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martes, 15 de junio de 2021

El Retorno Del Gran Mago Después De 4000 Años - Capítulo 120

 Capítulo 120. La Tercera Princesa Imperial (4)



Aunque Frey lo dijera, era imposible que le creyera tan fácilmente.


Se sabía públicamente que era un 7 estrellas. Por no hablar de los Demigods, ni siquiera era comparable a la mayoría de los círculos.


Por la naturaleza minuciosa de la princesa, era natural que sospechara de sus palabras al principio.


Sin embargo, esto no era un problema, ya que esa era la intención de Frey desde el principio.


Después de todo, el efecto sería mucho mayor si ella tuviera dudas de antemano.


Sin embargo, la reacción de la princesa fue completamente inesperada.


"Ah..."


¿Por qué estaba mirando a Frey con los ojos muy abiertos mientras su cara estaba roja como una remolacha?


Al ver esto, Verónica, que estaba a su lado, la pinchó en el costado con su dedo.


"...Su Majestad".


"¿Ah? Ahh. Ya, ya veo. D-dame un segundo".


Fiore trató de calmarse mientras se abanicaba la cara con una mano.


Verónica suspiró y murmuró en voz baja.


"...Su Majestad, es mejor no mostrar que es una solterona".


"¡Cállate!"


Después de un momento, Fiore miró a Frey con una expresión tranquila, como si no hubiera pasado nada.


"Tienes razón. Estoy en una situación mucho más precaria de lo que parece".


Leita parecía creer que Fiore estaría a salvo mientras estuviera dentro de la familia imperial, pero se equivocaba.


La familia imperial no era un lugar seguro para Fiore.


Al contrario, en cierto modo, no podía haber un lugar más peligroso para ella.


No era sólo por el Círculo y los Demigods.


Había escaramuzas de rango invisible, rencillas entre facciones y controles constantes. 


Ni siquiera podía recordar la última vez que había dormido profundamente.


Había sobrevivido en semejante campo de batalla y, hasta cierto punto, se había consolidado.


Esto era algo de lo que Fiore estaba orgullosa.


"Pero incluso los Demigods no me matarían fácilmente".


"El Maestro de la Undécima Torre. ¿Es por él?"


"...También sabes de él".


Fiore sonrió amargamente al decir esas palabras, pero no se sorprendió del todo.


No había mucha gente que conociera al Maestro de la Undécima Torre, pero el número seguía siendo bastante grande.


El guardián secreto de la familia imperial.


Un mago que ni siquiera los Demigods tocarían fácilmente.


Esa era la persona que la estaba apoyando.


Confiando en ese hecho, Fiore fue capaz de superar numerosas amenazas en la familia Imperial.


"Así es. La razón por la que he podido sobrevivir en la familia imperial es porque tengo su apoyo".


Por supuesto, fue su habilidad la que había llamado la atención del Maestro de la Undécima Torre.


Frey sentía curiosidad por él.


"Me gustaría conocerlo alguna vez".


"Bueno..."


"¿No puedo?"


Fiore negó con la cabeza.


"Eso no es algo que pueda decidir. La mayor razón es que no sé dónde está mi Maestro".


"¿Ni siquiera la princesa lo sabe?"


"No".


Esto fue inesperado.


Frey había pensado que podría reunirse con el Maestro de la Undécima Torre usando a Fiore como representante.


"Por cierto, 'Maestro'... no creo que la princesa haya aprendido ciencia mágica".


"Es el mejor mago que conozco, pero los conocimientos de mi Maestro no se limitan necesariamente a la ciencia mágica. He aprendido mucho de él. No creo que pueda devolverle su gracia aunque trabaje el resto de mi vida".


"Hmmm..."


"De todos modos... ¡ah!"


Fue entonces.


Fiore frunció el ceño un momento antes de sacar una pequeña canica de su bolsillo.


Los ojos de Frey brillaron ligeramente cuando la vio.


‘Una herramienta mágica’.


Fiore habló entonces con una expresión ligeramente confusa en su rostro.


