"......"
"¿Cuántos minutos faltan para llegar a Lunazel?" Park Noah tosió, intentando cambiar de tema.
"No estamos ni a mitad de camino. Ahora, ¿Te estás comportando de esta manera, y hace sólo tres segundos juraste contarme todo? Respóndeme, hace dos años, cuando transmigraste al cuerpo de Eleonora Asil, dijiste que fuiste inmediatamente a Sorrent. Entonces, ¿Cómo supiste de la existencia de Lenia Valtalere? ¿Y por qué crees que ella es el cerebro de la desaparición del huevo?" Kyle Leonard la miró, bombardeándola con preguntas. Park Noah se retorció bajo la mirada penetrante del investigador.
"¡Lo vi en mis sueños! ¡En mis sueños!" Park Noah habló de forma espontánea.
"¿Soñaste con el marcado de Lenia Valtalere con el dragón? ¿Realmente crees que me creería algo...?"
El tren se sacudió tremendamente, un estruendo vibró en todas las cabinas. Park Noah se levantó de su asiento y rápidamente agarró a Muell que casi se cae de su regazo. El viento sopló y el periódico cayó de forma desordenada al suelo.
"Este tren... Qué terrible viaje. Los ferrocarriles de Lunazel son demasiado anticuados." Park Noah refunfuñó, poniendo a Muell de nuevo en su regazo y lo sujetó con fuerza. Levantando su mirada, notó la extraña expresión de Kyle Leonard.
"Señor, ¿Qué pasa?"
"Señorita Noah, use su capucha. Cúbrase la cara."
"¿Eh?" Park Noah frunció el ceño. Sin embargo, siguió la orden del investigador, cubriendo rápidamente su cara con su túnica.
Toc.
Sus cabezas se voltearon hacia la puerta en un instante. Alguien sonreía detrás de la ventana de su cabina, una mujer con un pañuelo azul brillante envuelto alrededor de su cabeza y un delantal del mismo color. Sus manos sostenían una gran bandeja llena de cosas diferentes. La mujer volvió a tocar su puerta.
"Debe ser una empleada, que distribuye periódicos y comida." Kyle Leonard murmuró, mirando a la mujer.
"Oh, ¿En serio?" Park Noah puso a Muell a un lado y se levantó de su asiento. 'Buen momento. Estaba empezando a tener hambre. Todavía nos queda una hora más o menos para llegar, así que me gustaría algo de beber...'
Agarró la manija de su cabina y la bajó. De repente, algo detuvo a Park Noah. Kyle Leonard puso su pie detrás de la puerta, sacudiendo la cabeza hacia la vendedora. La mujer sonrió en respuesta y se alejó de su habitación.
No fue hasta que estuvo completamente fuera de la vista que Park Noah suspiró, girándose hacia el investigador que seguía mirando atentamente por la ventana, mientras sujetaba un revólver plateado en su mano.
"¿Por qué me bloqueaste?" Park Noah preguntó.
Kyle Leonard quitó el pie de la puerta y habló con calma. "¿No te he dicho que seas cautelosa? Te levantaste sin avisar."
"......" Park Noah se asomó por la ventana y murmuró en voz baja: "No se detuvo en otros. Siguió adelante."
"Sí."
"Nuestra habitación está justo en el medio de este tren, y hay una pareja de ancianos en la cabina de al lado."
"Así es", afirmó Kyle Leonard.
La mujer desapareció en el vagón delantero del tren, pasando por varias cabinas sin llamar a sus puertas. Park Noah tragó, "¿Cuánto tiempo hace que lo sabes?"
"Desde que la escuché acercarse. No se sirven comidas en los trenes durante los viajes cortos."
"Dijiste que era una empleada."
"Me refería a que estaba disfrazada de empleada."
Park Noah miró a Kyle Leonard. Él seguía mirando por la ventana, girando el revólver en sus dedos. Su rostro inexpresivo le hizo difícil a Park Noah adivinar lo que tenía en mente.
"Le dije, Señorita Noah. Habrán muchas cosas en el futuro. No porque usted sea la dueña del dragón, sino porque está en el cuerpo de Eleonora Asil."
"......"
"El asesino de Eleonora, que se las arregló para matar a la bruja más fuerte de Laurent sin dejar ningún rasguño en su cuerpo. Es esa persona de la que deberías cuidarte, o mejor dicho, no encontrarte nunca."
Park Noah permaneció en silencio.
"De hecho, no sé si es correcto decir 'persona'. No sabemos cuántos están detrás de su muerte."
"He estado bien hasta ahora... Bueno, no ha pasado nada en los últimos dos años." Park Noah suspiró, consolándose a sí misma.
"Hasta ahora, has estado escondida en Sorrent. Estabas a salvo en ese entonces, pero ahora, cuando repentinamente emerges al mundo, la historia cambia."
"......"
"De todos modos, creo que ya lo sabes. Ahora, ¿Dónde estábamos?" Sus ojos violetas destellaban, mirando intensamente sus orbes azules.
"Entonces, ¿Cómo supiste de Lenia Valtalere?"