Capítulo 66. Le Gustaba, Después De Todo
Escenas del pasado continua...
"Su Alteza, usted estaba con mi hija, tal vez Rihannan le ha causado problemas." La dama, una condesa, saludó a Igor apresuradamente mientras la chica se escondía detrás de ella con una mirada de vergüenza al darse cuenta de su verdadera identidad.
"... Ha pasado mucho tiempo, Condesa Alessin."
"Igor, Rihannan. Tenía planes para que ustedes dos se conocieran algún día, pero esto también es genial. ¿Qué estaban haciendo ustedes dos?"
"No es nada, sólo estaba hablando con este niña", dijo Igor en voz baja y continuó, "Sólo estaba libre y aburrido. Por descuido, rodé por el suelo. No es gran cosa. No hay necesidad de preocuparse por eso, madre."
Igor sintió vergüenza al escuchar la voz complaciente de su madre. La idea de que había sido atrapado en su malvado plan le molestaba. No quería seguir su juego, así que se fue corriendo y esperaba no volver a ver a la niña.
Sin embargo, su madre tenía otros planes. Había marcado a la chica como la próxima Reina de Arundell y la llamaba al palacio real de vez en cuando. Cada vez que se encontraban, seguía siendo la misma chica pura e inocente que conoció en el jardín. Ella miraba a su madre con respeto, sin saber el motivo oculto de la reina. Cada vez que la veía, pensamientos malvados invadían su mente. Quería decirle, decirle cómo la reina la consideraba realmente... cómo un peón en sus manos, una herramienta para tener un niño... y sobre todo, decirle que huyera, que huyera tan rápido como pudiera.
Pero al final, no lo hizo. Ella era demasiado joven para entenderlo y él no tenía poder. Por otro lado, Igor pensaba que a ella no le importaría mucho ser una herramienta de la reina. Después de todo, el poder hace que la gente a haga locuras.
Con el paso del tiempo, Igor se convirtió en adulto y antes de que se diera cuenta, su voz se hizo más fuerte.
Un día, volvió a verla en el palacio real. Se había convertido en una mujer, una diosa. Su cuerpo era todavía pequeño, pero no podía ocultar la hinchazón de su pecho y la revelación de sus hermosas curvas.
Sobre todo, cuando vio su dulce y tímida sonrisa, Igor se ruborizó inconscientemente, su corazón latía erráticamente. Resultaba difícil mirarla sin sentir nada. Puso su mano sobre su corazón, confundido por una extraña sensación que lo invadía por primera vez en su vida.
Esa noche, Igor tuvo un sueño. En su sueño, se acostó en la cama con una mujer de cabello largo y plateado. En ese sueño, hizo el amor con ella. No quedó ni una sola mancha de su piel de porcelana sin tocar. Exploró, todas y cada una de sus partes. Incluso exploró su alma. Y luego, cuando se sumergieron en el placer más profundo, se empujó dentro de su lugar más profundo y se ahogaron en la forma más pura de la felicidad.
Y entonces se despertó. Su área inferior estaba mojada. Se dio cuenta de lo que acababa de suceder.
Igor se rió con desánimo. Para su amarga decepción, le gustaba, después de todo.
Y entonces, a pesar de que era un matrimonio forzado, Igor pensó que estaba bien casarse con ella como su madre quería. No la odiaba, tampoco la despreciaba. Más bien le gustaba su inocencia. Ella no parecía el tipo de persona que sonríe inocentemente y apuñala a alguien por la espalda. Igor se dio cuenta de que tal vez podría aprender a vivir con ella, aunque su madre lo deseara por el bien de sus planes.
Tal vez, realmente estaba bien.
Tal vez...
Desde entonces, Igor había hecho lo que podía. Como no podía detener el plan de su madre, retrasó la boda todo lo que pudo hasta que tuvo más poder. Si él no se hubiera resistido tanto a la boda política, ella habría venido al palacio mucho antes.
***
El tiempo pasó rápidamente.
Dentro de un mes sería el matrimonio programado de Igor y ella. Ella comenzó a quedarse en el palacio para aprender las costumbres sociales y de la realeza. Igor la observaba ocasionalmente desde lejos. Igor sabía que no era fácil para ella adaptarse en un lugar extraño. La Reina le había pedido a ella que cumpliera sus deberes a la perfección. Cada vez que ella cometía el más mínimo error, bajaba la cabeza por la vergüenza. Cada vez, se sentía intimidada y se encogía más.
Originalmente, la madre de Rihannan debería haberle dado consejos, guía y consuelo, pero eso era imposible. Su madre había fallecido demasiado pronto.
Por otra parte, la Reina le asignó una Dama de Honor para asegurarse de que lo hiciera todo bien. La Dama de Honor reportaría cada error cometido a la Reina.
E Igor tampoco pudo mostrarle ningún afecto significativo. Haciendo eso le demostraría su debilidad a su madre. También, porque era naturalmente malo para expresar sus emociones.
Pero la Reina, que tenía ojos agudos que podían descifrar a la gente, notó rápidamente el afecto de Igor por ella.
Antes del día de la boda, llevó a Igor a una habitación y dijo sus pensamientos en voz alta.
"¿No te alegras de casarte con Rihannan? Sé que te gusta. Me estoy esforzando mucho por ti. No seas así, Igor."