"No, de ninguna manera."

George respondió rápidamente.

"Probablemente... estará aquí dentro de una semana. Así que te has acordado del vestido."

"Por supuesto, no podría olvidar el regalo que me has preparado. Es lo único que he estado esperando."

"Puedo entenderte."

"Así que que todavía no he decidido qué vestido usaré para la fiesta de bienvenida de mañana. Es una ocasión importante, así que podría asistir su Majestad."

"No te estreses pensando en eso, Rihanna. Te verás hermosa sin importar lo que te pongas."

"Gracias, George."

Rihanna sonrió mirando cariñosamente a George. Por otra parte, Lisbeth los miraba a los dos con una expresión fría en el rostro.

***

"Parece que se llevan bastante bien últimamente."

Lisbeth se mostró sarcástica cuando visitó la habitación de Georges después de la cena. George le dijo después de suspirar.

"No puedo tratar a Rihanna fríamente. Si lo hago, pronto nos descubrirán. He tenido que actuar durante todo este tiempo, no podemos arruinarlo todo."

"......"

"Lo estás haciendo bien, ¿qué te pasa?"

"No lo sé."

"¿Estás molesta?"

George abrazó a Lisbeth sonriendo levemente.

"¿Cómo puedo contentarme?"

"Olvídalo."

Frotando suavemente sus labios en el cuello de Lisbeth, George trató de apaciguar su estado de ánimo. De repente, cambió el tema de conversación.

"...¿Por qué demonios Rihanna quieres que te cases de repente?"

"......."

"Durante cuatro años no mencionaba nada al respecto, pero extrañamente estos días no ha dejado de mencionarlo."

"El comportamiento de mi hermana es repentino, pero no es extraño. Porque he estado en esta mansión durante mucho tiempo."

Dijo Lisbeth como si fuera algo insignificante.

"Sabes que no es habitual que una hermana se quede en el hogar de su hermana casada."

"Eso es cierto."

George la besó suavemente en la mejilla como si estuviera decepcionado.

"Si hubiera sabido que esto sucedería, me hubiera enamorado de ti antes."

"¿Qué sentido tiene arrepentirse del pasado? Sólo tenemos que aguantar un poco más."

"¿De verdad?"

"Por supuesto."

Lisbeth besó suavemente a George. Ella susurró con ojos brillantes después de despegar sus labios.

"Adelantaré los planes."

"¿Eso es posible?"

"De todos modos, sería pronto. No creo que sospechen porque sea un poco más rápido."

Lisbeth levantó maliciosamente las comisuras de sus labios.

"Un poco más de paciencia. Entonces podremos estar juntos toda la vida."

***

Al mismo tiempo en la habitación de Rihanna.

"Nunca pensé que la Dama Lisbeth diría que había roto su relación."

"Ella es inteligente. Yo también habría dicho lo mismo."

Dijo Rihanna mirando con indiferencia el calendario sobre su escritorio.

"Porque de esa manera podría posponer el inicio de una nueva relación utilizando su corazón roto como excusa."

"Si hubiera sabido que diría eso, hubiera escrito otra carta hoy."

"Realmente no hubiera sido lo mejor. Lo más seguro fue hacerlo una sola vez. Nunca es bueno tener una cola larga."

"Tienes razón. No hay necesidad de empeorar la situación."

"Con solo asustarla logramos el objetivo deseado."

"¿Pero qué harás si ellos se dan cuenta de que lo sabes?"

"...No hay nada que pueda hacer al respecto."

Rihanna respondió con una expresión despreocupada.

"Pero en ese caso no creo que ninguno de los dos pueda reprimirse."

"Entonces, ¿piensas seguir observando?"

"No, tengo que hacer algo."

Rihanna sonrió mientras le decía a Margaret.

"Tengo un plan en mente."

viernes, 21 de mayo de 2021

mayo 21, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 21

Capítulo 21. La Carta (3)


"¿No has recibido cartas de tu novio últimamente?"

Debido al inesperado comentario de Rihanna, ambos se detuvieron y la miraron. Lisbeth, que se ponía nerviosa en estas situaciones, estaba harta de las preguntas de Rihanna. Pensando que esto debía terminar hoy, habló con una voz conmovedora

"Yo rompí nuestra relación."

"¿Rompiste?" Preguntó Rihanna con cara de asombro ante la inesperada confesión. "¿De repente? ¿Por qué? No es porque he mencionado el tema del matrimonio, ¿Verdad?"

"No es por esa razón." Lisbeth argumentó astutamente. "Simplemente, no encajábamos en muchos aspectos."

"Ya veo..." Dijo Rihanna con pesar. "Que bueno que no nos hayamos reunido. Me emocioné en vano."

"Por eso no te lo presenté, hermana." Lisbeth le explicó a Rihanna las circunstancias. "En realidad, tuvimos algunos problemas."

"...¿En serio? Ahora entiendo porque envió una carta de amor." Deliberadamente, Lisbeth no le dijo que la carta había sido enviada por un pervertido. Porque si ella lo hacía, Rihanna lo usaría como un pretexto para hablar del matrimonio.  "Afortunadamente te separaste sin problemas."

"Sí, hermana..."

"Anímate, Lisbeth. Hay hombres buenos por todas partes."

"Gracias, hermana. Pero por el momento..."

"Ah, hablando de esto." Rihanna interrumpió a Lisbeth espontáneamente. "¿Qué te parece si te presentamos a alguien?"

"¿Presentarme a alguien?"

"Bueno, conozco a un buen joven noble. Creo que te gustará. Es..."

"¡Hermana!" Esta vez, Lisbeth la interrumpió. Rihanna miró fijamente a su hermana. "¿Por qué quieres desesperadamente que me case?"

