Capítulo 128. Para No Sentirme Miserable
Rihannan enterró su cara en su pecho. Sus cálidas y saladas lágrimas, mojaron el área de su pecho, y ella no mostró signos de detenerse. Parecía que llenaría el océano en cualquier momento.
Igor dejó escapar un doloroso suspiro y dijo, "Rihannan, ¿Recuerdas la vez que subí al árbol para evitar que lloraras? ¿Qué... qué debo hacer esta vez? ¿Debería subir a la torre y elegir una estrella del cielo nocturno? ¿Podrías entonces detenerte? Yo... lo siento..."
Sus hombros temblaron ligeramente ante su respuesta. Aunque entre lágrimas, él sintió que sus labios se convirtieron en una sonrisa. Su doloroso y arrepentido corazón se alivió.
"Fue mi culpa. Todo es culpa mía. Te toqué sin tu consentimiento... te desgarré la ropa... lo siento mucho... me arrepiento de mis acciones..."
Un momento después, Rihannan levantó la cabeza. Había llorado tantos que sus ojos estaban rojos, esperando llenar el vacío que sentía en su interior. A Igor le dolía el corazón viendo el terrible estado en que se encontraba. Limpió las lágrimas de sus ojos con sus manos.
"Creí que estabas molesto conmigo... porque me excedí de los límites", murmuró Rihannan.
"...¿Excedí de los límites...?"
"Sentí que te había ofendido diciéndote que abrazaras a otras mujeres... ordenándote..."
"Es verdad. Hace un tiempo estaba lleno de ira, pero te equivocas. No puedes hacer nada que supere los límites". Los ojos de Igor se suavizaron.
Él tocó su rostro como si representara su mundo.
"¿Pero por qué dijiste eso de la nada? Debe haber habido una razón", preguntó con una voz moderada.
"Por Seraphina Rissel", respondió Rihannan con un suspiro después de dudar.
Los ojos de Igor brillaron.
"¿Te ha hecho algo esa mujer?"
Él debería haber... permanecido más tiempo junto a ella en el salón de banquetes...
Los eventos que ocurrieron en el salón de banquetes vinieron a su mente e hicieron que frunciera el ceño. Sus labios se unieron en una amarga cólera. Pensó que todo estaría bien. Rihannan conversaba con la nobleza sin problemas, pero a mitad del banquete, notó que su esposa estaba en una situación vulnerable. Sus preocupaciones aumentaron al instante y su estado de ánimo se convirtió en un caótico desorden.
Seraphina Rissel se había parado frente a su amada esposa, y la gente que le rodeaba mantuvo la boca cerrada, observando con curiosidad en silencio. La hija de la casa de Rissel había sido proclamada reina con el apoyo del Consejo Privado, pero rápidamente Igor negó la sugerencia con firmeza. Desde entonces, Serafina Rissel siempre se acercaba a Igor usando la coincidencia como pretexto, buscando convertirse en su esposo.
'Esa maldita mujer', maldijo Igor interiormente.
***
En el salón de banquetes, cuando dio un paso adelante y se dirigió hacia Rihannan, la Señora Cessley apareció de repente bloqueó su movimiento.
"Su Majestad, me disculpo por mi grosería, pero ¿Por qué no dejar que Su Majestad se ocupe del asunto?"
"¿De qué está hablando?". Preguntó Igor enfadado.
"Parece que la Señorita Seraphina se acercó a Su Majestad con intenciones maliciosas. Ella intencionadamente sacó el tema de la Reina que había sido traída a Arundell como rehén. Planea poner a Su Majestad nerviosa, provocando que ella cometa un error vergonzoso frente a la nobleza. Su Majestad no caerá en la trampa tan fácilmente. Por favor, tenga un poco de paciencia y espere. Recuerde que no podrá estar al lado de Su Majestad en todo momento."
En ese momento, los labios de Igor se separaron. El juicio de la Señora Cessley fue acertado. Aunque demostrara su amor y afecto por ella como reina, no impediría a los que odiaban su existencia. Rihannan necesitaba formar conexiones y relaciones por sí misma. Si Igor interviniera y reprendiera a Seraphina Rissel, Rihannan escaparía de los problemas actuales, pero tendría dificultades para construir su propia dignidad.
Mientras Igor y la Señora Cessley vigilaban de cerca, el Duque Rissel intervino inmediatamente y regañó a su hija cuyo rostro se volvió pálido. El ambiente incómodo que se produjo en el salón de baile, terminó con Serafina Rissel arrodillada ante la reina y pidiendo disculpas por su error.
Los nobles presentes pronto se dieron cuenta de que no se podían meterse con Rihannan fácilmente.
***
Igor creía que ese problema estaba resuelto, pero tal vez estaba equivocado.
"Por favor, dime... ¿Te amenazó de alguna manera, advirtiéndote que te alejaras de mí y mantuvieras distancia?" Preguntó, con la voz teñida de furiosa ira.
Rihannan sacudió rápidamente su cabeza. "No. No lo hizo. Eso lo hice yo. Le dije que tuviera cuidado con sus palabras."
Igor suspiró y emitió un sonido de admiración diferente a su frenesí inicial. Rihannan habría sido incapaz de pronunciar una palabra en el pasado, pero ahora había recorrido un largo camino.
"Entonces...¿Por qué me dijiste que abrazara a otras mujeres?"
"...Porque... no quiero sentirme miserable, Igor. No quiero que otra cosa como esta ocurra en el futuro. Creo que pronto te cansarás de mí y creí que en ese caso, sería mejor darte permiso. Al menos podría mantener mi dignidad intacta."