Atrapado en una situación ineludible, Kyle Leonard se sumergió en sus pensamientos que se centraban en el misterio detrás de la muerte de Eleonora Asil y el ladrón anónimo del huevo de dragón.
¿Qué caso debería ser prioritario cuando el investigador regresara a la capital: la desconcertante muerte de la bruja o la repentina desaparición del huevo de dragón?
Ciertamente, estos sucesos no están completamente separados, tienen una relación de alguna manera. Sin embargo, la secuencia de eventos debe ser diferente.
Numerosas preguntas cubrieron su mente. ¿Cómo y cuándo murió Eleonora Asil? ¿Quién fue el que robó el huevo de dragón de la fortaleza de Laurent? ¿Fue un cómplice de la bruja que se lo mandó a propósito? ¿O estaba destinado a Park Noah? Si es así, ¿Cuántos son los que conocen su verdadera identidad?
"Ya hemos terminado, señor. Vámonos de aquí."
Cuando Kyle Leonard recobró sus sentidos, varias bolsas de compras colgaban de su brazo. Atónito, forzó una sonrisa. 'Me llamó para hacer esto. Un asistente'.
Después de haber dejado el Ropero de Noche Feliz de Frill, Park Noah vagó por las calles durante algún tiempo, de la mano con el niño de cabello rizado. Kyle Leonard registró las bolsas de la compra, frunciendo el ceño porque no había comprado mucho: dos túnicas blancas, un pañuelo, un sombrero de ala ancha, y algunos bocadillos para Muell.
Los vientos soplaban en sus caras mientras deambulaban, sus cabellos se despeinaban. De repente, Park Noah se detuvo; han llegado al mercado.
"Señor Leonard, aquí es." Señaló a algún lugar del mercado.
"¿Qué?"
"Donde encontré a Mu..."
"Oh, sí..." Kyle Leonard dudó en responder. Park Noah le hizo señas, y él aceleró su paso hacia el lugar donde ella le señaló. "Pensé que hoy era un mayordomo." Se volteó hacia ella, confundido.
"Si te vas mañana, tendrás que tomar toda la información que puedas obtener de Sorrent, y gracias por todo."
Kyle Leonard se sorprendió, habiendo tomado en serio lo que Park Noah le dijo antes. 'Es cierto. Entonces, lo del mayordomo fue sólo una broma'.
Examinó la cercanía donde Park Noah encontró el huevo para detectar cualquier rastro de colisión de maná o probables testigos de la presencia del huevo.
Kyle Leonard se acercó a un comerciante y le preguntó: "Disculpe, ¿Ha visto un huevo de este tamaño por aquí?"
"No, señor." El comerciante siguió trabajando.
Como esperaba, nadie había visto un huevo tan grande como la cabeza de un niño.
"Entonces, ¿Ha habido algún forastero en Sorrent recientemente?" Kyle Leonard insistió en buscar una pista.
El comerciante se detuvo como si recordara algo. "Hm... podría haber habido."
La lista de extranjeros que ingresan en Sorrent ya ha sido revisada por Kyle Leonard desde su primera llegada. Afortunadamente, podía obtener información esencial del comerciante.
"¿Se ha encontrado con mujeres extranjeras?" Él añadió.
"¿Se ha encontrado con mujeres extranjeras?" Él añadió.
"¿Mujeres extranjeras? Bueno, he visto mujeres. Mmm, una madre de un niño y una anciana con cabello gris... y una joven."
Una joven. Kyle Leonard inmediatamente sacó su cuaderno y anotó todo lo que el hombre decía en él. Siguieron unas cuantas preguntas más.
"¿Recuerda el aspecto de la mujer?"
"No pude verla claramente porque llevaba un abrigo que casi le cubría toda la cara."
"¿Hablaron?"
"Sí. Estaba a punto de montar mi puesto y me preguntó a qué hora iba el tren a Tezeba."
Kyle Leonard se detuvo para escribir las notas importantes. Una mujer de la capital.
"Bueno, ¿Cuándo fue?" Él continuó, frunciendo el ceño.
El comerciante se rascó la cabeza, tratando de recordar su encuentro. "Bueno, no sé la fecha. Estaba apurado en ese momento, pero dije que el tren a Tezeba salía en una hora. Hay un tren desde este campo hacia la capital una vez cada cuatro días, así que... hace una semana."
'Hace una semana. ¿No fue entonces cuando llegué a Sorrent? De ninguna manera, ¿El criminal se subió a ese mismo tren que iba de vuelta a la capital?'
Kyle Leonard apretó su mandíbula. Si lo que dijo el comerciante era cierto, entonces, dejó escapar fácilmente al verdadero culpable. El sospechoso ya había llegado a la capital mientras trataba con Park Noah.
Después de una ronda de preguntas a extraños en el mercado, Kyle Leonard descubrió que había bastantes personas que vieron a la mujer de Tezeba; el dueño de la única posada en Sorrent, el chef del primer piso de la posada y el dueño de una casa de té al otro lado del callejón donde se encontró el huevo de dragón.
"Vaya... Eso es realmente espeluznante." Park Noah murmuró mientras lo seguía. "¿Quiere decir que podría haber estado viéndome recoger el huevo...?" Preguntó incrédula, los pelos de su piel se erizaron.
Kyle Leonard miró a la mujer que apenas le llegaba a los hombros, un pliegue se formó en su frente al escuchar su comentario; sus ojos violetas se entrecerraron por la sospecha.