"...¿Desesperadamente?" La expresión de Rihanna se hundió instantáneamente. Hubo un momento de silencio en la mesa. Rihanna que miraba a Lisbeth fijamente, rompió el silencio. 

"La razón por la que quiero que te cases."

"......"

"¿Realmente no lo sabes?"

Lisbeth sintió que se ponía rígida ante la mirada penetrante y la sospechosa pregunta. Pensó que tal vez Rihanna le hizo esa pregunta sabiéndolo todo. 

Pero como había dicho George la última vez, Rihanna no resolvería esto tranquilamente, simplemente haciendo que ella se casara. Al igual que George, Lisbeth conocía bien a Rihanna. Su hermana era tranquila y generosa, pero no toleraría una aventura de ella con su esposo.

Sin embargo, Lisbeth no sentía mucho afecto por su padre, el Conde Norden. Por lo tanto, pasó por alto lo mucho que Rihanna amaba al Conde Norden y cómo ese amor podía suprimir su ira hacia ella. Irónicamente ese hecho sirvió para ocultar las verdaderas intenciones de Rihanna. Y cualquier idea que tuvo Lisbeth desapareció rápidamente.

Lisbeth habló rápidamente. "Realmente no lo sé. No entiendo porque haces esto de repente."

"......"

"Me incomoda que de repente hables del tema de que tengo que casarme."

"¿De verdad? Entonces creo que he sido muy indiferente contigo." Rihanna habló con voz tranquila. "Pero siempre he pensado en ello. Cada vez que te escuchaba decir que no te casarías demasiado tarde, me tranquilizaba. Confiaba en que lo harías en el momento adecuado."

"......"

"Sin embargo, no sabía que te importaba tan poco casarte como para sentirte incómoda cuando te hablaban de ello. Ya han pasado cuatro años desde que estás viviendo en esta mansión."

"Hermana..."

"Padre también quiere que te cases lo antes posible."

Rihanna dirigió su mirada hacia George por un momento.

"Quiere conocer a sus nietos pronto."

George se estremeció ante sus palabras.

"Hermana, conoces a la Dama Bergius, ¿No?"

"Sí."

"La Dama Bergius el otro día recibió una carta del pervertido. Seguramente recuerdas que desde hace cinco años..."

"Lo sé. He escuchado al respecto."

"Genial. Entonces puedes entenderme. Me preocupo después de escuchar esas historias." Rihanna preguntó, mirando a Lisbeth directamente a los ojos. "Todavía no has recibido una de esas cartas, ¿Verdad?"

"......"

Lisbeth se quedó mirando a Rihanna estupefacta. Le vino a la mente el recuerdo de la carta que había recibido. Sin embargo, no podía decir nada al respecto. Si lo hiciera, su hermana hablaría de nuevo del matrimonio.

"De todos modos, estoy segura de que entiendes como me siento, Lisbeth. Me preocupa que termines sola para siempre."

"......"

"Todo es por tu bien. Lo comprendes, ¿Verdad?"

miércoles, 7 de abril de 2021

abril 07, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 20

Capítulo 20. Una Carta (2)


...Ella no sabía con qué voluntad pudo terminar de comer. 

Después de terminar de cenar a un ritmo más rápido de lo habitual, Lisbeth tomó la carta y salió del comedor como si estuviera huyendo.

Fue directamente a su habitación y cerró la puerta al entrar. Entonces, con las puntas de sus dedos temblorosos abrió el sobre y sacó la carta.

'...Qué demonios'.

Había algo bastante inesperado escrito en ella.

[Querida Dama Lisbeth Norden]

[¿Cómo has estado? Tu hermosa piel blanca, que vi en la última fiesta, sigue pareciéndome tentadora. Una nariz elegante, unas pronunciadas clavículas que parece que podrían acumular agua cuando llueve, unos sen0s que se asemejan a colinas con las que provoca jugar…]

Después de eso, el contenido se volvía tan obsceno y vergonzoso que ni siquiera podía hablar de ello. Lisbeth se puso cada vez más roja. Al final terminó arrugando la carta sin terminar de leerla. No necesitaba mirar el contenido pervertido escrito en las líneas restantes.

"Repugnante."

Sólo entonces Lisbeth se dio cuenta de quién había enviado la carta.

"Esto coincide con el loco pervertido..."

Seguramente era el pervertido del que habían hablado por la tarde en el Marquesado Ezra.

Lisbeth con el ceño fruncido por el desagrado, acercó la carta arrugada al candelabro. Las llamas se extendieron rápidamente por el papel. Después de un momento, sólo quedaron las cenizas de la carta.

Lisbeth sacudió sus manos, sin ocultar su disgusto.

"Tengo mala suerte. Están sucediendo cosas extrañas."

Si hubiera sabido esto, debería haber abierto la carta en el comedor. Justo cuando Lisbeth se sentía frustrada.

Toc Toc Toc, Toc Toc, Toc.

George tocó la puerta al ritmo que ambos conocían. Lisbeth abrió inmediatamente la puerta y vio a George que tenía una expresión de preocupación.

"¿Está todo bien?"

"......"

"Has comido rápido."

"...Sí, estoy bien."

"¿Qué es eso de la carta de amor? ¿Quién te la enviado?"

"George, ¿Sabes del loco que escribe cartas pervertidas?"

"...¿Sí?"

"Seguramente has escuchado hablar de ello. Desde hace 5 años, alguien ha estado enviando cartas pervertidas de forma anónima a Damas solteras, y parece que esta vez soy el objetivo."

"...¿Qué? ¿Has recibido una de esas?"

"Sí, definitivamente es ese tipo."

"De ninguna manera...¿Estás segura?"

"¿De ninguna manera?" La respuesta de George, que parecía indicar que no podía creer lo que decía, hizo que Lisbeth se sintiera indignada. "Yo misma la leí. ¿No me crees?"

