Capítulo 158. La Fascinación de Leticia
Rihannan permaneció en silencio, pero sólo por un breve momento.
"Tu nombre no estaba en la lista de invitados."
Una astuta sonrisa estaba en los labios de Leticia. "Una de las mujeres nobles que conozco personalmente sufrió un gran dolor y no pudo participar en la competición, así que asistí en su lugar."
Rihannan quería saber, quería preguntar por qué necesitaba llegar tan lejos como para asistir a una simple competición de Kiritte, pero no lo hizo. Sus labios tenían problemas para moverse. Rihannan no podía entender el odio incondicional de Leticia hacia ella.
...¿Era el destino?
"Tenía curiosidad. Quería observar cómo le va a Su Majestad en estos días, para saber cómo vive después de dejarnos a mí y a mi padre a un lado. Y..."
La comisura de sus labios se curvaron, formando una sonrisa diabólica.
"...Más que nada, quería conocer de cerca a Su Majestad, el Rey. Aunque lo vi una vez antes, estaba muy lejos y no lo pude mirar claramente. Y tal como los rumores especulan, Su Majestad es un hombre muy apuesto. Su encanto, su sonrisa digna, y todas esas cosas son incomparables con cualquier hombre promedio."
Leticia se acercó a Rihannan.
Si Leticia había intentado poner su vida en peligro, existía la posibilidad de que aprovechara este momento como una oportunidad. El instinto de Rihannan la alertó, la instaba a escapar del cuarto oscuro, pero no lo hizo. Todavía le quedaba un toque de orgullo en su corazón. Estaba consciente de que su orgullo podría llevarla a su perdición, pero...
"Su Majestad, el Rey, ha sido muy amable con usted. Todavía lo recuerdo claramente. ¿Qué piensas si esa sonrisa se dirigiera hacia mí en su lugar...?"
Leticia se inclinó hacia adelante y susurró al oído de Rihannan palabras tóxicas. Las llamas bailaban en sus ardientes ojos rojos llenos de codicia y deseo.
Rihannan había visto esa mirada antes. Fue cuando Leticia vio por primera vez a Igor en el banquete, con los ojos llenos de ambición para robarle el corazón y alcanzar la cima del poder.
"...¿Su Majestad?"
La voz de la Señora Cessley sonó.
Leticia se separó de Rihannan y se distanció rápidamente, se marchó de inmediato al notar la presencia de otra persona. La Señora Cessley le dio una mirada furtiva a la mujer de cabello rojo, sin molestarse en saludarla.
La Señora Cessley notó algo raro. Tenía una atmósfera antipática, pero no le prestó atención y se acercó a la reina.
"Te busqué por todas partes. No sabía que estabas aquí. ¿Quién era esa mujer? Nunca la había visto antes. ¿De qué estaban hablando... mi Reina?"
Rihannan puso su mano temblorosa en sus labios. Las náuseas de su estómago aumentaron. Todo tipo de pensamientos sucios y peligrosos se desbocaron en su interior de forma caótica. Entonces, no pudo aguantar más y vomitó violentamente un poco.
La sorprendida Señora Cessley la ayudó rápidamente.
"Mi Reina, ¿Se encuentra mal?"
Rihannan asintió con la cabeza ligeramente mientras la Señora Cessley la llevaba a una habitación separada con aire fresco.
"Aquí, mi Reina."
Su participación en el banquete terminó de esa manera.
Rihannan pasó el resto del día en una habitación de invitados. Dejó de tener arcadas, pero no estaba en condiciones de reírse y relacionarse.
Rihannan se disculpó con la Duquesa Saphia incontables veces antes de entrar en el carruaje y volver a casa antes de lo previsto. Se apoyó en la pared del carruaje. No le quedaban fuerzas.
La Señora Cessley, que había intentado encontrar un momento para hablar, abrió la boca con una precisa precaución, "Mi Reina, me disculpo por mi insolencia, pero ¿Debemos revisar su cuerpo después de regresar al palacio?"
" Señora Cessley... no hay necesidad de preocuparse. No tengo dolor."
"No es eso lo que quiero decir... Se trata de..."