Capítulo 40. La Tercera Torre Mágica (2)
Nik, uno de los recepcionistas de la tercera Torre Mágica, estaba de pie frente al mostrador con una expresión nerviosa.
Siendo incapaz de contener su ansiedad, comenzó a mover sus pies y a toser sin razón alguna.
No podía evitar el estar nervioso, debido a que un grupo de visitantes vendrían a la torre hoy.
¡Del Gran Bosque Reynols!
Visitantes que venia desde la tierra de los elfos. Aquellos que venían del Gran Bosque eran, por supuesto, elfos.
Y se sabia que los elfos oscuros eran la minoría en la población.
Hace mucho tiempo, los elfos y el imperio Kastkau firmaron un acuerdo de no agresión entre ambas partes, el cual luego se convirtió en una alianza.
Por supuesto, había personas que criticaban esta alianza. Después de todo, no era fácil derrumbar por completo el muro racial.
Sin embargo, estos prejuicios y estereotipos comenzaron a desvanecerse con el tiempo.
Al menos, los humanos que vivían en el imperio ya no consideraban a los elfos como extraños y hostiles. Sin embargo, todavía existían un sentimiento de admiración.
Sus largas vidas, sus increíbles capacidades físicas, su belleza deslumbrante y su talento natural con los espíritus sobrepasaban con creces a los humanos.
Y además de eso, los elfos habían comenzado a interesarse en la magia humana. Esa era la razón por la cual, de vez en cuando, enviaban a su gente a países humanos como este.
El grupo de elfos se quedaría en la tercera Torre Mágica.
Por orden de la familia imperial, tenían que asegurarse que no le faltara nada a los elfos durante su estadía aprendiendo magia.
“¡Ah!”
En ese momento, Nik vio a un grupo de personas vestidas con túnicas marrones a lo lejos.
Pudo darse cuenta al instante que eran elfos.
Primero, porque su altura promedio era mucho más alta que la de los humanos.
Los hombres sobrepasaban con facilidad los 2 metros y las mujeres eran solo una cabeza más pequeñas.
“¿Ustedes son el grupo del Gran Bosque Reynols?”
“…”
El elfo oscuro que estaba al frente miró a Nik con ojos fríos haciendo que este comenzara a sudar un poco.
Sus ojos eran feroces. Debajo de sus túnicas había músculos firmes y flexibles.
No lucía para nada como un hombre proveniente de una raza de gente gentil que adoraban las flores, en su lugar parecía un guerrero que había pasado por incontables campos de batalla.
‘¿E-es verdad que los elfos oscuros son arrogantes y agresivos?’
Esa mirada le hacía tener la misma reacción de huida como si se estuviera enfrentando a un monstruo.
Después de un tiempo, el hombre elfo, quien parecía ser más bajo de estatura que los otros, dio un paso al frente.
“Eso es correcto”.
Su tono era un poco extraño y áspero, lo cual hacía ver que no usaba mucho el idioma humano.
“B-bienvenidos a la tercera Torré Mágica. ¿Puedo ver sus identificaciones?”
El hombre saco un rubí del bolsillo en su pecho. Después de recibir el rubí, Nik también sacó uno igual.
Ambos eran casi idénticos.
Cuando las dos gemas se encontraron cara a cara, ocurrió una pequeña resonancia.
Nik observó las luces que salían de las gemas por un momento antes de regresarle la suya al elfo.
“Ha sido confirmado. ¿Cuántas personas hay en su grupo?”
“11 personas”.
Nik contó a los elfos uno a uno antes de asentir.
“Ha sido confirmado. Ahora les enseñaré las habitaciones de la torre que estarán usando”.
Entonces, el pequeño elfo al frente habló una vez más.
“Escuché que se tenían que superar unas pruebas antes de entrar a la Torre Mágica”.
No sabía de dónde lo había escuchado, pero Nik asintió de todas formas, porque era cierto.
“En general sí, pero los elfos oscuros visitantes no necesitan hacerlo”.
“Me gustaría tomar la prueba”.
“¿Cómo?”
“Dije que me gustaría tomar la prueba. ¿Puedo hacerlo?”
“Uh…”
Nik se quedó callado, ya que no sabía que debería hacer en una situación como esta.
Al mismo tiempo, sintió rencor por el elfo.
¿Por qué no podía solo quedarse y ya?
Por supuesto, los ojos feroces y el aura de los elfos oscuros hicieron imposible el que dijera estas palabras en voz alta.
“De acuerdo. Entonces, les haré una corta y concisa prueba”.
“Liamson, ¿por qué estás haciendo todo más problemático?”
