Reciente

sábado, 18 de marzo de 2023

Cómo Domar A Mi Marido Bestial - Capítulo 69

Capítulo 69. Conversación (2)

"...¿Qué quieres saber?"

Dijo Celestine en voz baja. Estaba ansiosa por responder a las preguntas, para que Annette se fuera lo más rápido posible. Annette habló con cuidado porque se dio cuenta de ello.

"Gracias... Hay algo que realmente quiero comprobar contigo, respecto al incidente en el que fuiste secuestrada. En realidad pensé que habías sobornado a mi cochero para fingir tu propio secuestro. Pero ahora mirando tu comportamiento, creo…"

"¿Qué has dicho? ¡¿Qué soy la propia responsable de mi secuestro?!"

Celestine, que había estado escuchando las tranquilas palabras de Annette, la interrumpió a mitad de la frase. Estaba tan enfadada que su rostro se le puso rojo. Hasta hace poco estaba temblando de miedo, pero ese miedo se convirtió en ira. Su delgado cuerpo se estremeció debido a la ira hirviente.

"Desde ese día... ¿Sabes lo duro que ha sido? Mi corazón se acelera porque escucho la voz del hombre desconocido en el viento. Aunque me encuentre en la comodidad de mi hogar, en ocasiones observo agitada los muebles que me rodean, por si acaso alguien se esconde. Incluso salir a la calle me resulta difícil..."

Las furiosas palabras de Celestine se mezclaron entre sus sollozos. Retorció sus finos labios para contener el llanto. Como resultado, el labial rosado de sus labios terminó manchando ligeramente sus dientes de forma antiestética. Pero Celestine no se preocupó en absoluto, miraba furiosa con sus ojos llorosos a Annette.

"Me creaste un trauma mientras tu vives una buena vida de casada…  Estoy pasando momentos difíciles, todos los días siento ansiedad… Pero como no puedo desahogarme con nadie, le rezo a la Diosa para calmarme… Ahora me persigues hasta aquí…!!"

Celestine finalmente se derrumbó sollozando cuando sus emociones estallaron. Se veía muy afligida por la forma en que lloraba agarrando su corazón. Annette se sintió mareada porque la escena la conmocionó.

Por supuesto, Celestine podría estar tratando engañarse a sí misma. Pero no parecía el caso viendo su comportamiento. Se sentían tan vívidas las emociones que ella mostraba, que Annette estaba un poco confundida.

Estaba claro que algo estaba mal. Annette reflexionó sobre sus suposiciones. Creía que las recientes acciones de Celestine eran para evitarla. Si Celestine había cometido su propio secuestro para convertirse en la Princesa Heredera, seguramente debido a la culpa sería incómodo para ella encarar a la falsamente acusada Annette. 

'Pero en realidad... ¿Podría deberse al trauma psicológico del secuestro?'

Fue una situación inesperada para Annette, que había asumido la culpabilidad de Celestine. También esa razón bastaba para explicar sus recientes acciones.

Tenía sentido por qué Celestine evitaba las actividades sociales incluso después de haber sido elegida para el puesto de Princesa Heredera. También por qué se refugiaba tanto en la religión. Todo se podía justificar bajo las secuelas del trauma del secuestro.

Annette estaba tan confundida que se sentía fuera de sí. Ahora habían dos opciones; que Celestine fuera inocente o que simplemente estuviera actuando de forma descarada.  Por desgracia, Annette no tenía pruebas 'reales' para determinar cuál era la verdad. Por lo que no podía hacer un juicio precipitado en este momento.

'Necesito más tiempo para pensar'.

De todos modos, ahora no era el momento para ello. Annette vio a la sacerdotisa, que dormida en su silla, retorciéndose. Parecía que pronto se despertaría debido a los gritos de Celestine. Los guardias de afuera debían encontrarse en una condición similar. Estaba nerviosa porque hubo un poco de ruido más allá de la puerta.

Annette miró a la sollozante Celestine que estaba agachada en el suelo. Entonces se arrodilló frente a ella. Sorprendida por el acercamiento de Annette, Celestine levantó su rostro cubierto de lágrimas. Los ojos de las dos mujeres se encontraron. Annette susurró con sinceridad para aprovechar el momento.

"Lo siento, Celestine. Ni siquiera sabía que estabas sufriendo tanto… Sospechaba que todo fue un plan tuyo. Pero soy inocente, al igual que tú. Prometo en nombre de la Diosa que no soy la responsable de tu secuestro. Si lo hubiera hecho, no me habría arriesgado a infiltrarme aquí para verte. ¿No crees?"

Ella suspiró cuando terminó sus palabras. Había dicho todo lo que se le había ocurrido, pero dudaba de haber transmitido su mensaje de forma correcta a Celestine. Ella miraba a Annette con los ojos húmedos mientras respiraba de forma errática. Su rostro mostraba claramente que estaba dudando si debía creer en sus palabras.