"Te creo...." 

George preguntó con intriga.

"¿Dónde está la carta? Tengo que verla."

"No, no era necesario que la vieras. El contenido era basura, así que la arrugué y la quemé."

"¿Qué? ¿Por qué la quemaste?"

"¿Por qué? ¿Querías tener esa cosa desagradable?"

"No...tenemos que encontrar al culpable."

"No podemos encontrarlo. Es un problema desde hace cinco años y aún no lo han capturado. Una simple carta anónima no será suficiente para encontrar al culpable. Sólo pensemos en ello como que he pisado caca."

"Pero en todo caso, dejemos..."

"No, olvídalo. No hablemos más de esto. Parece que estoy volviendo a recordar el contenido de esa carta, eso es muy desagradable."

"Sí, está bien."

A Lisbeth la invadió el horrible recuerdo. George se apresuró a abrazarla y consolarla. "Debes haberte sorprendido mucho. ¿Realmente estás bien? ¿Te ha hecho algo?"

"Nada de eso. Ni siquiera es una verdadera amenaza. Sólo envía cartas."

"Eso es un alivio."

"Es un cobarde. Sólo teme que su cola se haga más larga."

Tal vez esa sea la razón por la que no se ha descubierto su identidad durante tanto tiempo. A pesar de que enviaba cartas desagradables, no suponía una verdadera amenaza. Esto significa que a menos que alguien estuviera firmemente decidido a hacer algo al respecto, sería difícil descubrirlo.

Probablemente con eso en mente, el pervertido sólo enviaba cartas a Damas solteras. Dirigirse a una mujer casada podría hacer que los rumores se propagaran rápidamente y que las cosas se agravaran. Por supuesto, el culpable no expresó públicamente su opinión, pero todos suponían lo mismo.

"Ahora mi hermana cree que es una carta de amor enviada por mi novio."

"Sin embargo, afortunadamente todo está bien por ahora. Rihanna simplemente lo olvidará."

"Bueno, tienes razón."

Lisbeth respondió despreocupadamente.

"Supongo que pronto perderá el interés."

***
 
Desafortunadamente, el interés de Rihanna no desapareció tan rápido.

Desde ese día, Lisbeth no había recibido otra carta, pero la forma en que Rihanna la miraba se había vuelto un poco extraña. Eso no le agradaba a Lisbeth. Cada vez que hacían contacto visual, ella sonreía pícaramente.

Lisbeth creía saber por qué Rihanna hacía eso, pero no podía crear un novio que no existía. Lamentaba no haber abierto la carta cuando Rihanna le dijo que lo hiciera. Después de todo, inconscientemente Lisbeth se sentía bajo estrés desde ese incidente.

"¿No has recibido cartas de tu novio últimamente?"

Escuchó estas palabras durante la cena del día anterior a la fiesta de bienvenida de los nuevos burócratas.

domingo, 7 de marzo de 2021

marzo 07, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 19

Capítulo 19. Una Carta (1)


Lisbeth regresó a la Mansión Royde antes que Rihanna. 

George también había salido, así que por los momentos estaba sola en la mansión. Lisbeth se puso a leer, mientras llegaba la hora de la cena.

"Dama Lisbeth, la cena está lista."

Lisbeth escuchó las palabras de la sirvienta, y se dirigió al primer piso. Cuando entró en el comedor, se encontró con Rihanna y George.

"Hola, Lisbeth. Buenas noches."

"Hola, hermana. Hola, George."

"Hola, Lisbeth."

Rihanna sintió ironía mientras observaba a los dos saludándose con naturalidad. Pero por fuera, sonreía alegremente como si estuviera satisfecha con esta relación familiar amable y cordial.

"Siéntate rápido. El menú de esta noche es muy bueno."

"Genial porque tenía hambre."

No pasó mucho tiempo antes de que se sirviera la cena. Los tres comieron en silencio mientras cortaban los filetes ante ellos. Pero ese día la mesa estaba especialmente tranquila porque Rihanna, que siempre iniciaba las conversaciones, permanecía en silencio. Antes de que George y Lisbeth se dieran cuenta, ella habló.

"George."

George, que había sido llamado, miró fijamente a Rihanna. Ella sonrió y le preguntó.

"¿Sabes qué?"

"¿Qué?"

"Hoy estoy de buen humor."

George estaba desconcertado por la repentina confesión, le preguntó.

"¿Qué pasa? ¿Hoy ha pasado algo en el hotel?"

"Bueno, no ocurrió en el hotel."

Respondió Rihanna, negando con la cabeza.

"Hoy llegué a casa antes que tú, y me encontré con algo muy interesante en cuanto entré."

"¿A qué te refieres?"

"Lisbeth."

Esta vez, en lugar de responder, Rihanna llamó a Lisbeth. Lisbeth, que estaba cortando espárragos en silencio, levantó la mirada. Entonces, mientras estaba desconcertada, escuchó algo sorprendente.

"Tienes un novio muy agradable."

"....¿Eh?"

Por qué mencionaba eso repentinamente. 

El corazón de Lisbeth comenzó a latir un poco más rápido.

"Me preguntaba si debía leerla o no."

"...¿De qué estás hablando?"

"La encontré hoy cuando entré en la mansión."

Rihanna dijo mientras miraba a Lisbeth.

"Parece que la persona con quien sales te ha escrito ​una carta."

En cuanto escuchó esas palabras, Lisbeth sintió que la sangre de su cuerpo se congelaba.

"...¿Qué?"

Imposible. La persona con quien Lisbeth se encontraba era George.

"......"

"......"

"Margaret, trae la carta."