Una elfa de expresión fría miró a Liamson mientras le preguntaba.
El elfo más bajo, Liamson, solo respondió con una sonrisa.
“¿No sientes curiosidad? Sobre qué tan precisas son las pruebas humanas y sobre cuáles son nuestros niveles actuales”.
“Nuestro nivel es de alrededor de las 5 estrellas. Eso es lo que el mago del imperio nos dijo la última vez”.
“¡…!”
Nik fue sorprendido por la conversación que estaban teniendo los elfos.
¿Todos estos elfos eran 5 estrellas?
Incluso en la torre no había muchos magos de 5 estrellas.
‘Entonces, solo hay una prueba’.
Nik pensó que solo haría una prueba simple, porque ellos querían, pero ahora se dio cuenta de que no había mucho en lo que podía ponerlos a prueba.
Ocultando todos sus pensamientos en su cabeza, Nik guio a los elfos a los terrenos de entrenamientos del primer piso.
Era la más fuerte y espaciosa habitación en la torre.
“La prueba es simple. Haga una bola de energía”.
“¿Una hechizo de 1 estrella…? ¿Esa es la prueba? Es muy patética”.
Liamson lucía decepcionado, pero Nik sacudió su cabeza lentamente.
“Si solo estuviera haciendo bolas de energía sí, pero esta prueba no es solo acerca del hechizo… Les mostraré un ejemplo”.
“Bola de Energía”.
Una bola de energía apareció en la mano derecha de Nik. Era aproximadamente del tamaño de una cabeza humana.
Nik entrecerró los ojos.
La bola de energía comenzó a hacerse cada vez más pequeña.
Una gota de sudor bajó por la frente de Nik.
Para ese entonces, la bola de energía se había comprimido hasta el tamaño de la mano cerrada de un hombre adulto.
“¡Joo! Se tiene que comprimir la bola de energía hasta, al menos, este tamaño antes de ser aceptado dentro de la torre”.
Nik levantó su barbilla con orgullo, pero Liamson dejó salir una carcajada.
“Entonces, tenemos que comprimir la Bola de Energía. El tamaño se reduce, pero el poder incrementa. No es tan difícil”.
“E-esta es una prueba histórica de la Torre Mágica, no solo pone a prueba el entendimiento del maná, sino que también pone a prueba el sentido de la distribución y la habilidad para hacer arreglos”.
Liamson ignoró las palabras de Nik y en su lugar hizo una bola de energía.
Su boca ni siquiera se movió, lo cual sorprendió a Nik, debido a la facilidad con la que había hecho un encantamiento mental.
Y se sorprendió incluso más cuando vio lo que le pasó a la bola de energía.
“¡Huk…!”
¡La bola de energía que Liamson había hecho se había comprimido hasta el tamaño de un ojo humano!
Nik solo conocía a probablemente 10 personas en este piso que podrían comprimir tanto una bola de energía.
‘H-había rumores acerca de que los elfos tenían un aterrador entendimiento del maná. Parece que es cierto…’
Los elfos restantes también intentaron la prueba.
Una sensación de vacío llenó a Nik cuando presenció la escena.
No solo había sido Liamson, sino que todos los elfos fueron capaces de pasar perfectamente la prueba, la cual él consideraba desafiante.
“La prueba humana para los magos no parece ser la gran cosa”.
El elfo alto habló con indiferencia. No había ni pizca de asombro o burla en su voz.
Su voz era calmada como si solo estuviera expresando una simple verdad.
De todas formas, su mirada estaba fijada en Nik.
Nik mordió su labio inferior, pero no pudo decir nada.
‘No puedo creer que ellos hayan venido el día que me tocaba trabajar’.
Podía saberlo solo mirando esos ojos. Los elfos estaban mirándolo hacia abajo ahora.
No. Estaban mirando hacia abajo a todos los humanos.
Nik quería decirles que no todos los humanos eran inferiores, que solo era él y que no deberían menospreciar a los humanos.
Sin embargo, no pudo abrir la boca.
Nik nunca había estado tan enojado e indefenso debido a su timidez.
Fue en ese momento.
“¿Es esa la prueba?”
Su pronunciación era fluida, así que no era un elfo.
Nik levantó la cabeza al mismo tiempo que los elfos se voltearon a ver quién había hablado.
Ahí de pie se encontraba un hombre con el pelo blanco.
“¿Tú eres?”
Frey habló con calma.
“Me gustaría unirme a la torre”.
***
“E-espere un momento, por favor. Hasta que termine de guiarlos a ellos…”
“Estamos bien. Esperaremos”.
“¿Cómo?”
“¿No entendiste? Esperaremos aquí hasta que ese hombre se puesto a prueba”.
