Capítulo 73. Tortuosa belleza
Ceremonia de la boda
"......" Basil se quedó en el lugar atónito y sorprendido. ¿No era de sentido común que las mujeres amaran las flores? Si no lo hacían... bueno, él nunca había conocido una.
"Es tan obvio que no quieres responder a mi pregunta, Basil. "
Basil refunfuñó y murmuró en voz baja: "Olvídalo, ya no te daré más consejos. Esta bestia sólo me irrita."
Pero al momento siguiente, Basil puso una amplia sonrisa y aplaudió. "Por supuesto, ese no es el caso, Su Majestad. ¡Claro, claro! La Condesa apreciará verdaderamente su amable buena voluntad."
Y al final, Igor decidió arrancar conjuntos de flores del jardín para su madre. Tenía la intención de presentarle a la Condesa el debido respeto. Su madre era el único miembro de la familia que la cuidaba, pero... debido a la estrecha relación de la Condesa con su madre, la Reina, durante mucho tiempo había desarrollado una gran aversión hacia ella.
Él estaba arrepentido...
...
...
Rihannan se paró junto a la tumba de la difunta Condesa, como era de esperar, e Igor ya había colocado las flores frente a la tumba. Luego, miró a Basil.
"Todos aman las flores", respondió rápidamente Basil.
'¡¿Por qué no lo dices tú mismo, bestia?!'
Igor estaba algo nervioso... temiendo que ella lo echara, pero afortunadamente, no mostró signos de desprecio. Mientras hablaba con ella, sus ojos se posaron en la tumba del difunto Conde, y miró fríamente su tumba. Nunca había conocido la historia de su familia.
Eso fue culpa suya.
Nunca buscó enmendar su comunicación. No... sería más exacto decir que no conocía a su esposa. Sólo después de que ella falleció supo la verdad.
"Rihannan, sé que estás en una posición difícil y no puedo imaginar cómo te sientes, pero me gustaría dejarte claro que no tengo intención de tratarte como una rehén. Eres mi esposa. Te protegeré de cualquier peligro. No te pongas nerviosa, por favor", dijo nerviosamente.
Deseó de todo corazón que ella creyera en sus palabras. Él nunca le haría daño y esta sería la última vez que lo haría... sabía que forzarla a volver a esta tierra era un acto egoísta que había hecho por sí mismo... pero esta sería su última petición egoísta...
Afortunadamente, ella asintió suavemente. Era la primera vez que aceptaba su presencia. Esa suave inclinación de cabeza le produjo una felicidad extrema, su corazón revoloteando.
En su última vida, buscó el amor de la gente equivocada pero sólo le trajo dolor y sufrimiento. Ella incluso pensaba que se lo merecía, sin saber que era digna de todas las cosas maravillosas de la vida, incluso del amor... Igor sabía que ella nunca lo amaría, pero esto estaba bien. No necesitaba que ella lo amara. No era algo que él mereciera. En cambio, le daría el amor que nunca le había dado.
Y si alguna vez había una oportunidad, esperaba que un día pudiera confesar sus pecados y pedirle perdón...
Este fue su más sincero deseo frente a la tumba de su madre.
***
La entrada al palacio sucedió silenciosamente y sin previo aviso. Habían vuelto después de su victoria sobre su archienemigo y rival, Chrichton. Pensaron que pasarían por un desfile para un regreso triunfal, pero no fue así. Regresaron directamente al palacio sin una planificación particular, teniendo en cuenta que ni siquiera el pueblo de Edirne se dio cuenta de que su Rey había regresado.
Sin embargo, la ceremonia de bienvenida dentro del palacio real fue espléndida. Cuando Rihannan llegó al palacio con Igor, todos salieron corriendo de manera ordenada y dieron la bienvenida a su llegada.
"Bienvenidos, Su Majestad y Su Majestad la Reina."
Antes de que comenzara la procesión nupcial, los sirvientes del palacio ya la habían llamado Reina.
"Ella es la Matrona de Honor que cuidará de ti." Igor la presentó.
La dama de edad avanzada, sostuvo su falda e inclinó profundamente la cabeza. "El difunto duque Cessley era mi esposo. Puedes llamarme Señora Cesley, mi Reina."
Y fue entonces cuando Rihannan la reconoció. El Duque Cessley era un noble justo que tenía grandes territorios en la provincia. El linaje familiar del Duque Cessley se podía rastrear desde la fundación de Arundell. Como resultado, la Duquesa ejerció una gran influencia en los círculos sociales, pero después de la muerte de su marido, volvió a su propiedad y permaneció en ese lugar tranquilamente.
"Encantada de conocerla, Señora Cesley", sonrió Rihannan.
Aunque por dentro, no tenía intención de mantener una relación profunda con las damas de honor porque sabía que dejaría el palacio dentro de un año.
Además, no tenía buenos recuerdos de su anterior dama de honor.
Cuando vino por primera vez al palacio a una edad temprana, la Reina puso a una Condesa que era su ayudante más cercana como Dama de Honor de Rihannan. Ella y la Condesa nunca se llevaron bien. La Dama de Honor era arrogante e incluso actuaba con superioridad ante la Joven Reina.
Rihannan había vivido su vida en el palacio caminando sobre hielo delgado, donde todos le buscaban un error para actuar en su contra.
Aún así, todo estaba bien.
Se las arregló para vivir a través de las dificultades.
Especialmente aquella vez... que incluso después de un año de no poder concebir un hijo, se vio obligada a tomar medicamentos.