Poco después, Margaret trajo una carta. Rihanna la recibió y se la entregó a Lisbeth. Lisbeth trataba de ocultar su nerviosismo mientras agarraba la carta. De nuevo, escuchó la voz de Rihanna.

"Iba a dejarla en tu escritorio sin decir nada, pero estaba muy feliz y no pude controlarme."

"......"

En la superficie del sobre blanco sin ningún patrón, solamente estaba escrito, 'Querida Dama Norden', con una elegante caligrafía.

'Esa no es la letra de George'.

No tenía sentido que recibiera esta carta.

Por otra parte, Rihanna continuó hablando con una voz emocionada.

"Incluso ambos han estado intercambiado cartas. ¿Cómo no me di cuenta antes? ¿Cuánto tiempo han estado haciéndolo?"

"Hermana, esto es..."

"Vamos, deberíamos comer juntos alguna vez. ¿Eh?"

"......"

"De todos modos, dijiste que probablemente lo conocía. Así que no te sentirás agobiada. ¿Qué te parece?"

"...Lo pensaré."

"Gracias. Deprisa, abre la carta. Tengo curiosidad por lo que dice."

"Hermana, yo también tengo una vida privada..."

"Sí, Rihanna. No deberías entrometerte en esas cosas."

"Hmm... Supongo que tienes razón."

Rihanna desistió al escuchar las palabras de George, que se puso del lado de Lisbeth.

Luego, con una sonrisa en la cara, dijo.

"Está bien. Entonces. Léela cuando estés sola."

martes, 23 de febrero de 2021

febrero 23, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 18

Capítulo 18. Pervertido


Esta vez, Lisbeth tampoco le respondió, sólo sonrió de forma enigmática. Evidentemente, ella no quería hablar de ese tema. Lisbeth era una mujer que preferiría morir antes de hacer algo que no quisiera. George renunció a escuchar una respuesta. Parecía que ella tenía una gran razón para no decirlo.

"De todos modos, procura hacer las cosas bien hasta que renuncies."

"...Por supuesto, no soy tonto. No te preocupes."

Entonces, George se levantó de la cama, se acercó a Lisbeth y la besó en la frente. Lisbeth puso una expresión de satisfacción, como si eso le resultara placentero.

"Pero, ¿Por qué Rihanna saca de repente el tema de tu matrimonio? Nunca había dicho nada al respecto."

"A mí también me sorprendió ayer."

Lisbeth le preguntó a George con una sonrisa.

"¿Será que ha descubierto nuestra relación?"

"De ninguna manera. Ni siquiera bromees con eso. Eso es terrible."

George negó con la cabeza con el ceño fruncido.

"He dormido con Rihanna durante cuatro años. Si Rihanna lo supiera, no se quedaría quieta."

"Bueno, eso es cierto. Aunque mi hermana sea tranquila, nunca podría soportar esto. Hemos cruzado la línea."

"Probablemente es porque te estás haciendo mayor. Tus amigos actualmente están prácticamente casados."

"¿Estás queriendo decir que estoy vieja?"

"Por supuesto que no. Ahora mismo estás en la edad más hermosa."

Sonriendo, George puso su mano en el sen0 de Lisbeth.

"¿Lo hacemos de nuevo?"

Sin esperar la respuesta de Lisbeth, George intentó quitarle a ella el vestido que apenas se estaba poniendo. Sin embargo, Lisbeth detuvo la mano de George.

"No, tengo que salir."

"Si no es un compromiso urgente, sólo un poco, ¿Sí?"

"No. Ya es demasiado tarde."

Lisbeth sacudió la cabeza como si no pudiera entenderlo.

"¿Por qué estás tan impaciente? Si estuvimos juntos hace poco."

"Evidentemente, quiero que lo hagamos de nuevo."

George hizo un puchero con los labios.

"¿Es culpa mía? Todo es porque eres muy bonita."

"Tienes mucha labia."

Sonriendo, Lisbeth terminó de ponerse el vestido. George puso una expresión de tristeza en su rostro, suponiendo que realmente se iría. Preguntó, con una voz parecida a la de un niño lloroso.

"¿De verdad te vas a marchar?"

"Sí, tengo que irme."

Lisbeth, que hablaba con calma, le dio un último beso en los labios a George.

"Nos vemos en la noche, mi amor."

Tras despedirse brevemente, Lisbeth salió de la habitación de George. Luego bajó las escaleras como si no hubiera pasado nada, recordando la pregunta que George le había hecho.

¿Por qué odias tanto a tu padre?

"Por qué odio tanto a mi padre..."

Lisbeth, que murmuró para sí misma en un lugar donde no había nadie, estalló en risas de inmediato.

"No me agrada, independientemente de que no sea mi verdadero padre." 

***

Lisbeth llegó a la residencia del Marquesado Ezra, con un poco de retraso para la fiesta de té.

"Tiempo sin verte, Dama Ezra. Llego un poco tarde, así que me disculpo."

"No te preocupes. Bienvenida, Dama Norden. Gracias por venir."

Habían estado haciendo estas reuniones de fiesta de té durante algunos años. Por supuesto, todos los miembros de la fiesta de té se llevaban bien entre ellos. De lo contrario, no hubieran seguido organizando reuniones.

Continuaron su trivial conversación con la mesa llena de té y una variedad de dulces. Como en otras reuniones de la nobleza, el principal tema de interés eran los chismes concernientes a la alta sociedad. Innumerables rumores, infundados o fundamentados, salían de sus bocas. A diferencia de Rihanna, que no le gustaban estas conversaciones porque le parecían inútiles y sin sentido, Lisbeth las disfrutaba bastante.

"Por cierto, ¿Han escuchado ese rumor?"

Entonces, de repente, surgió un rumor muy interesante.

"Ese pervertido, ha aparecido de nuevo."

"¿Pervertido? ¿Quién es?"

