Capítulo 98. Matrimonio Depredador
"...¿Dónde están todos los demás?" Rihannan susurró de forma audible.
Solo estaban los dos. Los testigos de ambos reinos ya deberían haber rodeado la cama, que estaría cubierta por cortinas blancas. Pero estaba vacío.
"Probablemente disfrutando del banquete de la recepción de boda."
"...¿Qué quieres decir?"
Igor llenó hasta la mitad de licor una copa y se lo dio a su esposa. Rihannan lo tomó sin entusiasmo. Igor se sirvió otra copa para él.
"Es natural que se celebre una recepción de boda para celebrar a los novios. Lo más probable es que bailen, beban, jueguen y hagan el ridículo. No estarán en casa hasta después del amanecer."
Cierto. Incluso ahora, escuchaba los ecos bulliciosos y las melodías que sonaban. Pero esa no era la respuesta que ella necesitaba.
"¿No vendrán? La gente que daría testimonio de nuestra..."
"No."
"¿Sí?"
Igor miró a los ojos de la chica que amaba... como el azul del mar iluminado por la noche de luna. Igor amaba la lluvia, el océano, el río... y eso le recordaban sus ojos de color azul. Por otra parte, ella odiaba el púrpura... el púrpura de sus ojos... ella le temía.
"Rihannan, ya no existe la costumbre de que los testigos observen al margen para asegurarse de que la ceremonia de la primera noche se lleve a cabo. Me deshice de ella."
"......"
Ella parpadeó.
Fue la primera vez que supo que una antigua tradición en Arundell podía abolirse fácilmente.
"¿Sabes por qué existe la costumbre de que los nobles sean testigos de la primera noche de bodas de la realeza?" Mientras preguntaba, inclinó la copa y tomó un sorbo.
Rihannan siguió su ejemplo.
"No. No sé nada sobre su origen", ella dijo.
"Hace mucho tiempo, los parientes del novio y de la novia eran testigos para comprobar que su matrimonio no se trataba de un matrimonio depredador."
"He escuchado sobre eso en tiempos antiguos..."
"Sí. Eso es correcto. Antes de que fueran influenciados por el antiguo imperio, este reino fue una vez un mundo sin ley."
"......"
Había aprendido recientemente de la Señora Cessley, que en los tiempos antiguos existía una especie de lógica en la que sólo prevalecían los fuertes y poderosos. A menudo se producían secuestros para obtener novias, lo que provocaba varios problemas, uno de los cuales consistía en la dificultad de determinar la situación legal en función del matrimonio.
"En aquellos días, cuando Arundell no era un reino sino que estaba formado por jefes tribales, el secuestro de novias sucedía con frecuencia, y cuando esos jefes tribales se convirtieron en rey, la tradición continuó, causando mucha confusión en la legalidad del matrimonio. Si el matrimonio era ilegítimo, el rey y su heredero serían descalificados para sentarse en el trono."
"...Ya veo", Rihannan asintió en señal de comprensión.
Rihannan escuchaba su explicación mientras bebía su vino poco a poco hasta que estuvo casi vacío.
Igor vertió un poco más de vino en la copa de ella.
"Cuando el trono se convirtió en una sucesión hereditaria, la legalidad del matrimonio se convirtió en un factor importante. Si no se juega bien, puede terminar en manos de otros. En otros países, donde la autoridad real era firme, no había necesidad de preocuparse por la persona que se casara con el rey. Sus palabras eran ley. Pero por otra parte, aquí en Arundell, la aristocracia tenía un fuerte control del poder y es por eso que la costumbre de los testigos permanece hasta hoy."
"Entonces, ¿Qué se deshizo de eso...?"
"La prueba de mi propia fuerza", Igor sonrió suavemente.
Rihannan se rió. Se parecía a ese joven que una vez conoció.
"Hiciste un gran trabajo."
"El hombre con el que te casaste es capaz de todo esto".
"Ya sé de tu extraordinaria capacidad. Que yo me encuentre en este lugar es una prueba viviente."
Un hombre que podía presionar a Chrichton y tomar a la princesa como rehén para convertirla en su esposa, no era un hombre ordinario. Igor había hecho lo que nunca había soñado en el pasado.
Rihannan terminó su vino. Se sentía alegre y valiente.
"Aunque con o sin testigos, todos conocen la historia de cómo me convertí en tu esposa. En cierto modo, no es diferente de un matrimonio depredador. Condujiste tu barco a Crichton, mostrándote todo poderoso y los amenazastes para que renunciaran a su princesa. Obviamente eso no es normal."