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domingo, 8 de noviembre de 2020

No Quiero Ser Amada - Capítulo 119

Capítulo 119. La Reina Rehén


Sin embargo, en el momento en que la Señora Cessley dejó el lugar, otro grupo que vigilaba de cerca a la reina se dirigió lentamente hacia ella.

Rihannan los miró. Reconoció a la joven que lideraba el grupo e inmediatamente su rostro se volvió rígido.

'Serafina'.

Seraphina Rissel. 

En el pasado, era una de las líderes nobles que se burlaban y hacían sus comentarios burlones en secreto. Estaba casada entonces, pero por extrañas razones, permanecía soltera y sin una pareja noble en esta vida.

"Saludos, Su Majestad. Soy la hija mayor del Duque Rissel, Serafina Rissel de la Casa Rissel."

El ambiente cambió sutilmente en ese momento. 

Los nobles que no se cansaban de la reina y hablaban con fervor cerraron la boca como si lo hubieran acordado de antemano. 

Sus ojos se dirigieron hacia Rihannan y Seraphina, de un lado a otro, intentando leer el estado de ánimo. 

Se quedaron esperando a ver qué pasaría después.

La intuición de Rihannan le indicaba que algo andaba mal. Ella sintió que le faltaba algún conocimiento clave. Intentó descifrarlo basándose en la información que la Señora Cessley le había dicho, pero no surgió nada.

"Es un placer conocerla, Duquesa."

A la respuesta de la reina, Seraphina levantó la comisura de sus labios con elegancia. 

Rihannan sabía por experiencia que la expresión de Seraphina, era la que se hacía antes de lanzar un ataque total, pero aunque predijo el ataque de la Duquesa en cualquier momento, no conocía los motivos.

Si la Señora Cessley hubiera estado a su lado, la habría ayudado a analizar rápidamente la situación, pero ahora, estaba sola en una guarida de leones.

Se habían organizado desde el principio. El grupo estuvo esperando hasta que la Señora Cessley se marchara para que nadie pudiera ayudarla.

"Tenía planes de saludarla antes, mi Reina, pero su popularidad es tan abrumadora que temía no poder decir ni una palabra."

Rihannan podía sentir las palabras punzantes de Seraphina.

"Me elogias demasiado. Vinieron para ayudarme, no conozco a nadie y que me sentiría sola. Son muy amables y cariñosos", respondió Rihannan con una leve sonrisa.

Serafina levantó su abanico y miró fijamente los gélidos ojos azules de la reina. 

"Tienes razón, mi reina. Volviste a un lugar que no conoces y te quedaste en un sitio desconocido durante un mes. De hecho, debes sentirte sola."

En ese momento, Rihannan escuchó pequeños jadeos de los nobles que la rodeaban. 

Pronto, un silencio se apoderó del lugar.

Ella misma decidió no quedarse en Chrichton hasta el día de su boda y llegó a Arundell un mes antes escoltada por el ejército, pero no muchos sabían de este detalle en particular. La nobleza tenía la idea y la noción de que su rey pidió a Chrichton que le enviara un miembro de la familia real como rehén, y de esa manera, su recién pronunciada reina fue arrastrada de vuelta a Arundell.

Todo el mundo pensó esto, pero nadie lo dijo en voz alta, porque habían visto el amor genuino que sentía el rey por su reina. Pero había venido Serafina, instigando con lo que alguna vez pensaron.

El punto principal que ella había querido comunicar, era que aunque ella y el rey fueran muy unidos, el hecho de que ella hubiera sido tomada como rehén de un reino extranjero no cambiaba.