"Cielos, ¿No te acuerdas? El loco que ha estado escribiendo cartas pervertidas durante cinco años."

"...Ahhh."

Sólo entonces Lisbeth se dio cuenta de quién estaba hablando. Desde hace 5 años, alguien había enviado cartas con contenido pervertido a damas solteras de forma anónima. Por supuesto, los plebeyos no harían algo tan arriesgado, así que había una gran probabilidad de que se tratara de un hombre noble.

Esa persona se hizo famosa por el contenido perverso de sus cartas. Aunque enviaba cartas con contenido obsceno, muchas veces también escribía cosas muy personales, que serían difíciles de saber a menos que se vigilara al destinatario de forma constante.

¿Hay algo más espeluznante que alguien anónimo te esté espiando? No había nada especialmente perjudicial en ello, aparte de lo desagradable que resultaba que enviara esas cartas. Y como llevaba cinco años haciéndolo, el remitente se había convertido en alguien famoso en la sociedad del Imperio Esteraz.

"¿Quién ha sido la destinataria esta vez?"

"La Dama Bergius. Ah, eso es lamentable."

"No había escuchado de ningún otro caso desde hace tiempo. Últimamente había estado tranquilo."

"Sí. Parece que está comenzando de nuevo. Es muy molesto."

"¿No es absurdo que aún no hayan podido identificar al culpable a estas alturas?"

"Pienso lo mismo, ¡Esa persona lleva cinco años haciendo esto, y nadie sabe quién es!"

"Supongo que el responsable es algún joven noble..."

"No lo sé. Quizá actualmente esté casado. El primer suceso fue hace cinco años."

"Sí. Ya debería haberse casado. ¿Con qué lamentable mujer se habrá casado?"

"Al menos no se casó con ninguna de nosotras, lo cual es una gran bendición."

Ante esas palabras, las Damas que habían estado conversando seriamente, estallaron en risas.

"Es cierto. Recibir cartas extrañas es mejor que casarse con un loco pervertido."

"De todos modos, tengan cuidado. No se asusten demasiado si reciben una."

Mientras Lisbeth hablaba, seguía pensando que nunca recibiría una carta. Ella pensaba que eso solo le podría suceder a otras personas.

Tal vez por esa razón, se sorprendió aún más del acontecimiento inesperado de esa noche.

jueves, 4 de febrero de 2021

febrero 04, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 17

Capítulo 17. Ira (17)


A la mañana siguiente, después de prepararse para dirigirse al trabajo como de costumbre, Rihanna bajó al primer piso.

Cuando llegó a la sala de estar, Rihanna vio a una persona no deseable desde su perspectiva.

"Lisbeth."

Al escuchar la voz de su hermana llamándola, Lisbeth se giró y miró fijamente a Rihanna. Un cabello voluminoso de color púrpura que le llegaba hasta la cintura. Unos ojos esmeraldas que brillan bajo la luz del sol. A simple vista, inocente y encantadora.

Desde cierta edad, Lisbeth siempre ha tenido esa atmósfera. Una atmósfera que podía atraer a la gente, sin importar el género. Sus ojos profundos, sus labios gruesos y las delicadas partes de su cuerpo, creaban esa impresión.

Rihanna miró a Lisbeth con la mirada perdida durante un momento, pero pronto se recompuso al escuchar su voz.

"¿Te pasa algo, hermana?"

"...¿Vas a algún lugar hoy?"

"Sí, asistiré a una fiesta de té."

Lisbeth asintió y añadió.

"En el Marquesado Ezra."

"Ya veo. ¿Cuándo regresarás?"

"Regresaré antes de que anochezca. ¿Vas a trabajar?"

"Sí."

Lisbeth, que se había acercado a Rihanna mientras hacía contacto visual con ella, dijo.

"Me gusta cómo trabajas. Estoy orgullosa de ti."

"...Gracias."

"Que tengas un buen día, hermana. Nos vemos en la noche."

"Está bien, Lisbeth. Que tengas un buen día también."

Finalmente las dos hermanas se despidieron, sonriendo. A simple vista, parecían hermanas muy compenetradas. Rihanna salió de la residencia como tenía previsto, sonriendo hasta el final. Sin embargo, después de subirse al carruaje, la sonrisa en su rostro desapareció por completo.

"......"

Y lo mismo hizo Lisbeth, cuando confirmó que Rihanna se había marchado.

'Hoy se fue a trabajar un poco tarde'.

Se había marchado un poco más tarde de lo habitual, Lisbeth no estaba contenta con eso. Inmediatamente, ella se dirigió hacia las escaleras. Entonces, ella pasó por el segundo piso, y llegó al tercero donde estaba George.

No tenía mucho tiempo de sobra si quería llegar a tiempo a la fiesta de té, pero Lisbeth se paró frente a la habitación donde estaba George, pensando que estaba bien llegar un poco tarde. Ella tocó la puerta con un ritmo familiar para los dos.

Toc Toc Toc, Toc Toc, Toc.

Rápidamente, tocó tres veces, luego dos veces, y al final una última vez. A los pocos segundos de haber tocado, la puerta se abrió abruptamente.

George recibió a Lisbeth con una sonrisa.

"¿Lisbeth?"

"George."

Lisbeth sonreía mientras abrazaba a George por la cintura, y luego lo besó como de costumbre. El beso, que al principio era suave, se volvió intenso y produjo sonidos pegajosos.

Después de un rato, George murmuró, con una expresión de que había olvidado algo.

"Todavía no, Rihanna..."

"Mi hermana se ha ido."

Entonces, Lisbeth dobló ligeramente su pierna y golpeó ligeramente la rodilla de George. Los dos desaparecieron en la habitación, cayendo como fichas de dominó.

Pronto la puerta se cerró con fuerza.
 
