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jueves, 11 de mayo de 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 110

Capítulo 110. Jack (1)

Reconfortada por el consuelo de Annette, quien tenía bastante experiencia en ello, Celestine pronto pudo calmarse. Incluso su expresión parecía más renovada que antes, como si derramar algunas lágrimas hubiera sido de ayuda. Celestine abrió la boca.

"He actuado de forma desagradable. Lo siento."

"Está bien, no fue nada."

Celestine frunció el ceño levemente tras otro ataque al corazón al escuchar las amables palabras de Annette. Celestine habló esforzándose en mantener la cara de poker.

"Siendo sincera, me encantaría convertirme en la Princesa Heredera. Por el bien de mi familia que sigue en declive, también para que mis padres estén felices. Quizás para la familia Baviera no es tan sorprendente, pero en nuestra posición actual es un milagro."

Annette asintió comprendiendo la posición de Celestine. De hecho, también para la familia Bavaria la posición de Princesa Heredera era bastante atractiva. Probablemente por eso su padre la había educado de forma tan estricta desde una edad temprana. Celestine, que recibió la mirada comprensiva de Annette, se mordió el labio inferior.

"Pero no de esta manera. Puede parecer una tontería, pero quiero decidir mi futuro. No creo que ni siquiera la persona más poderosa tenga el derecho de manejar mi vida a su antojo como si fuera una marioneta. ¡Y mucho menos hundir a alguien para beneficiar a otra persona! ¡¡Odio eso!!"

Celestine levantó la barbilla después de hablar. Fue una declaración tan acertada, que sintió pena por haber sospechado que ella estaba detrás del secuestro. Annette, que estaba impresionada en su interior, asintió ligeramente en señal de acuerdo.

"Estás en lo cierto. No mereces ser una marioneta. Eres más que eso."

"¡Hmph! Mejor no hablemos de cosas vergonzosas. De todos modos, te he invitado hoy para hablar de otra cosa. Y... hay algo que quiero mostrarte."

¿Hay algo que quiere mostrarme? Annette miró con curiosidad el rostro serio de Celestine. Había otra razón por la que Celestine había hecho salir a Annette en secreto hoy. Por supuesto, tenía que evitar los ojos de su familia, pero había algo más.

Celestine empujó la alfombra con el pie. La mitad del suelo bajo la alfombra quedó al descubierto. Se reveló la puerta secreta de una escalera que bajaba al sótano.

"Sígueme. Cuidado al caminar."

Entonces Celestine bajó las escaleras. Annette, que se quedó atrás, parpadeó mientras miraba la puerta. No sabía qué había ahí abajo, pero tenía el presentimiento de que tendría que verlo. Annette, que apretó su mano enguantada, caminó lentamente.

Cuando bajó la oscura escalera, se encontró una puerta bastante gruesa. Era una puerta que solía construirse para insonorizar. Estas puertas se podían encontrar en familias nobles con una historia bastante larga. Celestine empujó la puerta con una expresión rígida. Entonces vio a un hombre atado adentro. La sorprendida Annette entrecerró los ojos mientras examinaba la cara del hombre.

¿Ivan...? No. Entonces, ¿Quién es?

Al principio, pensó que se trataba de su cochero Ivan, responsable del secuestro. Su identidad real era Ben March, el tío paterno de Raphael.

Annette se arrodilló para examinar al hombre atado con una cuerda. Pero no importa cuántas veces lo mirara, seguía pareciéndole desconocido. Celestine despertó al hombre con una patada. Fue sorprendentemente feroz.

"¡Argh!"

El hombre que había sido pateado en la zona del hombro, se despertó con un gritó. Sus ojos sobresaltados escudriñaron su entorno. Parecía asustado como si ellas fueran las brujas hermanas de los cuentos populares. Celestine, que se cruzó de brazos, miró al hombre con arrogancia.

"Pareces cómodo. Has dormido bastante."

"No. Dama, por favor, ayúdeme."

El hombre inclinó la cabeza con un rostro retorcido. Estuvo a punto de caer al suelo, pero afortunadamente pudo evitarlo porque tenía los brazos atados a la espalda. Celestine, que tenía un rostro inexpresivo como si no hubiera estado llorando hace un momento, le indicó al hombre con inclinando la cabeza hacia arriba.

"Preséntate ante la invitada."

El hombre miró a Annette sin saber qué estaba pasando. Su rostro reflejaba su confusión. Annette también lo estaba. No entendía porque Celestine le presentaba a este hombre desconocido. El hombre, que había puesto los ojos en blanco, abrió la boca torpemente ante la insistencia tácita de Celestine.

"Me... llamo Jack. Fui un crupier que trabajaba en el Casino Lucky de la calle Vassetti 77."

"¿Eres un crupier de casino?"