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miércoles, 22 de julio de 2020

I Raised A Black Dragon - Capítulo 70

Capítulo 70. La Locura De Un Bastardo


Muell creía que los humanos eran inherentemente débiles y frágiles. Sin embargo, Park Noah estaba excluida de la premisa. Era Park Noah, después de todo.

"Noah me dijo que no me descubrieran... pero ya he sido atrapado por dos personas." El niño murmuró para sí mismo, la preocupación expresada en su cara. 'Eres el favorito de Noah, así que, ¿cómo lidias con ese acosador?'

Mientras tanto, Adrian sentía una inusual amenaza a su vida. Los hilos negros de maná, envueltos alrededor de sus tobillos, comenzaron gradualmente a ascender hasta sus piernas. Miró a la cama y encontró a Park Noah todavía dormida. Ella nunca soñaría que su mascota planeaba matar a un hombre sin siquiera darse cuenta, pensó.

"Bueno, ya sabes."

Afortunadamente para el hombre rubio, el joven dragón curioso decidió abordar los misterios persistentes en su mente antes de contemplar las medidas necesarias para enfrentarlo.

"¿Puedo preguntarte qué estabas haciendo ahora?" Preguntó Muell, inclinando la cabeza.

"Lo has visto todo, pero finges que no lo sabes."

"Sí, estoy preguntando porque he visto todo, pero no sé lo que estabas haciendo." El chico se burló débilmente, cruzando los brazos.

Adrian se dio cuenta entonces de que el niño no tenía ni idea. Huh. Todavía no sabes lo que significa el contacto sexual entre una mujer y un hombre.

"Es una forma de expresar la intimidad entre los humanos. Besar, abrazar."

"¿Besar? ¿Por qué?"

"Porque me gusta. Es una de las formas de amar al sexo opuesto."

"¿Y si a la otra persona no le gusta?"

"Entonces, una bofetada en la mejilla."

El inocente Muell, por supuesto, no entendió las palabras. "Vas a ser golpeado de todos modos. ¿Por qué la besarías?"

"Quiero decir..."

Fue una voz diferente la que respondió a la pregunta del niño. Adrian miró atrás sorprendido y vio a Park Noah despierta, mirándolo fijamente. Ella se humedeció los labios agrietados y respondió: "Quiero decir, eso es... Bastardo. Le enseñaste al niño algo realmente bueno."

"...¿Cómo te sientes?"

"Creo que lo has empeorado. Estaba en medio de un sueño feliz..."

La cara de Adrian se arrugó de disgusto. '¿Llamas a Kyle Leonard un sueño feliz?', pensó amargamente. Pero por supuesto, Adrian no sabía que había soñado con la fantasía de que Kyle Leonard era un mayordomo dedicado que se encargaría de todo.

Park Noah luchó por levantar su cuerpo y preguntó con fuerza: "¿Desde cuándo lo sabes? Que Mu es un dragón."

"Pensé que estabas durmiendo, pero debes haber estado escuchando."

"¿Cómo podría, eh, no? ¡Mi corazón está ahora a punto de explotar por tu culpa!" Fue una exageración, pero ella estaba sudando mucho. Muell saltó del asiento y corrió a la cama. Tomó una píldora, una poción y un vaso de agua de una pequeña mesa que estaba al lado de la cama y se los dio.

Park Noah se las arregló para tragar la medicina. A simple vista, Adrian percibió que la píldora era para los resfriados y la poción era un sedante.

Adrián frunció el ceño y murmuró, "...Tranquilizante de maná."

"Responde. ¿Desde cuándo lo sabes?"

"¿Por qué deberías tomar un sedante? Si te has marcado con un dragón, deberías ser capaz de llenar tu cuerpo de maná y mejorar tu condición hasta la cúspide."

"......"

Park Noah se limitó a mirarlo y dejó de hacer preguntas. Después de unos segundos de evaluación, Adrian llegó a una conclusión. "El marcado no está completo, ¿Verdad?"

Tan pronto como las palabras salieron de su boca, Park Noah suspiró profundamente y murmuró vagamente. Para Adrian, sonó como: 'Dios, ¿Por qué todos los humanos aquí parecen fantasmas?'

Él sonrió y se sentó en el borde de la cama. "Así que, ni siquiera puedes usar la magia correctamente. No puedes manejar el maná y estás empapada de sudor."

La mujer respiró profundamente y dijo: "¿Qué vas a hacer conmigo?"

"¿Qué, qué?"

"Me has estado siguiendo todo el tiempo. Si realmente perdí mi memoria o si Mu es realmente un dragón, debes querer algo."

"¿Me escucharás si te lo digo?"

"¿Estás loco?" Ella dijo, mirándolo fijamente con total incredulidad. Luego, le dio un codazo a Muell en los hombros y le ordenó.

"Mu, sácalo de aquí. ¡Y mantenlo fuera de esta habitación otra vez!"