Reciente

domingo, 7 de febrero de 2021

I Raised A Black Dragon - Capítulo 150

Capítulo 150. Vestido Púrpura


Exactamente cinco días después, el operador se encontró con una joven que le hizo la misma pregunta. 

"Señor. ¿Por dónde debo dirigirme para llegar a la mina Baobab?"

"¿La mina Baobab?"

Tenía las ondas de su cabello recogidas, metidas dentro de su sombrero. En el puente de su delgada nariz se apoyaban unas gafas que provocaban náuseas a cualquiera que las mirara fijamente. El operador del motor respondió en voz alta, desviando la mirada de las absurdas gafas de la mujer.

"No hay ninguna mina llamada Baobab. Parece que te equivocas en algo."

"...Mmmm, es parecido". La mujer, que daba la impresión de ser una persona torpe, sacó lentamente un papel arrugado de su bolsillo. "Es una mina a gran escala. El nombre es... Ah, Maobab."

"...Quizás quieres decir Maobiana. En estos tiempos muchos jóvenes se interesan por Maobiana". El operador chasqueó la lengua, miró fijamente al niño de cabello negro que la mujer cargaba. "Tienes un hijo. ¿Por qué vas a ese lugar tan peligroso?".

La mujer ladeó la cabeza. "¿Lugar peligroso?" 

"Sí. ¿No has escuchado el rumor? Un grupo de esclavos ha muerto misteriosamente en la mina de Maobiana. Eso sucede de forma frecuente."

"Oh..."

La mujer soltó una exclamación de que le resultaba muy interesante, más que aterrador. "Entonces, ¿Por dónde debo ir?", preguntó.

"...Sigue recto por ahí, gira a la izquierda y hay un tren que va en esa dirección."

"Ah. Gracias. ¿Hay algún lugar en Maomana que necesite mano de obra? Tengo que quedarme en ese lugar un tiempo."

'¿Quiere conseguir un trabajo en la mina?' se preguntó el operador. Intentó darle un consejo porque estaba preocupado, pero recordó que hace unos días un joven ni siquiera le prestó atención. Los jóvenes de hoy en día parecen muy aventureros.

"Siempre hay escasez de mano de obra. Ve a la oficina de Culton frente a la mina. Porque es una oficina minera dedicada a Maobiana."

"¿La oficina minera?"

"Sí. No será difícil conseguir trabajo porque contratan a mujeres, niños y ancianos por una gran suma de dinero. Pero tiene que tener cuidado, señorita."

"Gracias por su preocupación". La mujer, junto con el niño, inclinó la cabeza y se marchó hacia la misma mina a la que se dirigía el joven hacía cinco días.

***

Noah llegó a la discreta ciudad de Noviscosha. Se levantó ligeramente el sombrero de ala ancha, desconfiando de su entorno.

『Oficina de Culton, Estado Minero.』

En la puerta del edificio de tres plantas había un cartel colgado. Decía que un hombre de negocios de mediana edad llamado Donalian Culton era el dueño de la mayor mina de Noviscosha. Las letras del cartel formaban las palabras 'Oficina de Culton'; parecía que Noah había llegado al lugar correcto.

La materia prima utilizada para producir máquinas similares a los humanos, que Kyle había analizado detalladamente, era el mineral Crin. Un mineral de alta densidad con un contenido de poder mágico del 78%.

Y sólo había un lugar en Noviscosha donde se desenterraba un mineral tan valioso. Una mina que suministraba una cierta cantidad cada mes al Ministerio de Magia de la capital, Tezeba; Maobiana.

Habría sido extremadamente fácil adquirirlo ilegalmente debido a la conexión de la mina con el Ministerio de Magia. 

Era natural que Noah eligiera este lugar como primer destino. Ella había escogido la zona más cercana a Noviscosha de la lista creada por el propio Emperador en la que podía desempeñar sus funciones de voluntaria, luego se vio obligada a compartir habitación en una posada con uno de los funcionarios imperiales asignados a seguirla para que no se escapara. Pero al final se escapó e inmediatamente después llegó a Noviscosha.

Noah entró con confianza en la oficina de Culton. El empleado masculino sentado en el mostrador la saludó. "¿Qué la trae por aquí, dama?"

"He venido por una nueva mina. Quiero explotar una zona sin explotar detrás de Maobiana. Vengo a preguntarle al Señor Culton."

"Oh, creo que estás hablando del valle detrás... Es una de las pocas áreas donde la minería está prohibida en Maobiana."

"¿En serio? ¿Por qué?"

"Es una zona de acantilados, y también es un lugar que el Ministerio de Magia etiquetó como prohibido. Tienes que conseguir primero la aprobación de la Familia Real."

'Sospechoso. ¿Cuántas zonas estaban directamente prohibidas por el Ministerio de Magia?' pensó. Un ceño fruncido apareció en su rostro, y la empleada preguntó con cuidado.

"Por cierto. Si ha venido al desarrollo de la minería... ¿Puedo preguntar a qué familia pertenece?"

"Oh..."

La respuesta a esa pregunta estaba preparada de antemano. Al bajarse lentamente la capa, quedó al descubierto un vestido púrpura, decorado con encajes y un broche con motivos florales, junto con un deslumbrante collar de perlas que colgaba de su cuello. Un gran sombrero de terciopelo, adornado con plumas, cubría la mitad de su rostro. 

Entonces, las comisuras de su boca se alzaron en una cálida y amistosa sonrisa.

"Leonard, Duque de la Capital."

En este punto, debería estar claro. Noah era una dama rica que había venido a mirar las tierras.