Liamson lo dijo una vez más lenta y cuidadosamente, ya que pensaba que sus palabras no eran los suficientemente claras.
Por supuesto, no era que Nik no pudiera entender lo que estaba diciendo. Era que lo que había dicho fue tan inesperado que no pudo evitar preguntar.
“E-está bien”.
Ellos habían dicho que esperarían, así que no había nada más que podía decir.
Nik se volteó para ver al hombre con cabello blanco más detenidamente.
‘Es joven’.
Debería de tener máximo 20 años.
Su aparecía era algo extraña para alguien de su edad, pero, por algún razón, le quedaba bien.
“Si reduce el tamaño de la bola de energía al tamaño de mi puño, pasará la prueba”.
Frey sabía de que iba la prueba, ya que había estado siguiendo a los elfos desde el principio.
‘Es una prueba simple y eficiente’.
Si una persona con un buen ojo hiciera la prueba, entonces podría ser capaz de tener una pequeña idea de las capacidades del examinado.
Frey miró a los elfos con interés en sus ojos.
Era bastante inusual que los elfos estuvieran aprendiendo magia.
Al menos hace 4000 años eso no era algo que él pudiera haber sido capaz de imaginar siquiera.
La magia era exclusiva de los humanos y los antiguos, orgullosos y nobles elfos tenían intenciones de aprender habilidades humanas.
Y ahora incluso los elfos oscuros, quienes preferían pelear con sus cuerpos, habían decidido aprender magia.
Frey sacudió ligeramente su cabeza y entonces murmuró.
“Bola de Energía”.
Una bola de energía apareció frente a él.
Frey la comprimió inmediatamente al tamaño de un puño.
“Es estable. Pasas la prueba”.
La bola de energía desapareció más rápido de lo que apareció.
Nik estaba decepcionado.
Esto era porque esperaba que Frey fuera un excelente mago.
‘Para que pudiera aplastar el ego de esos elfos’.
Era solo una falsa ilusión.
En su anterior conversación los elfos habían dicho que estaba alrededor de las 5 estrellas.
Este joven hombre frente a él no era rival para ellos.
Si realmente fuera un verdadero talento, entonces hubiera ido a la primera o a la segunda Torre en lugar de venir aquí.
“Tendrá que completar el papeleo. Espere en el mostrador, por favor. Tengo que guiar a estas-“
“Oye”.
Era la voz de Liamson.
Nik tembló inconscientemente debido a que su voz era muy áspera.
“¿S-sí?”
“No a ti”.
Él estaba apuntando a Frey.
Solo entonces Frey se volteó a ver a Liamson.
“¿No tienes la habilidad para comprimirla más que eso?”
Frey levantó una ceja.
“¿Por qué piensas eso?”
“Es solo un presentimiento”.
La respuesta tan tonta hizo sonreír a Frey. En realidad era la primera vez que se encontraba con un elfo oscuro.
Hace 4000 años, con los que trataba eran normalmente Altos Elfos. Estos chicos eran más guerreros que esas personas del bosque.
“La condición para pasar la prueba es comprimir una bola de energía al tamaño de un puño”.
“Muéstrame más. Quiero ver que tanto puede comprimirla”.
“No me molestes. Tengo que ir a hacer el papeleo, así que sal de mi camino”.
Frey frunció el ceño mientras miraba a Liamson.
Liamson lo observó por un momento antes de hacerse a un lado.
Nik solo pudo ver su conversación sin ser capaz de hacer nada al respecto.
Las palabras de Frey habían despertado todas las alertas en el cuerpo de Nik, pero parecía que el mismo no se había dado cuenta que todos los pelos en su cabello estaban de punta.
“Y-yo los guiaré hasta sus habitaciones antes de volver. Espere en el mostrador, por favor”.
Frey asintió y Nik comenzó a liderar a los elfos oscuros hacía las escaleras.
“Oye, humano”.
Liamson llamó a Frey una vez más.
Frey respondió sin siquiera voltear la cabeza.
“Es Frey”.
“Frey, ¿vas a quedarte en esta torre también?”
“Sí”.
“…”
Liamson lanzó otra extraña mirada a Frey antes de dirigirse a las escaleras, dejando a Frey solo en la habitación.
Frey hizo otra bola de energía.
“Más pequeña…”
El tamaño de la bola de energía se redujo gradualmente hasta el tamaño de una cabeza, luego de un puño, después hasta el tamaño de un ojo.
La bola de energía siguió encogiéndose hasta que se volvió casi invisible al ojo humano.
“Es bastante eficiente”.
La voz de Frey hizo eco en el silencioso pasillo.