***
 
Lisbeth pensó que haría buena pareja con George.

"Dime cuál de las dos te gusta más. Y con quién te sientes mejor."

En los brazos de George, Lisbeth hacía ese tipo de preguntas ocasionalmente. Sinceramente, George no quería escuchar preguntas sobre su esposa durante su intimidad, pero respondió en voz baja para que Lisbeth no se molestara.

"Por supuesto que tú, Lisbeth."

Ningún hombre respondería de esa manera sobre su esposa, a menos que quisiera arruinar su relación.

Aunque se trataba de una respuesta lógica, Lisbeth abrazó con más fuerza a George y puso una expresión de satisfacción en su rostro como lo hacía siempre. Sólo por su satisfacción, George respondía obedientemente a esas incómodas preguntas.

"Seguro estarás muy ocupado desde hoy. Debes hacer el traspaso."

Dijo Lisbeth mientras se vestía. George respondió de forma suave.

"¿Ocupado? No tenía mucho trabajo antes."

"¿Puedes decírmelo tan descaradamente cuando trabajas en el hotel de mi padre?"

"De todos modos, no te agrada mucho tu padre."

"¿A mi? ¿Qué?"

"Oh, cielos. Sabes a lo que me refiero."

Dijo George, como si estuviera hablando de algo evidente. Lisbeth simplemente sonrió, fingiendo ignorancia sobre el tema. George, que la miraba fijamente, preguntó.

"Tengo curiosidad sobre algo. ¿Puedo hacerte una pregunta?"

"Dime."

"¿Por qué odias tanto a tu padre?"

"......"

sábado, 23 de enero de 2021

enero 23, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 16

Capítulo 16. Ira (16)


"¿Eh?"

"Parece que te hubiera obligado a felicitarme. ¿O es idea mía?"

"¿Qué pasa, George?"

En ese momento, en medio de la tensión, la voz de otra persona intervino.

"Creo que es porque mi hermana está desconcertada. Yo también me sorprendí mucho. Has dicho la noticia de forma muy repentina."

Fue Lisbeth. Rihanna miró a Lisbeth con un rostro inexpresivo. Lisbeth no tardó en girar la cabeza para establecer contra visual con Rihanna.

"¿Verdad, hermana?"

"...Sí."

Esto le pareció desagradable. En medio de una situación conflictiva con su esposo, la había defendido la mujer con la que su esposo cometía adulterio.

Sin embargo, no podía demostrar su disgusto.

"No hay manera de que no me alegre por esto. No me malinterpretes, George."

"¿Realmente estás feliz?"

"Por supuesto. Desde hace tiempo sueñas con convertirte en un burócrata."

"Sí, por eso acepté el puesto con gusto."

"¿Quién te lo ha propuesto?"

"Bueno, me lo ha propuesto el Duque McDonnell."

"Ya veo..."

El Duque McDonnell era un pariente lejano de George.

"...Bueno. Eres alguien competente."

Rihanna asintió con una sonrisa. Pero en su mente, pensaba diferente a la respuesta que había dicho en voz alta. Quizás...

"Sí. Finalmente han reconocido mis competencias y mi potencial."

Ella estaba concentrada en sus pensamientos, cuando escuchó la voz de George.

Rihanna dejó sus pensamientos a un lado y comenzó a hablar de otras cosas.

"¿Así que ahora no podrás trabajar en el hotel?"

"Sí, no puedo evitarlo. ¿Estás triste?"

"Un poco, pero no se puede hacer nada."

Dijo Rihanna con una sonrisa.

"Así que, está bien. Creo que te conviene más trabajar en asuntos estatales que trabajar en un hotel."

Ella lo había dicho con sinceridad. George no se involucraba mucho en el trabajo del hotel. Como un hombre que había crecido en una familia burocrática, repleta de arrogancia, se avergonzaba de trabajar en un hotel privado, y no en un Palacio. Por supuesto, tampoco tenía un rendimiento prometedor.

Rihanna estaba segura de que su padre no se podría triste al enterarse de la decisión de George de apartarse de la gestión del hotel.

"Creo que tienes razón."

Las palabras de Rihanna tenían una connotación distinta, pero George no se dio cuenta y simplemente sonrió. Rihanna preguntó con una sonrisa cínica.

"¿Cuándo será tu primer día de trabajo?"

"Dentro de dos semanas. Y habrá una fiesta la semana anterior antes de comenzar a trabajar."

"Eso será la próxima semana. ¿Te refieres a la fiesta para celebrar la inclusión de los nuevos burócratas?"

"Sí, finalmente podré estar presente en esa fiesta."

"¿Quieres que vaya contigo?"

"Por supuesto, ¿Con quién más iría a esa fiesta? Tú eres mi esposa."

Si ella hubiera escuchado esto hace dos días, se habría alegrado mucho, pero por desgracia, ahora le parecía como, 'no tengo más remedio que ir contigo porque sigues siendo mi esposa'. Todavía con una voz emocionada, George añadió.

 "Por cierto, terminaré el traspaso antes, así que no tienes que preocuparte."

"No estoy preocupada."

De todos modos, no tenía mucho trabajo relevante a su cargo.

"Al principio esto me sorprendió un poco, pero me alegro de que hayas hecho realidad tu sueño."

"Sí. ¡Felicidades, George!"

Lisbeth añadió emocionada.

"¿No deberíamos beber un poco de alcohol para celebrar este día?"

"¿Eso crees? Rihanna, ¿Tienes vino del que ha regalado mi suegro la última vez?"

"...Ah, sí."

"Bien, dile que lo traiga. Debemos beber alcohol en un día como hoy."

"Está bien."

Aunque reacia, Rihanna le habló a la señora Venigans.

"Trae el vino que mi padre dio la última vez."