"Mi Maestro se pone en contacto conmigo. Rara vez lo hace antes..."


"¿Debo irme por un tiempo?"


"No. No tienes que hacerlo. Creo que... tal vez mi maestro quiera hablar con Frey".


Fiore golpeó entonces el mármol con su dedo índice antes de murmurar en voz baja.


"Conectar".


Woowoong.


Entonces, una pequeña luz se proyectó desde el mármol antes de formar la forma borrosa de un hombre.


La figura llevaba una túnica, pero su aspecto no podía verse con claridad ya que la imagen era muy oscura.


[Es un placer conocerte, Frey Blake].


"..."


La voz era extraña. 


Era imposible siquiera adivinar el género del que hablaba, y mucho menos la edad.


La capucha de la túnica no era lo suficientemente profunda como para proporcionar una cobertura completa, por lo que debía ser la herramienta mágica la que ocultara su apariencia.


Esto significaba que la persona no tenía intención de revelar su identidad, lo cual era bastante común.


Incluso el propio Frey estaba usando actualmente la imagen de Kain Rixton.


"¿El Maestro de la Undécima Torre?"


[Correcto. Escuché su conversación].


¿Escuchó su conversación con Fiore usando la canica?


Esto no hizo que Frey se sintiera bien.


‘¿Sabía Fiore de esto?’


Frey le lanzó una mirada, con un breve destello en sus ojos.


"..."


Pero Fiore parecía estar tan sorprendida como él.


‘¿No sabía que la canica podía espiarla?’


Estaba claro que el Maestro de la Undécima Torre no había explicado del todo las funciones de la canica a Fiore.


Puede que hubiera una razón oculta, pero ahora mismo se sentía un poco molesto.


Entonces el Maestro de la Undécima Torre continuó.


['La dominación de los Demigods sobre el continente comenzará en unos años'. No creo que eso esté muy lejos de la verdad].


"Es muy probable".


Frey habló despreocupadamente.


Era un fuerte contraste con el uso cortés de los honoríficos por parte de Fiore, pero el Maestro de la Undécima Torre no era un título que existiera oficialmente en primer lugar. 


Frey tampoco veía una razón para ser cortés en primer lugar.


Al Maestro de la Undécima Torre no parecía importarle su forma de hablar.


[...El regimiento de Caballeros del Dragón Negro del reino de Luanoble fue destruido de la noche a la mañana].


"Hmm".


Frey se preguntó cómo había sabido acerca de esa información.


Por supuesto, Frey lo sabía porque había estado justo al lado de Nozdog mientras aniquilaba al grupo de Caballeros.


[Los Caballeros del Dragón Negro eran lo suficientemente fuertes como para derribar una pequeña fortaleza en un día. Sin embargo, después de recibir algún tipo de misión de la familia real, simplemente desaparecieron como si se hubieran evaporado. Por lo que sé, los únicos seres capaces de algo así en todo el continente son los Demigods].


"Fue el Demigod con el poder de la muerte".


No era algo que tuviera que ocultar.


El Maestro de la Undécima Torre asintió.


[Así que fue Nozdog. También pensé que sería uno de los Apocalipsis].


Los tres Apocalipsis que el Círculo había identificado eran los Demigods de la espada, el veneno y la muerte. 


Parecía que el Maestro de la Undécima Torre también conocía a Nozdog.


[...Nadie sabe por qué los Demigods han permanecido en las sombras durante tanto tiempo. Pero estoy seguro de una cosa. La razón por la que no tomaron el control del continente antes no fue por falta de confianza].


Era un juicio acertado.


Después de todo, era seguro asumir que había pocos seres en todo el continente que pudieran amenazar a los Demigods tras la desaparición de los dragones.


Aun así, había una razón por la que permanecían ocultos.


Porque temían el castigo.


Pero el Illuminium que Leyrin había creado les había dado la oportunidad de engañar a la Ley del Mundo.


Aunque hubiera un límite de tiempo, eso no era un gran problema.


Y esto significaba que ya no tenían que permanecer en silencio.


