"Si quieres que te lleven a las fuerzas de seguridad por abuso sexual, hazlo, pero creo que vas a recibir un golpe antes de eso."
Park Noah afirmó y sin vacilar golpeó su rodilla en el estómago del hombre. Puck. Ella sonrió en su interior, satisfecha con el sonido. Por otro lado, la cara del hombre se retorció de dolor.
"Ugh, ¿Qué estás haciendo?"
El agarre de su cintura se aflojó y Park Noah inmediatamente apartó sus brazos de ella, alejándose unos pasos de él. Cuando ella le hizo señas a Muell que estaba detrás, las negras llamas que estaban a punto de invadir el lugar se disiparon instantáneamente.
"Duele". El hombre murmuró con el ceño fruncido.
"Te golpeé porque estás enfermo, estúpido."
"¿Qué diablos pasó en los últimos dos años que tu cerebro olvidó todo y tu boca se puso áspera?"
Fue el mismo desconcierto que Kyle Leonard experimentó. Sin embargo, Park Noah estaba demasiado agotada para dar una explicación. Abrazó a Muell y se sentó en el asiento al otro lado del hombre.
Park Noah observó su entorno. Estaban confinados en una pequeña cabina junto a un mago lo suficientemente fuerte como para intimidar a Muell. Sin embargo, Park Noah se consoló con el hecho de que el hombre era alguien cercano a Eleonora Asil. Tal vez no era demasiado malvado.
Ella miró por la ventana y sólo vio sombras de árboles altos debido a que era de medianoche.
Pensó en escapar de la habitación, pero la magia del hombre ya se había apoderado de la puerta. Ella suspiró. Se dio cuenta de que sería mejor permanecer sentada y descansar después del cansancio de subir por un respiradero.
"¿Quién eres realmente? Habla de tu información personal como nombre, edad, ocupación, todo." Park Noah habló a pesar de la fatiga que adormecía su cuerpo.
"¿Por qué yo? ¿Tú sabes siquiera quién eres?" Él respondió, mirándola fijamente con duda.
"¿Intentas burlarte de mí? ¿O el resentimiento de ese día aún perdura? ¿O realmente me diste la espalda y olvidaste todo de mí? O..."
"¿O?"
"Eres una persona diferente en el cuerpo de Eleonora."
Park Noah sólo podía mirarlo en silencio. Sus palabras anteriores afirmando que conocía a Eleonora Asil más que nadie, incluyendo a Kyle Leonard, no eran una mentira después de todo. Kyle Leonard tardó cinco días en sospechar, pero el desconocido que estaba al otro lado de ella tardó menos de cinco minutos.
"Soy precavida contigo. Primero tendré que indagar sobre ti."
Como si la expresión de dolor que llevaba fuera sólo una fachada, su cara retorcida regresó a la normalidad. Sin moverse, parecía un joven amable y rico. Sin embargo, cuando una sonrisa aparece en sus labios, se convierte en un dulce y seductor compañero. Después de escanear su apariencia, Park Noah no podía estimar su edad todavía.
"Usted es Eleonora Asil, ¿Verdad?" Preguntó con la punta de sus dedos golpeando su rodilla.
"Así es."
"Eres Eleonora, pero has perdido la memoria. ¿Puedo comprobarlo?"
"Si es una forma con la que no me tocas, puedes intentarlo." Park Noah respondió despreocupadamente, acariciando los suaves rizos de Muell.
Tan pronto como el permiso salió de sus labios, algo sin forma se balanceó en el aire. ¡Whoosh!
Llamas negras se elevaron de la mano de Muell y crecieron en un instante, devorando el ataque del hombre. Cubierta por las llamas negras, la cabina quedó tan oscura como un agujero negro. Las llamas destruyeron cada cuchilla en un parpadeo. Al presenciar la escena, los ojos del hombre se entrecerraron.
Sólo había una razón por la que ella podía fingir ser Eleonora Asil y concederle permiso para atacarla.
Hasta donde ella sabía, la difunta era considerada la bruja más fuerte de su mundo. En otras palabras, no importaba lo poderoso que fuera el hombre, no podía estar a la altura de Eleonora Asil. Por lo tanto, si él era más débil que ella, naturalmente no sería rival para un dragón.
"¿No es suficiente? Entonces, estoy dispuesta a atacarte esta vez." Park Noah sonrió débilmente, presumiendo que su especulación estaba en lo cierto. Parecía tranquila, pero francamente, estaba nerviosa.
La magia de Muell se precipitó en su cuerpo, y su corazón inmediatamente empezó a latir con fuerza. Pulpas de sudor comenzaron a humedecer su piel, pero afortunadamente, la atención del hombre se había desplazado a Muell, que estaba sentado en su regazo.
"Dijiste que no te acordabas, pero recogiste un extraño juguete en alguna parte. No, ¿Lo hiciste tú misma?" Preguntó con curiosidad.
"Será mejor que tengas cuidado con lo que dices. Como dije antes, mi hijo llora mucho". Miró a Muell, que miraba al hombre con sus ojos ardientes.
"Sí, me rindo. Me disculpo."
"Gracias por su disculpa."
"No tengo intención de atacar. ¿Qué hay de ti?"
"Mientras no busques pelea, me quedaré quieta. En el momento en que hagas una estupidez, serás expulsado de este tren." Park Noah amenazó.
Entonces se inclinó y hurgó en la maleta que había colocado bajo sus pies. Y con el chasquido de sus dedos, una larga cuerda salió volando de la maleta, retorciéndose como una criatura viviente. Ella murmuró de forma cansada.
"¿Pero no puede el hombre que una vez me apuntó, hacerlo dos veces?"
"¡......!"