"Sí, Dama."

Pronto, la señora Venigans trajo el mejor vino que el Conde Norden había regalado. Rihanna miró sin entusiasmo el vino tinto que se servía en su copa y luego la levantó. A su lado, George propuso un brindis con voz emocionada.

"Ahora, ¿Brindamos para que tenga una vida burocrática estable y segura?"

"Bien. Brindemos por la salud y la felicidad de los tres en el futuro."

"...Salud."

Rihanna sonrió ligeramente y chocó las copas con los dos. Aunque había ocurrido algo inesperado, no estaba mal. Más bien, le parecía mejor. Cuanto más alto se encuentre alguien, más dura será la caída.

lunes, 18 de enero de 2021

enero 18, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 15

Capítulo 15. Ira (15)


"Creo que ha estado saliendo con alguien últimamente."

"¿Saliendo con alguien? ¿Un hombre?"

"Sí. Parecía una relación seria."

Rihanna siguió hablando con cautela.

"Pero le da vergüenza presentarlo."

"Está siendo cuidadosa debido a su ruptura amorosa de hace cuatro años."

"Pero no puede postergar su matrimonio para siempre."

"Sí. Ya tiene 23 años."

El Conde Norden añadió con un asentimiento.

"No puede vivir en la Mansión Royde para siempre."

"Sí. Entonces... también estás de acuerdo con la idea de que Lisbeth se case, ¿No?"

"He estado pensando en ello durante cuatro años. Pero como considero que a ella no le gusta ese tema, preferí permanecer en silencio."

"Pensé que tenías una opinión diferente, por esa razón te lo pregunté, papá."

"¿Cómo podría? Está en sus últimos años de edad conveniente para contraer matrimonio."

El Conde Norden le habló a Rihanna suavemente.

"Deberías tratar de persuadir a Lisbeth. Ella te escuchará más a ti."

"......"

"¿No debería casarse antes de que me muera?"

"Papá, ni siquiera tienes cincuenta años."

"Nunca se sabe. De todos modos, soy un hombre codicioso, quiero conocer a mis nietos lo antes posible."

"...Lo siento."

"No te disculpes. Todavía hay tiempo. No lo dije para hacerte sentir mal."

Rápidamente, el Conde Norden cambió ligeramente de tema.

"De todos modos, primero debes conocer a ese hombre y luego informarme al respecto. No sabemos si es un buen tipo."

"Sí, padre."

"Que tengas un buen día."

Después de terminar la conversación, Rihanna salió de la oficina del Conde Norden.

Ahora que había confirmado los deseos de su padre, sólo tenía que poner su plan en marcha.

Sin embargo, esa noche ocurrió una situación inesperada.
 
***
 
Rihanna trabajó como siempre hasta tarde y luego regresó a casa a tiempo para la cena.

En la familia Royde, existía la costumbre de reunirse para cenar.

"¿Fuiste al hotel hoy?"

Lisbeth comenzó la conversación.

"Debes estar cansada, no debiste trabajar hoy."

"No estoy tan cansada."

Rihanna miró a George y le dijo.

"No fuiste a trabajar hoy."

"Tenía un compromiso hoy."

"¿Compromiso? ¿Con quién?"

"......"

George se quedó en silencio por un momento, y luego dijo.

"Tengo algo que confesar."

Al escuchar esas palabras, el corazón de Rihanna comenzó a latir rápido.

'¿Confesar?'

¿Se dio cuenta de que había descubierto la relación entre los dos? ¿Estaba tratando de hacer el primer movimiento? Todo tipo de pensamientos circulaban en la cabeza de Rihanna.

Rihanna le preguntó a George con una mirada nerviosa.

"¿Una confesión?"

"Sí."

"¿Qué...?"

"En realidad."

George habló seriamente.

"Esta vez, me convertí en un oficial designado."

Cuando escuchó esas palabras, Rihanna pudo relajarse. No había escuchado la confesión que esperaba.

'...Me siento aliviada'.

Definitivamente se sintió aliviada.

Cuando ella escuchó que tenía algo que confesar, se preocupó, '¿Qué pasaría si este hombre confesara gentilmente todo el engaño?' Si eso sucediera, sería difícil que pudiera ejecutar la venganza que había planeado.

'...No, es imposible que lo diga'.

Cualquiera sabría las grandes repercusiones que se producirían al revelar ese hecho, a menos que fuera un tonto.

"¿No me vas a felicitar?"

"¿Cómo puedes decir que es un compromiso, que significa eso?"

"Tengo que trabajar en el Ministerio de Finanzas."

"¿Hiciste el examen burocrático? No me dijiste nada."

Hace cuatro meses, se hicieron los exámenes burocráticos regulares. No hace mucho se anunciaron los resultados, pero Rihanna sabía que el nombre de su esposo no estaba incluido entre los participantes. Cuando ladeó la cabeza confundida, George habló.

"Oh, no hice el examen. Fue como un reclutamiento especial."

"¿Alguien puede convertirse en burócrata sin hacer el examen?"

"Sí. Aunque no lo sepas, es posible."

Pero Rihanna seguía confundida. Y George, que observaba atentamente la expresión de Rihanna, habló.

"Entonces, ¿No me vas a felicitar?"

"¿Eh?"

"Te estoy preguntando si no me vas a felicitar."

Preguntó con una expresión amarga en su cara.

"¿Supongo que no estás muy feliz de que trabaje en el Ministerio de Finanzas?"

"...No. De ninguna manera."

Rihanna lo felicitó rápidamente.

"Me alegro, George. Eso es genial."

"¿Esa es la cara de alguien que está feliz?"

domingo, 17 de enero de 2021

enero 17, 2021

Los Tres Están Viviendo Una Vida De Casados - Capítulo 14

Capítulo 14. Ira (14)


La Familia Norden, tenía un hotel funcionando en la capital del Imperio Esteraz desde la época de su bisabuelo.