[Matar a los Caballeros del Dragón Negro fue una de las masacres más impactantes llevadas a cabo por los Demigods en décadas. No fue a través de un Apóstol o subordinado; fue una masacre llevada a cabo con sus propias manos].


"¿Y el ataque a Nozdog de antes? Miles de personas murieron en ese momento".


El Maestro de la Undécima Torre negó con la cabeza.


[Averiguaron dónde se alojaba Nozdog y, el Círculo fue el que dio el primer paso. Parafraseando, fue una tontería tocarle las narices a un león dormido].


Los ojos de Frey brillaron al escuchar esas palabras.


"Sabes mucho sobre el Círculo. Información que los de fuera no podrían conocer..."


[...mm.]


El Maestro de la Undécima Torre se detuvo un momento antes de soltar un suspiro y decir.


[He bajado la guardia, tienes razón, al principio era miembro del Círculo].


"¡...!"


Fiore fue la más sorprendida por eso.


Era la primera vez que escuchaba esta información.


Frey pensó un momento antes de decir.


"¿Eras miembro de los Collares de Strow?"


[...¿Por qué dices eso?]


"Ese mármol probablemente fue hecho por ti".


Frey señaló hacia la canica que sostenía Fiore.


"Parece que fue hecha con alquimia, pero es una herramienta mágica precisa que no podría ser hecha sin el más alto grado de conocimiento mágico. No es algo que pudiera haber sido hecho por alguien que no perteneciera a la Escuela Strow, que tiene profundos conocimientos sobre el Gran Sabio y son maestros de la alquimia."


Eso no era todo.


No podía estar seguro debido a lo borroso de la imagen, pero Frey estaba casi seguro de que la túnica que llevaba el Maestro de la Undécima Torre era también una herramienta mágica.


El Maestro de la Undécima Torre asintió con la cabeza, sin intención de negar la observación de Frey.


[Una vez fui el Maestro de Círculo de los Collares de Strow].


"¡...!"


Frey no pudo evitar sorprenderse por esta información.


Había creído que el Maestro de la Undécima Torre había sido al menos un ejecutivo, pero nunca había imaginado que en realidad fuera un antiguo líder de uno de los Tres Grandes Círculos.


"¿Por qué dejaste el círculo si eras el Maestro de Círculo?"


[No me fui, me echaron].


"¿Qué quieres decir?"


[Frey Blake. Puedo ver en tus ojos que estás pensando seriamente en derrotar a los Demigods... es una mirada que me recuerda a Osel].


"...¿Conocías a Osel Argento?"


Osel Argento. 


El padre adoptivo de Beniang Argento y el hombre que se había sentado en el asiento como jefe de los Anillos de Traumen cuando era una de las fuerzas más prominentes del Círculo.


El Maestro de la Undécima Torre asintió.


[Osel era uno de mis mejores amigos. Prometimos revivir el Círculo y un día escapar completamente de las garras de los Demigods].


Su voz era amarga.


[Su muerte fue lo que realmente puso de manifiesto lo podrido que estaba el Círculo. Si me hubiera escuchado y hubiera abandonado el Círculo antes, tal vez no hubiera tenido un final tan espantoso...]


"..."


Cuando escuchó eso, Frey recordó de repente las palabras de Iván.


[Los Anillos de Traumen... He oído que sufrieron un daño considerable durante la batalla con el Apocalipsis de la Muerte. Incluso hubo rumores de que los Tres Grandes Círculos tuvieron algo que ver en eso...]


"No estoy seguro, pero eso es lo que he oído".


En ese momento, Frey había considerado que la muerte del Maestro Osel era bastante sospechosa.


Sin embargo, al ver la reacción del Maestro de la Undécima Torre, parecía que realmente había algo más de lo que parecía en su muerte.


[Cuando me expulsaron del Círculo, quise llevarme a Beniang conmigo, pero no funcionó. Pero inesperadamente, tengo una nueva oportunidad].


"¿Oportunidad?"


