Capítulo 2. Ira (2)
"¿Por qué no sales primero? Encontraré a George e iré después."
"Sí. Sería bueno verlos a los dos entrar juntos hoy. Estaré esperándolos."
"Atenderé a los invitados antes de que comience la fiesta."
"No te preocupes, la Señora Venigans es buena haciendo ese tipo de cosas."
"Bien. Entonces, nos vemos luego."
Tras separarse de su hermana, Rihanna se movió nuevamente para encontrar a George.
Pero aunque buscaba por todas partes, no podía encontrar a George.
'Es extraño. Él no está en ninguna parte'.
Rihanna comprobó la hora. Había llegado la hora de la fiesta. Finalmente, Rihanna dejó de buscar a George y salió al exterior.
En mayo, hacía una hermosa primavera. Dulces frutos crecían en los árboles, y el aroma de las flores recién florecidas brotaba por todos lados. Sería una tontería hacer una fiesta de aniversario de boda en el salón de banquetes de la mansión, teniendo un escenario tan hermoso.
Disfrutando del brillante sol, Rihanna se dirigió al jardín donde se celebraba la fiesta. Desde la distancia, parecía que la mayoría de los invitados habían llegado. Rihanna siguió caminando hacia los invitados, preguntándose cómo explicaría la ausencia de su esposo.
'...¿Eh?'
Vio una cara familiar. Era George. Estaba con algunos invitados a su lado.
Rihanna sonrió y caminó hacia el grupo donde estaba George.
"¿Qué? ¿Estabas aquí?"
"Oh, Rihanna."
"Te he estado buscando por un tiempo. Me preguntaba en dónde más podrías estar."
"Yo también te estaba buscando. Nuestros caminos no se han cruzado."
Después de hablar, George besó a Rihanna ligeramente en la frente. Hacía tanto tiempo que no tenía contacto físico delante de los demás que Rihanna se sorprendió por un momento. Pero pronto, ella sonrió como si nada hubiera pasado.
"Felicidades por su cuarto aniversario de boda, Dama Royde."
"Gracias, Dama McCarthy. Me alegro de que haya venido."
"Tengo un regalo para ti, pero no estoy segura de que le guste."
"Oh, no era necesario que trajeras un regalo. Incluso mencioné en la invitación que vinieras con las manos vacías."
"¿Podría hacer eso? Es el cuarto aniversario de boda de mi amiga íntima."
Entonces, la Dama McCarthy le hizo un gesto a la sirvienta que estaba detrás de ella. La sirvienta se acercó rápidamente a Rihanna y le entregó algo. Era una caja negra plana.
"Por favor, ábrelo. No estoy segura de que te vaya a gustar."
"Estoy agradecida sólo con tu amabilidad."
Sin pensarlo mucho, Rihanna abrió la caja que le habían entregado. Dentro había un collar hecho de serafinita. Por un momento, Rihanna puso una cara de desconcierto.
'El regalo que George preparó también es un collar'.
Pero aún así, Rihanna no podía mostrarse preocupada, así que sonrió alegremente mientras sostenía el regalo de la Dama McCarthy.
"Es muy bonito, Dama McCarthy. ¿De dónde sacaste este collar?"
"Lo guardé de forma especial. Dicen que es una joya que permite comunicarse con los ángeles."
La Dama McCarthy añadió, mirando el hermoso cuello blanco de Rihanna.
"Hoy has salido sin usar collar. ¿Sabías que te daría un collar de regalo?"
"No, no ha sido por eso..."
Esta vez, Rihanna le echó un vistazo a George. Pero George parecía indiferente.
Rihanna se quedó mirando a George fijamente por un momento, y luego se giró rápidamente.
"De todos modos, me alegra no haberme puesto collar. Aunque no esperaba recibir un regalo tan hermoso. Muchas gracias, Dama McCarthy."
Rihanna se giró, y le preguntó a su esposo.
"¿Puedes ayudarme con esto, George?"
"Sí."
George aceptó de inmediato con agrado. Entonces, Rihanna movió cuidadosamente su cabello hacia un lado, para que George pudiera ponerle el collar con más facilidad. Después de un breve momento, George le puso el collar, y sólo entonces Rihanna movió su cabello a su posición original.
Viendo a Rihanna, la Dama McCarthy exclamó.
"¡Cielos, te queda muy bien!"
"¿En serio?"
"Sí. De hecho, incluso antes de darle el regalo, pensé que sería adecuado para ti. Resulta que tenía razón."
"Gracias, Dama McCarthy. Lo usaré con gusto."
"Pero lo más importante, ¿El Conde tiene algún regalo preparado para su esposa?"
En ese momento, la Dama McCarthy le habló a George con una voz de disgusto. Ante la inesperada pregunta, George parecía nervioso, pero luego habló de forma casual.
"Por supuesto que sí, Dama McCarthy."
Rihanna sabía cuál era el regalo. Le preguntó a George emocionada.
"¿Realmente preparaste uno? ¿Qué es?"
"Aún es secreto, Rihanna."
"Como no me lo entregaras en la fiesta, supongo que es un regalo muy deseable, ¿No?"
"Tal vez. Pero, ¿Y si mi regalo te decepciona?"
"No creo. Probablemente me gust..."
"Ah, hermana. Estabas aquí."
Una voz familiar interrumpió las palabras de Rihanna en ese momento.
Con una sonrisa en su rostro, Rihanna se volteó para saludar a Lisbeth. No, ella pensaba hacer eso.
"...Lisbeth."
Antes de observar el hermoso collar de peridoto alrededor de su cuello.