Se llamaba Hotel Norden, y sería heredado por Rihanna cuando su padre, el actual propietario, muriera. Por supuesto, en primer lugar esto se debía a que Rihanna era su hija primogénita, pero también a que desde el principio no confiaba en que Lisbeth pudiera gestionar el hotel. Así que internamente se consideró a Rihanna como la sucesora desde el principio y ella trabajaba en la gestión de primera línea.

"Hemos llegado, Dama."

Al bajar del carruaje, Rihanna vio el enorme exterior del Hotel Norden. El negocio hotelero de los Norden, que había comenzado a pequeña escala durante la época de su bisabuelo, se había convertido en completamente próspero en la generación del padre de Rihanna. Incluso se hablaba de abrir una sucursal. Aunque todavía sólo se trataba de un proyecto, Rihanna realmente quería abrir una sucursal mientras su padre estaba vivo.

"Condesa, ha venido hoy."

Al entrar en el hotel, un empleado que vio a Rihanna la saludó rápidamente.

"Ayer celebraron su fiesta de aniversario de bodas, así que pensé que no vendrías hoy..."

"Tengo que trabajar. ¿Está mi padre?"

"Sí."

Rihanna se dirigió inmediatamente a la oficina del Conde Norden, tocó la puerta y dijo.

"Soy yo, padre."

"Oh, Rihanna. Puedes pasar."

Tan pronto como obtuvo el permiso, Rihanna entró. Al pasar, vio a su padre sentado en su escritorio. El Conde Norden, que aún no pasaba los cincuenta años de edad, tenía el mismo cabello púrpura y ojos verdes que Lisbeth. Tan pronto como Rihanna vio a su padre, se acordó de Lisbeth.

'Mi padre se sorprendería mucho si supiera todo'

Rihanna amaba mucho a su padre. Un sentimiento más intenso que el resentimiento que sentía por Lisbeth.

Rihanna saludó al Conde Norden, creyendo que había tomado la decisión correcta.

"Llegaste temprano, padre."

"Tú también."

El Conde Norden sonrió mientras miraba fijamente a su hija.

"¿Hiciste la fiesta de aniversario de boda ayer?"

"Sí."

Rihanna asintió y añadió.

"No asististe papá."

"Creo que no podría hacer mucho en una fiesta de casados. ¿La pasaste bien ayer?"

"Sí, bueno..."

Fue el peor aniversario de boda y jamás lo olvidaré, papá.

Rihanna no podía decir la verdad, así que cambió de opinión.

"Han pasado cuatro años desde que me casé."

"Me alegra saber que ustedes dos tienen una buena relación."

"Pero padre, tengo una pregunta."

"¿Qué?"

"¿Te acuerdas cuando te dije por primera vez que me casaría con él? No te gustó al principio."

Aunque no se opuso, el Conde Norden no parecía muy contento con el matrimonio de Rihanna y George. Por supuesto, nunca se lo demostró a George y a la Familia Royde. Pero Rihanna, su hija, lo sabía.

"¿Por qué?"

"¿Por qué sacas a relucir algo del pasado?"

"Sólo me dio curiosidad."

Rihanna sonrió superficialmente y suplicó.

"Eso es pasado, así que por favor, dímelo."

"Bueno, no había un gran motivo. Sólo que..."

El Conde Norden estuvo muy pensativo por un momento, pero luego abrió la boca.

"Cuando se iban a casar, estuve preocupado por su estatus futuro en el gobierno."

El Conde Royde, padre de George y suegro de Rihanna, fue un burócrata. El abuelo de George también fue un burócrata, y su bisabuelo fue un burócrata. Por supuesto, su tatarabuelo también fue un burócrata.

De generación en generación, los Royde produjeron burócratas y George estaba destinado a convertirse en burócrata desde su nacimiento. Pero sus sueños se frustraron, porque falló en cada ocasión que intentó el examen burocrático.

"Pero ahora que lo pienso, me preocupé de forma innecesaria."

Finalmente, George terminó participando en la gestión del Hotel Norden conjuntamente con Rihanna. El bondadoso suegro intentaba fortalecer el orgullo de su yerno. Desafortunadamente, George no tuvo la capacidad de corresponder adecuadamente a la consideración de su suegro.

'...No estoy segura'.

Rihanna puso una expresión amarga brevemente.

'Creo que tenías razón'.

Después de todo, el mal presentimiento del Conde Norden hacia George, se materializó de una manera diferente.

Sin poder decir la verdad, Rihanna se mantuvo en silencio.

"¿Por qué has venido a trabajar hoy? Debes estar cansada."

"Tengo que trabajar. ¿De qué sirve descansar?"

"¿Por casualidad peleaste con tu esposo?"

"...No, en absoluto."

"Si han peleado, deben resolverlo pronto. Eso es lo que deben hacer las parejas casadas."

"...No hemos peleado."

Rihanna se estremeció en su interior al escuchar sus palabras, pero mantuvo su tono de voz.

"Sólo salí porque quería trabajar."

"Ya veo. ¿Qué te trae por aquí? ¿Tienes algo que decirme?"

"......"

"¿O sólo viniste a saludar?"

"Tengo algo que decirte."

"¿Qué me quieres decir? ¿Está relacionado con el trabajo?"

"No."

Rihanna abrió la boca de nuevo después de un breve silencio.

"Es algo sobre Lisbeth."

"Oh, ¿Cómo está Lisbeth?"

"Ella está bien."

"Lisbeth también debería casarse."

"De todos modos, tengo algo que decirte al respecto."

"¿Qué?"

"Lisbeth..."

Rihanna tragó saliva y luego dijo.