[Voy a hacer una oferta formal. ¿Te gustaría sacar a los Anillos de Traumen del Círculo?]


"..."


[Con tu nivel de perspicacia, estoy seguro de que sabes que el Círculo está podrido hasta la médula. Si te quedas allí, nunca serás capaz de lograr tus objetivos].


"¿Y unirse a ti sería diferente?"


[Por supuesto.]


El Maestro de la Undécima Torre dijo esas palabras con convicción.


[Ya han pasado 50 años desde que me echaron del Círculo. Y durante ese tiempo, luché por crear un grupo que realmente heredara la voluntad de los héroes del pasado... y hace poco, lo logré].


Su voz, que había sido tranquila hasta ese momento, se llenó de pasión y vigor.


[Tengo una fuerte alianza, Frey. No se convertirá en algo como el Círculo. No, nuestra alianza podría ser ya más poderosa. Con nosotros, derrotar a los Demigods podría no ser sólo un sueño].


La propuesta del Maestro de la Undécima Torre era perfecta. 


Además, su comportamiento era algo que Frey podía entender.


Pensó que era sorprendente que alguien siguiera teniendo el fuego del espíritu de lucha ardiendo en su interior, incluso después de haber sido expulsado del Círculo.


‘Además…’


El Maestro de la Undécima Torre era al menos un mago de 8 estrellas.


De no ser así, no habría podido ocupar el puesto de Maestro de Círculo de uno de los Tres Grandes Círculos, y no habría podido mantener a raya a los Demigods.


El grupo al que pertenecía bien podría ser más fuerte que el Círculo. Así que no había necesidad de ir más allá.


Este grupo sería capaz de moverse solo sin la guía de Frey, y podrían avanzar firmemente hacia la destrucción de los Demigods, el deseo largamente acariciado por Frey. 


Por otro lado, el Círculo era diferente.


Había que arreglarlo.


Si se dejaba como estaba, sólo haría falta una breve ofensiva de los Demigods para destruirlo por completo.


Dado que el Círculo era la mayor espina en el costado de los Demigods, lo primero que harían cuando tuvieran suficiente Illuminium sería destruirlos.


No podía hacerlo.


Aunque era un hecho que el Círculo estaba podrido, Frey no podía evitar sentir que era un desperdicio de poder y potencial dejarlo como estaba.


"Agradezco la oferta, pero tengo la intención de arreglar el Círculo desde dentro".


El Maestro de la Undécima Torre se sorprendió con esas palabras, pero luego soltó una risa amarga.


[Hoho... reformar el Círculo desde dentro. Realmente eres como Osel].


"..."


[Eso no es tan fácil como parece. En el pasado, los Anillos de Traumen eran tan poderosos como los Tres Grandes Círculos, pero tardaron menos de 10 años en colapsar].


Luego esbozó una leve sonrisa 


[Mi propuesta sigue en pie. Siempre daré la bienvenida a alguien con tu talento... Sólo espero que no tengas el mismo final que Osel].


"Eso no sucederá".


[Espero que no. Entonces... nos encontraremos de nuevo algún día. Tengamos una conversación seria cuando llegue ese momento].


Entonces giró la cabeza y se dirigió a Fiore.


[Fiore, no escatimes esfuerzos en ayudarle. Aunque actualmente estamos recorriendo dos caminos diferentes, nuestros destinos siguen siendo los mismos...]


"Ah... sí, Maestro".


Shuk.


Después de que Fiore asintiera, la imagen del Maestro de la Undécima Torre se volvió borrosa y comenzó a desaparecer.


Estaba claro que estaba desconectando la "llamada".


Frey abrió la boca justo antes de desaparecer.


"¿Puedes decirme tu nombre?"


[...Soy Cairo Wilsemann.]


"¡...!"


Con esas palabras, la figura del Maestro de la Undécima Torre desapareció por completo.


Sin embargo, Frey siguió mirando el lugar donde había estado parado.


‘Cairo Wilsemann...’


Wilsemann.


Ese era el apellido que tenía Schweiser antes de cambiarlo a Strow.